El Rayito de la guitarra

De tal palo, tal astilla. Hijo de Antonio Rayo, un guitarrista espa?ol, y de Naeko Gibo, una japonesa bailaora de flamenco, Rayito hered¨® la sensibilidad musical de sus padres. "De peque?o, siempre me imitaba con la guitarra y escuchaba los toques de Paco de Luc¨ªa y las canciones de Manzanita. Desde entonces decid¨ª dedicarme a ayudar a mi hijo en su carrera musical", dice el padre, que adem¨¢s le acompa?a con la guitarra en escena.Hace pocos d¨ªas, Rayito ingres¨® en la Sociedad General de Autores de Espa?a (SGAE), donde present¨® su primer disco con un padrino de excepci¨®n: el maestro Joaqu¨ªn Rodrigo, que le dedic¨® en su propia casa su gran obra, El concierto de Aranjuez, y se deleit¨® con la guitarra del miembro m¨¢s joven de las sociedades de autores europeas.

Desde antes de tener uso de raz¨®n, Rayito se ha pegado a la guitarra como una parte m¨¢s de su existencia. A los dos a?os y medio grab¨® un programa para la televisi¨®n japonesa; a los cuatro dio un recital en el teatro Alcal¨¢; a los siete, otro en el teatro Apolo. Ten¨ªa ocho a?os cuando apareci¨® en las pantallas de televisi¨®n del mundo entero, que retransmitieron en 1991 el Festival de Danny Kaye celebrado en La Haya a beneficio del Unief. El a?o pasado represent¨® a Espa?a en el certamen italiano Bravo brav¨ªsimo, donde participaron 20 ni?os prodigio de todo el mundo. Obtuvo el primer premio y se embols¨® un mill¨®n y medio de pesetas.

Pero Rayito no es un ni?o a una guitarra pegado. Le encantan el f¨²tbol, el Real Madrid, el pimp¨®n, los videojuegos y las hamburguesas. Sin demasiado esfuerzo saca buenas notas en sus estudios de sexto de EGB y es uno de los ni?os m¨¢s traviesos de su clase. Pero su futuro parece que se juega entre seis cuerdas. "A los pocos minutos de escucharlo por primera vez, supe que estaba frente a un ser excepcional. Su mano no le da, pero cuando toca la guitarra se descoyunta para abarcar todo lo necesario", dice Fernando Arbex, antiguo bater¨ªa de Los Brincos y hoy productor y representante de Rayito. "No es s¨®lo que tenga una manera depurada de interpretar; lo que es absolutamente inexplicable es que, con tan s¨®lo 10 a?os y dos de solfeo, interprete con la sensibilidad y el sentimiento de un artista consumado. Hasta que no se aprende un tema no cesa de tocar, y lo hace en una forma natural y espont¨¢nea".

"Nunca me pongo nervioso, porque con nervios no puedo concentrarme ni tocar bien", afirma Rayito, que en su primer disco interpreta composiciones ligeras, flamenco, ritmos de jazz, piezas cl¨¢sicas, baladas y el popular Tico tico.

Los que est¨¢n a su lado no tienen ninguna prisa en acelerar la carrera de Rayito. Sus padres y Arbex prefieren ir con calma. "La idea es estimular su capacidad creativa para la composici¨®n, porque su t¨¦cnica interpretativa es tan excelente que apenas puede mejorar", dice Arbex. "No pretendemos crear un monstruo, sino un ser integral y equilibrado en todos sus aspectos".