Consenso, con matices, sobre el futuro Senado
Los ponentes constitucionales creen ¨²til la propuesta de L¨®pez Garrido y exponen sus discrepancias
Consenso, con matices y discrepancias, sobre el futuro Senado dise?ado por el catedr¨¢tico Diego L¨®pez Garrido, a instancias de EL PA?S, es el resumen de las opiniones formuladas por unos de los principales protagonistas del consenso pol¨ªtico logrado en 1978 en torno a la Constituci¨®n que rige nuestra democracia.En evocaci¨®n de aquel consenso, este peri¨®dico ha pedido la opini¨®n de los siete ponentes constitucionales, varios de los cuales se dedican actualmente a ocupaciones muy distintas a las de aquellos azarosos meses, desde agosto de 1977, en que se iniciaron las reuniones confidenciales de la ponencia, hasta que la Constituci¨®n qued¨® aprobada y sometida a la sanci¨®n real en diciembre de 1978.
El deslizamiento pol¨ªtico espa?ol hacia la derecha queda de manifiesto en el cambio de posici¨®n de aquellos siete ponentes 15 a?os despu¨¦s del debate constituyente. De derecha al izquierda, la estructura de la ponencia era un diputado de Alianza Popular (Manuel Fraga), tres centristas (Jos¨¦ Pedro P¨¦rez-Llorca, Miguel Herrero y Gabriel Cisneros), un nacionalista (Miquel Roca), un socialista (Gregorio Peces-Barba) y un comunista (Jordi Sol¨¦ Tura). Hoy tres de ellos son del PP (Fraga, Cisneros y Herrero) y el ponente comunista est¨¢ en el PSOE.
La propuesta de reforma fue remitida a los siete ponentes el 24 de octubre ¨²ltimo, tras dar su conformidad a pronunciarse. Todos han opinado, excepto Miguel Herrero y Rodr¨ªguez de Mi?¨®n, de 54 a?os, letrado del Consejo de Estado y miembro de la Real Academia de Ciencias Morales y Pol¨ªticas. Herrero aleg¨® que no hab¨ªa tenido tiempo. Ofrecemos un amplio extracto de las opiniones formuladas.
PECES-BARBA
La nueva composici¨®n es sensata
Gregorio Peces-Barba Mart¨ªnez, de 56 a?os, rector de la Universidad Carlos III, coincide en especial con la nueva composici¨®n el Senado:
"Sobre el excelente trabajo del profesor L¨®pez Garrido har¨ªa las siguientes observaciones, que expresan mi punto de vista:
1. Coincido en el diagn¨®stico que hace sobre la situaci¨®n acual, sobre la necesidad de una reforma constitucional del Senado y tambi¨¦n sobre los objetivos de representaci¨®n de los ciudadanos de las comunidades aut¨®nomas y sobre que, esta c¨¢mara, canalice los intereses de las comunidades, que los coordine e integre en el Estado y que la expresi¨®n final de la voluntad estatal sea representaci¨®n de la plural opini¨®n de las comunidades aut¨®nomas, junto con la opini¨®n de los representantes de la soberan¨ªa estatal, unitariamente expresada en el Congreso de los Diputados.
2. La nueva composici¨®n que se propone parece sensata, aunque podr¨ªa estudiarse la alternativa de que los senadores fueran elegidos por cada c¨¢mara auton¨®mica, quiz¨¢ en el mismo n¨²mero que propone el profesor. L¨®pez Garrido, de forma proporcional, como ahora se hace con los escasos senadores auton¨®micos, desapareciendo naturalmente la, elecci¨®n por circunscripci¨®n provincial que es incompatible con la idea de un Estado auton¨®mico. En cuanto a la presencia de los presidentes podr¨ªa plantear problemas pol¨ªticos y protocolarios, y desvirtuar una figura que es el representante del Estado en la comunidad. Este sistema permitir¨ªa. seguir manteniendo la disoluci¨®n simult¨¢nea de ambas c¨¢maras.
