Un matrimonio pide a un juez que interne a dos de sus hijas porque son "muy rebeldes"

Un matrimonio del barrio de Vallecas pidi¨® hace unos d¨ªas a un juez que internase a dos de sus hijas en un centro de menores porque, seg¨²n explic¨® el padre, "son muy rebeldes". A su vez, las dos menores -que tienen 16 y 17 a?os- han denunciado a los padres por malos tratos. Una de las adolescentes dispone de un informe m¨¦dico que indica que sufri¨® pu?etazos en el rostro.El matrimonio hizo esta petici¨®n despu¨¦s de que el juez citase a ambos c¨®nyuges para que declararan por presuntos malos tratos a sus hijas. En vista de la deteriorada relaci¨®n familiar, el juez decret¨® el pasado 25 de febrero el ingreso de ambas chicas en el centro de menores Hortaleza, dependiente de la Comunidad de Madrid.

La convivencia entre estos padres y sus dos hijas (de las tres que hay en el matrimonio) se enturbi¨® definitivamente el pasado 24 de febrero. Ese d¨ªa, L. M., de 17 a?os, una de las menores que suscriben la denuncia por malos tratos, discuti¨® con su hermana mayor, A. M., de 19 a?os.

Seg¨²n L. M., su padre, como casi siempre, sali¨® en defensa de su hermana mayor y a ella le propin¨® varios golpes. Despu¨¦s, afirma esa menor, el padre le dijo que se fuera de casa. "S¨ª me voy, pero te voy a denunciar por pegarme", repuso ella. Al o¨ªr eso, el padre le impidi¨® la salida de casa y volvi¨® a agredirla, seg¨²n la versi¨®n de la menor.

Otra hija del matrimonio, R. M., de 16 a?os, ha ratificado al juez que su padre agredi¨® a su hermana despu¨¦s de que ¨¦sta discutiese con la mayor. R. M., que tambi¨¦n se halla ahora internada en el centro de Hortaleza, afirma que ella tambi¨¦n ha sido v¨ªctima de malos tratos por parte de sus padres.

Sobre los malos tratos, el matrimonio ha declarado al juez que tienen problemas con dos de sus hijas, especialmente con L. M., desde hace tres a?os, seg¨²n han informado fuentes jur¨ªdicas. El padre afirma que sali¨® en defensa de su hija mayor porque la menor, L. M., hab¨ªa propiciado la discusi¨®n y, adem¨¢s, porque ¨¦l mismo vio c¨®mo pegaba a la mayor de sus hijas.

"Ante eso", explica el padre, "le llam¨¦ la atenci¨®n, pero ella nos solt¨®, a su madre y a m¨ª: 'Iros a la mierda, puta y cabr¨®n'. Me puse nervioso y le di dos guantazos", admite.