Locura sin techo
El 12% de las personas sin hogar sufre graves enfermedades mentales
El estereotipo los tilda de locos. Pero las investigaciones sociales reflejan m¨¢s pobreza y desarraigo que enfermedades mentales graves. Un 12% de las 1.000 o 1.500 personas sin hogar que duermen en las calles y centros asistenciales de Madrid sufren trastornos mentales incapacitantes, como la esquizofrenia o la depresi¨®n cr¨®nica.?stos son los datos del reciente estudio elaborado por el Ayuntamiento y la Comunidad de Madrid y la Facultad de Psicolog¨ªa de la Universidad Complutense para conocer el estado de salud mental de las personas sin hogar que viven en la capital.
Del estudio se deduce que no es la enfermedad mental la que llev¨® a estas personas a dormir al raso, sino otras situaciones traum¨¢ticas, como la p¨¦rdida del empleo o las separaciones familiares. El 63% de los sin casa han acabado en la calle por problemas econ¨®micos Causados por la p¨¦rdida del trabajo, y el 26%, por separaciones y abandonos familiares.
Al, mostrar una baja incidencia de las enfermedades mentales graves, -el estudio echa por tierra la hip¨®tesis de que la reforma psiqui¨¢trica de la ¨²ltima d¨¦cada abri¨® las puertas de las instituciones mentales y llen¨® la v¨ªa p¨²blica de locos sin medios de vida.
La cuesta abajo no suele ser producto de un solo factor, sino de varios. Como el refr¨¢n que dice que las desgracias nunca vienen solas, la vida de una buena parte de estas personas ha sufrido hasta ocho embates fuertes antes de llegar a la actual situaci¨®n: p¨¦rdida de empleo, separaci¨®n matrimonial, embargo de un piso, muerte de un pariente, enfermedad...
"El estudio nos indica que la atenci¨®n a las personas sin techo no puede ni debe psiquiatrizarse.", asegura Abelardo Rodr¨ªguez, responsable del. proyecto de rehabilitaci¨®n social de enfermos mentales cr¨®nicos sin hogar, que desarrollan el gobierno municipal y el regional.
"Trabaj¨¢bamos con datos de Estados Unidos, y all¨ª es m¨¢s habitual que los sin hogar padezcan trastornos mentales severos, pero ahora sabemos que aqu¨ª la situaci¨®n es diferente, quiz¨¢ porqu¨¦ la atenci¨®n social y sanitaria est¨¢ m¨¢s universalizada", a?¨¢de.- "Salir de la calle no es f¨¢cil, pero con una atenci¨®n adecuada y flexible, sin prisas, esta gente puede conseguir una vida digna", concluye Rodr¨ªguez.
En las calles madrile?as hay m¨¢s hombres que mujeres. Tienen edades entre los 35 y los 42 a?os, casi todos viven solos y padecen un desempleo cr¨®nico. Un 59% no ha tenido trabajo durante el ¨²ltimo a?o. Casi la mitad permanece sin techo desde hace m¨¢s de un lustro.
La mayor¨ªa no ha concluido los estudios primarios, su cualificaci¨®n profesional es baja, y cuando se queda sin trabajo tiene mayores dificultades para conseguir otro.
La dependencia del alcohol es muy superior entre las personas sin hogar (un 30% en los hombres y un 12% en las mujeres) que en la poblaci¨®n general espa?ola -(un 8%). Queda por saber si era un h¨¢bito que ya ten¨ªan o si lo adquirieron por la dureza de la vida a la intemperie. Otro 12% es adicto a otras drogas, como la hero¨ªna, los hipn¨®ticos y los sedantes.
La salud f¨ªsica de estas personas es precaria, especialmente la de las mujeres. Un 86% padece alg¨²n trastorno f¨ªsico, sobre todo problemas respiratorios, gastrointestinales y musculares.
En comparaci¨®n con estudios similares realizados en Estados Unidos, entre los que no tienen casa se dan m¨¢s casos de sida y m¨¢s problemas hep¨¢ticos. En ese dato influye la presencia en las calles de numerosos toxic¨®manos.
El estudio se realiz¨® a trav¨¦s ?le 262 entrevistas voluntarias a personas sin hogar. Con la mitad de ellos se contact¨® en los albergues municipales. Al resto se lleg¨® a trav¨¦s de comedores y de otros servicios para indigentes.
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