3. En relaci¨®n con las funciones del Senado, me parecen muy razonables las que se?ala en su propuesta el profesor L¨®pez Garrido. Quiz¨¢ deber¨ªa intentarse especificar las materias excluidas de la competencia del Senado, cuando se refieran a temas de regulaci¨®n unitaria en todo el Estado. Por otra parte, deber¨ªa aprovecharse la reforma para atribuir al Senado, en comisi¨®n, con dictamen ratificado por el pleno, la valoraci¨®n de las propuestas de candidatos para los ¨®rganos constitucionales, incluso los que deba nombrar el Gobierno, Un dictamen negativo, razonado, deber¨ªa cerrar el paso al nombramiento".
ROCA I JUNYENT
No a la representaci¨®n bic¨¦fala
Miquel Roca i Junyent, de 54 a?os, diputado de CiU por Barcelona, y portavoz del Grupo Parlamentario Catal¨¢n, manifiesta la mayor discrepancia con la propuesta, en especial frente a lo que denomina representaci¨®n auton¨®mica bic¨¦fala:
"La propuesta de Diego L¨®pez Garrido tiene sus aspectos positivos. No obstante, discrepo de la misma en alguna cuesti¨®n fundamental".
"La represent¨¢ci¨®n de las comunidades aut¨®nomas no puede ser bic¨¦fala. No pueden existir unos senadores de elecci¨®n directa que no se correspondan con la mayor¨ªa parlamentaria de la misma comunidad, o con la composici¨®n de su Ejecutivo. La representaci¨®n de una comunidad aut¨®noma corresponde, en principio, a su consejo ejecutivo, y por esta raz¨®n, el modelo federal alem¨¢n hace descansar en la per sona designada por el Gobierno de los l?nder, la representaci¨®n de ¨¦stos en el Senado de la rep¨² blica".
"Podr¨ªa discutirse si esta representaci¨®n pudiera descansar tambi¨¦n en los representantes del Parlamento auton¨®mico, elegidos mediante criterios, proporcionales que asegurasen un reflejo exacto de la composici¨®n parlamentaria. De hecho, la mayor¨ªa de la delegaci¨®n vendr¨ªa a corresponder, en l¨®gica democr¨¢tica, a la misma mayor¨ªa que apoya al Ejecutivo correspondiente".
"Lo que, a m¨ª entender, no resulta recomendable ser¨ªa la representaci¨®n bic¨¦fala que propone L¨®pez Garrido. Ante un conflicto, entre Gobierno auton¨®mico y representaci¨®n de la propia comunidad en el Senado, ?qu¨¦ criterio deber¨ªa imponerse? Este es un conflicto que debe evitarse. Una C¨¢mara de representaci¨®n territorial es exactamente esto: una C¨¢mara en la que las distintas comunidades aut¨®nomas tienen una representaci¨®n directa para intervenir y decidir sobre cuestiones que afectan a su inter¨¦s".
"Por ello la cuesti¨®n est¨¢ en decidir sobre qu¨¦ tipo de cuestiones corresponden al Senado, pero en modo alguno deber¨ªa discutirse que la representaci¨®n de las comunidades aut¨®nomas, en esta instituci¨®n del Estado, sea por la v¨ªa de una delegaci¨®n parlamentaria o del propio Ejecutivo".
SOL? TURA
Mejor la estructura federal
Jordi Sol¨¦ Tura, de 64 a?os, actual diputado del PSOE por Barcelona, evoca el debate constituyente y muestra sus reservas a cualquier reforma que no avance hacia la estructura federal:
"Una de las principales discrepancias que mantuve en la fase final de la elaboraci¨®n de la Constituci¨®n fue, precisamente, la que se refer¨ªa a la composici¨®n y a las funciones del Senado. Siempre pens¨¦ que una segunda C¨¢mara s¨®lo se justificaba si era la expresi¨®n directa de las autonom¨ªas que nos dispon¨ªamos a crear, es decir, si era una C¨¢mara de tipo federal, puesto que la l¨®gica profunda del sistema: auton¨®mico iba a ser de hecho una l¨®gica federal, aunque no se llamase as¨ª en el texto".
