El Oroquieta juega la final de f¨²tbol femenino de la Copa de la Reina

El Oroquieta madrile?o tiene hoy la posibilidad de demostrar que actualmente es, y con diferencia, el mejor equipo del f¨²tbol femenino espa?ol. El conjunto de Villaverde se enfrenta en Las Rozas, a partir de las doce de la ma?ana, al F¨²tbol Club Barcelona en la final de la Copa de la Reina.Los enormes problemas econ¨®micos del equipo madrile?o, que han estado en m¨¢s de una ocasi¨®n a punto de obligarle a retirarse de las competiciones oficiales, siguen sin ser obst¨¢culo para la consecuci¨®n de triunfos.

Jos¨¦ Calzada, el presidente del club, persiste en sus quejas por lo dif¨ªcil que le resulta al equipo sobrevivir: "Es posible que propongamos al resto de equipos madrile?os la retirada de la competici¨®n. No es l¨®gico que al campe¨®n de Liga y finalista de Copa ning¨²n organismo oficial le haga el m¨¢s m¨ªnimo caso".

Tras ganar con total brillantez el campeonato de Liga, hace aproximadamente un mes, el Oroquieta comenz¨® su trayectoria en el torneo de Copa, en el que ha acumulado un bagaje que apenas admite comentarios: seis partidos jugados y seis victorias, con 22 goles a favor.

Tres equipos quedaron en el camino, aplastados por la apisonadora de Villaverde: el Alcobendas, el Butarque y el A?orga de San Sebasti¨¢n, uno de los mejores equipos de la competici¨®n espa?ola. Pero ninguno de ellos tuvo la m¨¢s m¨ªnima posibilidad de superar al campe¨®n liguero, el Oroquieta.

Hoy, en el campo de f¨²tbol Dehesa de Navalcarb¨®n, en Las Rozas, el Oroquieta tiene la posibilidad de conseguir el primer doblete (Liga y Copa) de su historia, en la que ya figuran dos torneos ligueros y uno copero. Enfrente, con la pretensi¨®n de evitarlo, estar¨¢ el Barcelona, un conjunto que, pese a recibir todo el apoyo, sobre todo monetario, del club azulgrana, lleva dos a?os sin superar a las madrile?as.

Tan s¨®lo 500 pesetas cuesta la entrada para ver in situ la mejor de las finales posibles del f¨²tbol femenino espa?ol, en la que el Oroquieta es, resultados mandan, el m¨¢ximo favorito.