El asesinato de Colosio sume a M¨¦xico en la confusi¨®n

El reloj marcaba las 17.09 hora local del mi¨¦rcoles (2.09 de la madrugada de ayer en Espa?a). A esa hora, dos balazos acabaron con Luis Donaldo Colosio, candidato del gubernamental Partido Revolucionario Institucional (PRI) a la presidencia de M¨¦xico, durante un mitin en Tijuana, ciudad fronteriza con EE UU. El asesino y un acompa?ante fueron detenidos, pero el principal aspirante a la presidencia del pa¨ªs en las elecciones del 21 de agosto muri¨® en un quir¨®fano tres horas despu¨¦s. El presidente de M¨¦xico, Carlos Salinas de Gortari, prometi¨® mantener "vigente el r¨¦gimen de libertades y el orden constitucional" y mostr¨® su consternaci¨®n. Todos los interrogantes surgen ahora: qui¨¦n orden¨® su muerte y qu¨¦ va a suceder en la agitada pol¨ªtica mexicana.

El pa¨ªs, que ayer vivi¨® una jornada de luto nacional, se encuentra sumido en un estado de conmoci¨®n. Los restos de Coloslo, en un ata¨²d cubierto con la bandera mexicana, llegaron a primera hora a la capital, donde fueron incinerados por la tarde. Miles de personas se apostaron en las calles para ver pasar al cortejo f¨²nebre. Los gritos de "viva Colosio", una lluvia de flores y algunos llantos perdidos acompa?aron el recorrido de la caravana desde la funeraria al Pante¨®n de los Dolores.Colosio, de 44 a?os, acababa de terminar su discurso en la colonia Lomas Taurinas, una deprimida barriada de la ciudad de Tijuar¨ªa (Estado de Baja California, fronterizo con Estados Unidos), y hab¨ªa descendido del estrado para saludar a sus seguidores. Un hombre joven, vestido de negro, sali¨® de entre la multitud con un rev¨®lver de calibre 38. Todo fue cuesti¨®n de segundos. Colosio se desplom¨®, ensangrentado, mientras decenas de personas corr¨ªan aterrorizadas. Una bala le alcanz¨® en el abdomen. La otra le atraves¨® el cr¨¢neo.

Los guardaespaldas se abalanzaron sobre el individuo y otro hombre que le acompa?aba. Les arrastraron por el pelo y les golpearon. Cuatro horas despu¨¦s, la Procuradur¨ªa General de la Rep¨²blica facilitaba en un comunicado la identidad de los detenidos. El presunto autor material del atentado se llama Mario Aburto Mart¨ªnez, tiene 23 a?os y es originario del Estado de Michoac¨¢n, aunque viv¨ªa en Tijuana, donde trabajaba en un taller mec¨¢nico.Sin filiaci¨®n conocidaSeg¨²n este documento, Aburto dijo ser autor de "varios libros sobre temas pacifistas" y afirm¨® que, aunque se le torturase, nunca confesar¨ªa. Casi ning¨²n dato se conoce sobre su compa?ero, Vicente Mayoral Valenzuela, de 47 a?os. El procurador general de la Rep¨²blica, Diego Valad¨¦s, anunci¨® en la tarde de ayer que Aburto se confes¨® autor del atentado. El asesino, que compr¨® el rev¨®lver, de fabricaci¨®n brasile?a, hace varias semanas, ser¨¢ trasladado a un centro de alta seguridad mientras su compa?ero podr¨ªa ser puesto en libertad en las pr¨®ximas horas si no se re¨²nen pruebas contra ¨¦l. La polic¨ªa no ha facilitado ninguna informaci¨®n sobre la filiaci¨®n pol¨ªtica de Aburto.Las primeras noticias del atentado dejaron al pa¨ªs sin aliento. Los mexicanos segu¨ªan minuto a minuto los acontecimientos. Colosio, a¨²n con vida, fue ingresado en el hospital de Tijuana. Su esposa, Diana Laura Riojas permanec¨ªa en un pasillo, de pie, con un rosario en la mano. Minutos antes hab¨ªa llamado a su casa y ordenado que no se encendiera el televisor para que sus hijos Luis Donaldo, de 12 a?os, y Mariana, de uno, no se enterasen de lo ocurrido.

A las 22.30 de la noche, hora local, (siete y media de la ma?ana de ayer, hora espa?ola), el PRI comunicaba oficialmente el fallecimiento del candidato.Ya entrada la medianoche del mi¨¦rcoles, hora local de M¨¦xico, el presidente se dirigi¨® al pa¨ªs por televisi¨®n. Vestido de negro y con gesto adusto, Salinas prometi¨® esclarecer el atentado que acab¨® con la vida de "un amigo" y pidi¨® a los mexicanos que mantuvieran la serenidad y el valor para fortalecer las instituciones. "Que la voz de la concordia", dijo, "se escuche en todos los rincones del pa¨ªs".

Ayer, Salinas de Gortari, resalt¨® su compromiso de mantener "vigente el r¨¦gimen de libertades y el orden constitucional", al tiempo que se declar¨® dispuesto a esclarecer el crimen hasta el final. El mandatario mexicano nombr¨® ayer al jurista Santiago O?ate fiscal especial para el caso.

La aparici¨®n de Colosio en la escena pol¨ªtica result¨® una sorpresa, ya que todos los indicios apuntaban el nombre de Manuel Camacho, entonces alcalde de M¨¦xico y m¨¢s tarde ministro de Relaciones Exteriores y comisionado para la paz en Chiapas tras la revuelta zapatista del pasado 1 de enero.

Manuel Camacho, que desde su puesto oscureci¨® la campa?a de Colosio al aparecer como un eventual candidato de recambio, se?al¨® ayer que el asesinato de Colosio era un "atentado contra la paz y la dernocracia". Precisamente el lunes, Camacho anunci¨® p¨²blicamente que no se presentar¨ªa a las presidenciales para evitar una mayor desestabilizaci¨®n de la vida pol¨ªtica mexicana. El comisionado lleg¨® ayer a la capital desde Chiapas. Su presencia en los funerales fue recibida con gritos de "m¨¢tenlo" lanzados por furibundos militantes del PRI.

Todos los partidos pol¨ªticos expresaron su repulsa. Tres de ellos, el derechista Partido de Acci¨®n Nacional (PAN), que gobierna Tijuana; el Partido del Trabajo y el Partido Aut¨¦ntico de la Revoluci¨®n Mexicana, anunciaron la suspensi¨®n indefinida de sus actividades.El m¨¢ximo contrincante del PRI, el Partido de la Revoluci¨®n Democr¨¢tica (PRD), de Cuauht¨¦moc C¨¢rdenas, interrumpir¨¢ sus actividades durante tres d¨ªas en espera de los acontecimientos.