"Lo cierto es que el primer borrador que elabor¨® la ponencia configur¨® un Senado muy pr¨®ximo a una segunda C¨¢mara federal. Se trataba de un Senado de elecci¨®n indirecta, es decir, elegido por los Parlamentos auton¨®micos. Por consiguiente, era una C¨¢mara que no se disolv¨ªa, puesto que se iba renovando a. medida que se renovaban los Parlamentos de cada comunidad aut¨®noma. Precisamente, por ello se otorgaban al Senado funciones muy importantes, algunas de las cuales permanecieron despu¨¦s, de forma residual, cuando se cambi¨¦ el modelo del Senado en la fase posterior de la discusi¨®n. Cito, a t¨ªtulo de ejemplo, los art¨ªculos 150.3 y 155 de la Constituci¨®n".
"La reforma iniciada con la modificaci¨®n del Reglamento del Senado y la creaci¨®n de la Comisi¨®n de Autonom¨ªas -que si funciona vendr¨¢ a ser como el embri¨®n de un Senado dentro del Senado- es un buen paso que permitir¨¢ experimentar otras formas de funcionamiento y abrir¨¢ el camino a una reforma m¨¢s profunda. A mi entender, ¨¦sta s¨®lo tendr¨¢ sentido si avanza hacia una estructura, de tipo federal, es decir, s¨ª el Senado acaba siendo la C¨¢mara donde se pueda discutir y organizar el consenso de las comunidades aut¨®nomas en la pol¨ªtica legislativa general. Precisamente por ello la reforma debe ser el resultado de una larga fase de experimentaci¨®n, de verificaci¨®n de re
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sultados parciales y de acuerdos concretos. O sea, que nada de arbitrismos ni de propuestas detonantes. Y desde luego, nada de confusiones entre lo legislativo y lo ejecutivo y administrativo"."En todo caso, la cuesti¨®n no se puede ventilar sin tener en cuenta nuestro sistema de partidos, o sea, sin tener en cuenta el problema clave de la estabilidad pol¨ªtica del conjunto institucional. O sea, que, antes de optar por tal o cual sistema, habr¨¢ que sopesar mucho, los efectos de uno y otro sobre el funcionamiento real de un entramado de instituciones que va desde los municipios y las autonom¨ªas al conjunto del Estado y a la Uni¨®n Europea. Est¨¢ bien que se hagan propuestas y que se empiece a discutir, pero cuidado con la propensi¨®n a quemar etapas desde la teor¨ªa".
FRAGA
Protagonismo del Senado
Manuel Fraga Iribarne, de 71 a?os, actual presidente de la Xunta de Galicia, ofrece ideas para que la reforma constitucional d¨¦ un mayor protagonismo pol¨ªtico al Senado:
"Para la Xunta de Galicia, la reforma del Senado es una de las piezas claves en el desarrollo y consolidaci¨®n del Estado de las autonom¨ªas. No se puede avanzar de cara a la construcci¨®n de una autonom¨ªa aut¨¦ntica, real y profunda, y mucho menos de cara al perfeccionamiento de v¨ªnculos de solidaridad entre los pueblos de Espa?a, sin una participaci¨®n efectiva en aquellos foros institucionales en los que las sensibilidades particulares deben cristalizar en una posici¨®n com¨²n".
"Nuestra propuesta descansa sobre dos ejes irrenunciables: la especializaci¨®n funcional del Senado y la modificaci¨®n de su composici¨®n, otorgando un mayor peso a la representaci¨®n de nivel auton¨®mico".
