El candidato socialdem¨®crata Cardoso, vence por mayor¨ªa absoluta en las elecciones de Brasil
Millones de octavillas cubr¨ªan todav¨ªa ayer las grandes avenidas de S¨¢o Paulo prometiendo todas la definitiva. resurrecci¨®n nacional despu¨¦s de d¨¦cadas de postraci¨®n e injusticia. Paulo Fortunato, de 27 a?os, abogado, uno de los 95 millones de votantes brasile?os en las mayores elecciones generales del pa¨ªs, piensa que Fernando Henrique Cardoso arrasar¨¢. Seg¨²n las primeras proyecciones oficiales, Cardoso habr¨ªa obtenido el 46% de los votos, lo que significa mayor¨ªa absoluta. El izquierdista Lula habr¨ªa logrado el 23% de los sufragios.
ENVIADO ESPECIAL A las 12 del mediod¨ªa (hora local), jovial y en mangas de camisa, votaba el favorito en un colegio del centro de esta gigantesca urbe. Emplazadas c¨¢maras y focos desde las ocho de la ma?ana, creciendo por momentos el n¨²mero, fervor y audacia en la aproximaci¨®n al l¨ªder, Cardoso sobrevivi¨® al sofoco y desposit¨® el sufragio."?Qu¨¦ hombre tan tranquilo!", comentaba un colega, en soliloquio. "?Qu¨¦ piensa el futuro presidente?" "?Qu¨¦ nos tiene que decir el hombre que ha conseguido traer la estabilidad a Brasil?", empujaba otro, a gritos y sin ninguna posibilidad de respuesta en aquel caos. "Gracias, muchas gracias" acert¨® a decir el candidato, de 63 a?os, en su calvario hacia su autom¨®vil.
Antes lo hab¨ªa dicho todo: modernizar¨¢ las estructuras pol¨ªticas y econ¨®micas del pa¨ªs y el objetivo fundamental de su gesti¨®n ser¨¢ la igualdad porque, en su opini¨®n, Brasil no es tanto un pa¨ªs subdesarrollado como un pa¨ªs injusto. "Nuestro objetivo s¨®lo puede ser este: la abolici¨®n de la miseria y de la brutal concentraci¨®n de renta", se?al¨®.
Luiz Inacio Da Silva, Lula, de 48 a?os, todav¨ªa regordete pese a los 41.000 kil¨®metros recorridos en campa?a, era acogotado por la prensa nacional e internacional en un caf¨¦ servido poco despu¨¦s de las nueve de la ma?ana.
A pesar de la desfavorable tendencia que exhiben todos los sondeos, el ex sindicalista y l¨ªder del Partido de los Trabajadores se mostr¨® confiado en pasar a la segunda vuelta, el 15 de noviembre. "Soy el candidato mejor preparado para resolver los terribles problema de Brasil", dijo. Y Lula volvi¨® a acusar: los comicios no son enteramente leg¨ªtimos porque "la m¨¢quina del Gobierno trabaj¨® a todo vapor" en apoyo de las aspiraciones de Cardoso, que gana por el 46%, 47% o el 49% contra el 220/1) que los estudios demosc¨®picos asignan a su inmediato rival.
A las 10.55 horas, Da Silva vot¨® en un colegio de esta ciudad escoltado por una hinchada que les estruj¨® con banderas y ¨¢nimos. "Ol¨¦, ol¨¦, ol¨¢, Lul¨¢, Lul¨¢- ", coreaba un grupo, con voces que, incapaces de subir m¨¢s en los v¨ªtores, se tornaban en emocionados gallos. La esposa del candidato, su acompa?ante en muchos actos, atribuy¨® el baj¨®n mostrado por los sondeos a la parcialidad de la mayor¨ªa de los medios de comunicaci¨®n. "Hicieron de Fernando Henrique Cardoso un pr¨ªncipe y de Lula un sapo", protest¨® la esposa.
Y el populista Leonel Brizola, uno de los ocho aspirantes a la presidencia, se uni¨® a las denuncias con imputaciones que destilaban despecho por la desfavorable colocaci¨®n que se le atribuye en la tendencia del voto. , El Plan Real [que a partir de julio control¨® una inflaci¨®n desbocada y ha sido la baza electoral fundamental de Cardoso] fue electorero y es tan inviable como lo fue el Cruzado", sentenci¨® Brizola. "Lo que no han conseguido todav¨ªa, lo lograr¨¢n con el fraude a trav¨¦s de los computadores".
Optimismo
Con un optimismo en el porvenir desconocido en anteriores comicios, una fluida asistencia a las urnas y sin apenas incidentes, dos favoritos decentes intencionados polarizaron la emisi¨®n del voto en unas eleccionescon 11.964 candidatos a la presidencia y vicepresidencia de la Rep¨²blica, la gobernaci¨®n de sus 27 Estados, todo el Congreso, dos tercios del Senado y los diputados de los parlamentos estatales: 1.682 cargos en total. ."Lula puede perder pero creo que . era el hombre adecuado para cambiar este pa¨ªs", dice Tania Edilane, de 36 a?os, profesora. "Ser¨¢n necesarias medidas muy duras y para llevarlas a cabo se necesita de su fuerza entre la gente".De estos comicios, y e a fuerte acometida de una sociedad harta del latrocinio y la ineficacia, que se mostr¨® furiosa en su movilizaci¨®n contra el presidente Fernando Collor de Melo, procesado por corrupci¨®n, se espera el surgimiento de una cultura pol¨ªtica m¨¢s limpia y la reformas de unas estructuras pol¨ªticas y econ¨®micas que lastran el rescate de los necesitados.
"La sociedad brasile?a se transform¨® m¨¢s r¨¢pido de lo que esperaba la ¨¦lite dirigente", editorial izaba ayer el diario Folha de S¨²o Paulo.
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