Violencia
Durante el ¨²ltimo verano ha sido creciente noticia la violencia protagonizada por ' j¨®venes, especialmente la ejercida dentro del ¨¢mbito familiar, que ha llegado a crear un clima de relativa alarma social. Es cierto que hay aqu¨ª mucho de sensacionalismo period¨ªstico, por lo morboso que resulta este tipo de sucesos. Y tampoco hay que descartar la posibilidad de que lo que aumente realmente sea m¨¢s la visibilidad de estas conductas que su incidencia social: siempre habr¨ªa existido esta clase de violencia (incluso con mayor volumen quiz¨¢), pero ahora se denunciar¨ªa o investigar¨ªa en mayor medida que nunca.Pero hay informes, como la reciente Memoria que anualmente eleva la Fiscal¨ªa General del Estado, que parecen confirmar este incremento de la violencia. As¨ª, comparando el a?o 1993 (especialmente dificultoso por la gravedad de la crisis econ¨®mica, que incrementa la probabilidad de que se cometan agresiones violentas) con el anterior, hubo un aumento del 17% en los homicidios, del 23% en las violaciones, del 26% en las agresiones lesivas y del 51%en los robos practicados con violencia. Cifras tan altas que parecen revelar algo m¨¢s grave que una epis¨®dica agresividad coyuntural.
Es f¨¢cil culpar a la juventud, a la televisi¨®n o a una mezcla de ambas. Pero la. violencia siempre ha sido protagonizada por los j¨®venes, casi siempre alentados por sus superiores adultos. Y las formas de comunicaci¨®n social (desde el p¨²lpito, el rumor y el romance de ciego hasta los modernos medios masivos) siempre se han hecho eco de los esc¨¢ndalos p¨²blicos. No obstante, en esta escalada actual de la violencia hay tres notas caracter¨ªsticas que conviene destacar.
Ante todo, se trata' de- una violencia masculina casi siempre ejercida sobre las mujeres. Se dice que es violencia intrafamiliar, pero se olvida que las v¨ªctimas preferentes son las hijas, hermanas, esposas o madres de sus agresores, que parecen complacerse en abusar de su masculina superioridad f¨ªsica. Esto no es nuevo, pues siempre se ha ejerc¨ªdo violencia contra las mujeres (sobre todo contra las propias), pero antes tambi¨¦n se agred¨ªa a otros varones capaces de defenderse de igual a igual, y esto ahora parece escasear m¨¢s,En segundo lugar, es una violencia sobre todo individualista o privada, mucho m¨¢s que p¨²blica o colectiva (aunque sobrevivan cuadrillas de v¨¢ndalos y asesinos, como son los rapados o los etarras). Y esto s¨ª podr¨ªa ser nuevo, pues anta?o predominaba la violencia de algarada callejera (a veces dotada de organizaci¨®n ad hoc, como tantos grup¨²sculos revolucionarios o violentos), espont¨¢neamente escenificada ante un p¨²blico de espectadores congregados, mientras que ahora la agresi¨®n suele producirse aisladamente, como si fuese un fest¨ªn secreto celebrado bajo la segura protecci¨®n de alg¨²n reducto a cubierto.
Por ¨²ltimo, en tercer lugar se trata de una violencia muchas veces gratuita, que no suele disponer de m¨®viles instrumentales (como el s¨²bito enajenamiento emocional o el estado de f¨ªsica necesidad) que parezcan excusarla (ya que justificarla no podr¨ªan hacerlo nunca). Pero este ¨²ltimo rasgo no es producto de ninguna presunta maldad juvenil (por el estilo de la freudiana perversidad polimorfa), sino de la corrupci¨®n de menores: somos los adultos quienes les hemos propuesto como modelo una cultura, como la de Mayo del 68, que sacraliza el culto a la transgresi¨®n por la transgresi¨®n, seg¨²n la m¨¢xima enaltecida por Andr¨¦ Breton de que "el supremo acto surrealista es tomar un rev¨®lver y disparar indiscriminadamente sobre la multitud". Esta justificaci¨®n esteticista del crimen es la que explica que nuestra generaci¨®n se complaza en admirar (y envidiar secretamente) todas las m¨¢s violentas flores del mal, por el estilo de las que cortan los asesinos en serie. Pues la fascinaci¨®n por el mal no es privativa de los. programas audiovisuales de sucesos (¨¦sa es s¨®lo su expresi¨®n m¨¢s inculta, barata y vulgar), sino de la m¨¢s excelsa y elitista vanguardia cultural. ?Alguien osar¨¢ juzgar nuestra violencia moral?
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