"Lo primero se obtiene dotando a la C¨¢mara alta de protagonismo en el procedimiento legislativo sobre una serie de materias que nos hemos esforzado en concretar: la efectividad del principio de solidaridad, la normativa estatal configuradora de las bases que han de desarrollar las comunidades aut¨®nomas, las delegaciones legislativas y de facultades en materia de titularidad estatal a favor de los poderes auton¨®micos previstas en los art¨ªculos 150 1 y 2, as¨ª como las denominadas leyes de armonizaci¨®n, la aprobaci¨®n y reforma de los estatutos, la declaraci¨®n del inter¨¦s general y, por ¨²ltimo, los tratados internacionales que supongan cesi¨®n de competencias constitucionales".
"Por otra parte, el protagonismo del Senado se garantiza al tener ¨¦ste que pronunciarse en primer lugar cuando de dichas materias se trate y al tener la posibilidad, en determinadas condiciones, de que su criterio prevalezca sobre el del Congreso".
"En cuanto a la modificaci¨®n de la composici¨®n, proponemos reducir el n¨²mero de senadores provinciales, elevar sustancialmente el de los designados por las comunidades aut¨®nomas y constituir a cada uno de los presidentes de ¨¦stas en senadores".
"La posici¨®n de Galicia est¨¢ abierta al di¨¢logo, por lo que nada tiene que oponer a. que se ensayen otras alternativas, siempre que sean el fruto del estudios de peso, tanto desde el punto de vista jur¨ªdico como de la filosof¨ªa pol¨ªtica que los anima. Creo que la mejor valoraci¨®n de la interesante propuesta de don Diego L¨®pez Garrido consiste en recordar (resumidamente) la nuestra. En todo caso, que el debate est¨¦ ya abierto es un s¨ªntoma inequ¨ªvoco de que el resultado final ser¨¢ prometedor".
P?REZ-LLORCA
Especializaci¨®n legislativa
Jos¨¦ Pedro P¨¦rez-Llorca, de 53 a?os, que actualmente ejerce como abogado, expresa su conformidad con la especializaci¨®n legislativa del Senado:
"El conjunto de propuestas planteadas en el texto de don Diego L¨®pez Garrido para configurar al Senado de forma efectiva como c¨¢mara de representaci¨®n territorial, constituye, en principio, una soluci¨®n imaginativa al problema que trata de resolver".
"La separaci¨®n de las elecciones al Senado de las del Congreso y su ligaz¨®n a las elecciones a las asambleas legislativas auton¨®micas, junto con la imposibilidad de disoluci¨®n, pudieran ser en principio acertadas. La propuesta de especializaci¨®n legislativa, por una parte, contribuir¨ªa a dar al Senado el car¨¢cter de c¨¢mara de representaci¨®n territorial, y reducir¨ªa su naturaleza de c¨¢mara de segunda lectura, que en las condiciones actuales disminuye su papel pol¨ªtico".
"Desde mi personal reflexi¨®n existen, no obstante, en la propuesta algunos aspectos que tienen un car¨¢cter m¨¢s problem¨¢tico, y que son los siguientes:
1. En primer lugar, y por lo que se refiere a la especializaci¨®n legislativa del Senado, la f¨®rmula propuesta ("cuando la materia objeto de regulaci¨®n afecte directamente a competencias atribuidas a comunidades aut¨®nomas o municipios") resulta en principio demasiado amplia e imprecisa y con una fuerte "vis atractiva", dado el car¨¢cter abierto de nuestro proceso auton¨®mico. El que sea la Mesa del Senado la que decide sobre esta competencia, la puede convertir en juez y parte, lo que puede originar no p0cos problemas. Resulta dif¨ªcil resolver esta cuesti¨®n, que se deriva inevitablemente de la f¨®rmula propuesta. La creaci¨®n o atribuci¨®n a un ¨®rgano dirimente del problema tambi¨¦n ser¨ªa problem¨¢tica. La atribuci¨®n al Congreso de la ¨²ltima palabra, ya perfilada en el proyecto, podr¨ªa ser reforzada y aclarada.
