El Gobierno estudia suprimir las pensiones de viudedad para personas con altos ingresos

El Gobierno reformar¨¢ las pensiones a lo largo de 1995, pero ya ha empezado a preparar los primeros borradores. En ellos se incluye hacer incompatible la pensi¨®n de viudedad con las rentas altas: que los futuros viudos o viudas que disfruten de otros ingresos -su salario, una pensi¨®n propia alta o rentas elevadas de otro tipo- no tengan derecho a percibir la pensi¨®n del c¨®nyuge fallecido. Con el objetivo de reducir el gasto total, se prev¨¦ incluir incentivos para retrasar la jubilaci¨®n hasta los 67 a?os. Los primeros escenarios recogen asimismo la ampliaci¨®n del periodo de c¨¢lculo de la pensi¨®n -ahora situado en ocho a?os- hasta los 12 o 15 a?os que han empezado a aplicar Alemania y Francia.

Los ministerios de Econom¨ªa y Trabajo est¨¢n elaborando ya los primeros documentos para modificar el sistema p¨²blico de pensiones. Una reforma para la que cuentan con el trabajo paralelo de una ponencia del Parlamento, en la que est¨¢n representados todos los partidos Pol¨ªticos, y que debe entregar a finales de este a?o sus conclusiones sobre el futuro sistema de Seguridad Social.En los escenarios que dise?a el Gobierno se precisa d¨®nde es posible introducir modificaciones. La mayor esperanza de vida es un factor esencial que se est¨¢ tomando en cuenta para la reforma del sistema p¨²blico. En 1966, el tiempo medio de cobro de pensi¨®n era de 10 a?os, en 1994 ser¨¢ de 18 a?os y subir¨¢ a 25 a?os dentro de una d¨¦cada. Por ello y para recortar el gasto total de pensiones el Gobierno quiere retrasar la edad de jubilaci¨®n desde los 65 a?os hasta los 67 a?os mediante incentivos y sin tener que recurrir a una modificaci¨®n legal. El sistema puede ser simplemente compensar la permanencia en el puesto de trabajo, eliminar la jubilaci¨®n obligatoria para los funcionarios y que en los convenios no se pacte la expulsi¨®n del trabajador.

Para las pensiones de jubilaci¨®n -el 50% del total-, se pretende aumentar el periodo de carencia, es decir los a?os de la vida activa sobre los que se establece el monto de la pensi¨®n. Ahora se calcula en base a las cotizaciones de ocho a?os, dos de ellos deben estar entre los cinco a?os anteriores a la jubilaci¨®n. La referencia para el Gobierno es la reforma que han empezado a aplicar Alemania y Francia, que ten¨ªan un periodo de carencia de 10. a?os y lo est¨¢n aumentando hasta los 12 y 15 a?os.

En las prestaciones de invalidez -el 24% de las pensiones-, la principal v¨ªa de actuaci¨®n ser¨¢ atajar el fraude. Se quiere evitar que se conviertan en un refugio en el que sigan entrando los trabajadores excedentes de las empresas y sectores con procesos de reconversi¨®n. El control y la inspecci¨®n se intensificar¨¢n de manera especial y las unidades de valoraci¨®n pasar¨¢n a depender de la Seguridad Social. Tambi¨¦n la incapacidad laboral transitoria y la invalidez provisional van a sufrir una profunda reforma, en este caso urgente en el segundo semestre de 1994. Las dos figuras desaparecen y ser¨¢n sustituidas por la incapacidad temporal, en la que un trabajador podr¨¢ permanecer dos a?os -frente a los seis actuales-.

La modificaci¨®n de las pensiones de viudedad -el 26% del total- es el punto m¨¢s pol¨¦mico. Esas prestaciones se gestaron como "una protecci¨®n derivada" para los familiares de la persona fallecida y en una ¨¦poca en que la mujer no se hab¨ªa incorporado al mundo del trabajo. Ahora la cobran por igual viudas y viudos, al margen del nivel que tengan sus rentas, y el Gobierno se plantea hacer incompatible el cobro de esa pensi¨®n para las personas que tengan sus propios ingresos y con un nivel elevado.