Scalfaro deja en el limbo el plan de Berlusconi de separarse de Fininvest

Las objeciones constitucionales del presidente italiano, Oscar Luigi Scalfaro, al plan de Silvio Berlusconi de poner su imperio econ¨®mico bajo el control de un "alto comit¨¦ de experto" encabezado por el propio Scalfaro han vuelto a dejar en el aire la soluci¨®n al explosivo conflicto de intereses entre el Berlusconi primer ministro y el Berlusconi cabeza del holding Fininvest. El magnate poI¨ªtico respondi¨® ayer con el silencio al rechazo presidencial.

Scalfaro considera que es un buen principio la decisi¨®n de Berlusconi de separar sus intereses privados (con un volumen de negocio que ronda casi el bill¨®n de pesetas) de los p¨²blicos, es decir la jefatura de un Gobierno de coalici¨®n que dura ya diez semanas. El primer ministro pretend¨ªa presentar en septiembre un proyecto de ley seg¨²n el cual Scalfaro, los presidentes de las dos c¨¢maras y autoridades antitruste deb¨ªan nombrar un alto comit¨¦ de expertos o garantes para dirigir Fininvest mientras ¨¦l ocupara el. palacio Chigi.Del Quirinal sali¨® de inmediato un comunicado en el que se indicaba que "no parece factible" asumir tal propuesta, a la luz del "dictado constitucional" que indica "taxativamente los nombramientos competencia" de la presidencia de la Rep¨²blica. No obstante, el comunicado se?alaba que- habr¨¢ que esperar a las conclusiones de los expertos nombrados en mayo para encontrar una salida al conflicto de intereses antes de expresar "un parecer razonable".

El anuncio de este proyecto de separaci¨®n entre las responsabilidades empresariales y pol¨ªticas de Berlusconi -realizado a bombo y platillo el viernes por el propio primer ministro, casi al mismo tiempo que su hermano menor, Paolo, se entregaba a los jueces para responder de presuntos delitos de soborno a funcionarios estatales- no ha servido para calmar las turbulentas aguas pol¨ªticas en que se mueve el primer ministro. "Scalfaro: alto a Berlus coni", "Scalfaro no est¨¢ de acuerdo", "Scalfaro frena a Berlusconi", "Scalfaro bloquea a Il Cavaliere" eran algunos de los t¨ªtulos de ayer en la prensa.

Cr¨ªticas al proyecto

"Crear, como hace el proyecto un cintur¨®n de castidad de gesti¨®n y patrimonial entre el conglomerado de intereses [de Fininvest] y su propietario no resuelve el problema" ni garantiza que ciertos "procedimientos gubernativos no sean adoptados con la sospecha (fundada o no) de que acaben favoreciendo a este o aquel sector de la multiforme actividad del presidente empresario en excedencia", dec¨ªa La Repubblica, siempre cr¨ªtico con Berlusconi. Pero incluso el nada sospechoso de antiberlusconismo Corriere della Sera abundaba en la idea. El plan del primer ministro "no permite al garante vender o comprar, atribuci¨®n que mantiene el propietario, el cual, pese a las trabas que se impongan, hasta ahora inexistentes, no pierde jam¨¢s de vista su propiedad y puede operar para favorecer sus intereses".

La tempestad pol¨ªtica, en cualquier caso, amain¨® ayer tras la trepidente semana en la que estuvo huido de la justicia Paolo Berlusconi y se sentenci¨® a ocho a?os de prisi¨®n al ex primer ministro socialista Bettino Craxi, entre otros notables corruptos italianos.

En una carta enviada desde su refugio de Hamamet (T¨²nez), Craxi volvi¨® anoche a arremeter contra la justicia al asegurar que "cuando los jueces tienen el poder de prefabricar el proceso contra un acusado de notoriedad, el estado de Derecho acaba y lo sustituye la ley de la fuerza".

La ¨²nica buena noticia que pudo paladear el primer ministro fue la elecci¨®n del fil¨®sofo cat¨®lico Rocco Buttiglione como primer secretario del Partido Popular Italiano (PPI). Buttiglione, de 46 a?os y muy pr¨®ximo al papa Juan Pablo II, fue elegido despu¨¦s de tres d¨ªas de congreso del partido heredero de la de extinta Democracia Cristiana con el 56,1% de los votos de los congresistas.

El ex ministro del Interior Nicola Mancino, su rival, apoyado por la corriente de izquierda del PPI, obtuvo el 43,9%. "Han ganado los que quieren entrar en el Gobierno", dijo Mancino. Para Mino Martinazzoli, el ¨²ltimo l¨ªder democristiano, Buttiglione no es sino "el sosias de Berlusconi".