2. Por lo que se refiere a la composici¨®n del Senado, no s¨¦ si la atribuci¨®n de la condici¨®n de senadores natos a los presidentes de las comunidades autonomas, que adem¨¢s, al ser miembros de sus correspondientes asambleas legislativas, acumular¨ªan tres cargos de imposible desempe?o simult¨¢neo, es realista y acertada, a pesar de su atractivo. Por otra parte, podr¨ªa plantear problemas a la hora de formar mayor¨ªas. Creo que el reglamento del Senado podr¨ªa contemplar con la mayor amplitud la posibilidad de intervenci¨®n de los presidentes en todas sus deliberaciones, como tradicionalmente se ha hecho con los ministros, sin convertirlos en senadores. Otra posibilidad ser¨ªa ir m¨¢s decididamente a una f¨®rmula tipo Bundesrat alem¨¢n, de pura representaci¨®n directa de los gobiernos aut¨®nomos, que en la circunstancia espa?ola me parecer¨ªa absolutamente desacertada y que desde luego no contempla el proyecto
"Por ¨²ltimo, y por lo que se refiere a la circunscripci¨®n electoral, dado que la realidad provincial es tan fuerte y arraigada en muchas de las comunidades, creo que se podr¨ªa dejar libertad, dentro de ciertas pautas, a cada comunidad para determinar la circunscripci¨®n electoral y no obligarlas al colegio ¨²nico".
CISNEROS.
La provincia, maltratada
Gabriel Cisneros Laborda, de 54 a?os, diputado del PP por Burgos y miembro de su ejecutiva nacional, observa aciertos en la propuesta y objeta el tratamiento dado a la provincia:
"La propuesta de reforma constitucional del Senado sugerida por el profesor y diputado L¨®pez Garrido acierta en el diagn¨®stico y recoge -y responde- el haz de preocupaciones m¨¢s visibles y coincidentes en el pasado debate del Estado de las autonom¨ªas. Su utilidad en ese sentido, como punto de partida para trabar sobre ella un debate reflexivo, me parece indiscutible".
"Quiz¨¢ -aunque admito que el juicio puede estar condicionado por el prurito de padre de la criatura- encuentro intelectual e hist¨®ricamente injusto que en su descarnado contraste entre teor¨ªa y realidad del Estado auton¨®mico, L¨®pez Garrido no tome en consideraci¨®n el car¨¢cter in fieri de la construcci¨®n del Estado de las autonom¨ªas y la naturaleza dispositiva y no imperativa del derecho a la autonom¨ªa, tal y como la Constituci¨®n lo configura.
"De todas las posibilidades de desarrollo incoadas por el texto constitucional, L¨®pez Garrido opta por desenvolver hasta el l¨ªmite los principios federalizantes. Me temo que esta soluci¨®n tiene todas las virtudes de la simplicidad y la seducci¨®n de las construcciones intelectuales geom¨¦tricas. Pero no responde a lo que fue en 1978 y sigue siendo ahora el nudo de la cuesti¨®n: la diferente intensidad de las de mandas de autogobierno; la diversidad, que no es la mera pluralidad de c omponentes; la impropiedad de tratar igual lo desigual".
"Mi discrepancia m¨¢s expl¨ªcita con las reformas propuestas por L¨®pez Garrido consiste en el inclemente tratamiento que ¨¦ste dispensa a la provincia. La provincia, ente local titular de autonom¨ªa y sujeto de la iniciativa del proceso auton¨®mico, goza de un acogimiento constitucional que L¨®pez Garrido le niega. Si el argumento pudiera parecer demasiado formal o abstrato, para encarnarlo baste invocar el recuerdo reciente de las elecciones vascas para acreditar hasta qu¨¦ punto la desaparici¨®n de la provincia como circunscripci¨®n electoral para el Senado desfigurar¨ªa al torso de la realidad que se pretende representar".
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