"Abandono toda mi actividad pol¨ªtica en IU"
Tiene 56 a?os, y un nieto al que acaba de comprarle su primera bicicleta. Cuando carga con ella, en un ascensor estrecho y desconchado, el abrigo sobre los hombros y el peque?o armatoste en la mano, su aspecto compone una figura desconcertante como su personalidad: cordialidad y distanciamiento, austeridad y aprecio de lo selecto, huidizo y combativo.Pregunta. ?Va a encabezar usted de nuevo una alternativa a Anguita en la pr¨®xima asamblea federal de Izquierda Unida?
Respuesta. No. No voy a estar en la asamblea.
P. ?No va a ir usted a la asamblea de Izquierda Unida?
R. No. Empec¨¦ a decirlo hace ya alg¨²n tiempo.
P. Eso supone que abandona definitivamente la presidencia de Izquierda Unida...
R. S¨ª. De hecho no acud¨ªa ya a las reuniones de la presidencia, y, l¨®gicamente, despu¨¦s de esta asamblea no voy a pertenecer a ningun ¨®rgano. Hace tiempo que he dejado todo activismo partidista. Pero contin¨²o en IU.
P. Usted fue de los que puso en marcha la maquinaria de IU, y ahora se aparta de todo puesto de responsabilidad. ?Es que encuentra que IU se ha oxidado?
R. Siempre he defendido que es sano que los dirigentes pol¨ªticos dejen su actividad de vez en cuando y se dediquen a reflexionar y estudiar. En este momento, adem¨¢s, no comparto los planteamientos de la actual direcci¨®n de Izquierda Unida. No voy a ir a la pr¨®xima asamblea porque no quiero crear ning¨²n problema ni perjudicar expectativas electorales.
P. ?Lo que quiere decir es que le enoja que Izquierda Unida tenga un comportamiento radicalmente hostil con el Gobierno y ostensiblemente ben¨¦volo con el Partido Popular?
R. No quiero detallar mis discrepancias. Me parece l¨®gica una cr¨ªtica fuerte a la pol¨ªtica del Gobierno pero creo que la actitud de enfrentamiento del PSOE e IU, el negarse la pan y la sal mutuamente, es malo para la izquierda y bueno para la derecha. Mientras el PSOE e IU se deg¨¹ellan el que medra es Aznar. Y a m¨ª no me utiliza el PP para allanar el camino de Aznar hacia La Moncloa. Yo no voy a hacer el juego a la derecha.
P. ?Anguita y Aznar comparten asesor?
R. Lo ignoro en absoluto. Espero que no, espero que no.
P. Sempr¨²n le dijo hace poco a Felipe Gonz¨¢lez que no se ganan las batallas sin darlas. ?A usted le ha derrotado de antemano el aburrimiento, o la desolaci¨®n?
R. No creo que sea bueno ni que haya condiciones para plantear batalla a la mayor¨ªa, leg¨ªtima de IU, cuyos, planteamientos no comparto. La izquierda atraviesa la situaci¨®n m¨¢s delicada que ha vivido en mucho tiempo, debido a una pol¨ªtica que ha disgustado a sus propias bases sociales y que ha sido combatida de forma excesivamente radical. Una cosa es que los partidos de izquierda discrepen entre s¨ª y otra la descalificaci¨®n mutua en que se han enzarzado. La batalla que s¨ª quiero dar es para salir de ese atolladero.
P. Escribe art¨ªculos y da conferencias, as¨ª que m¨¢s bien parece que ha recordado que "una retirada a tiempo es una victoria", y ha pasado a la reserva activa.
R. Me he retirado de la vida activa partidaria pero no de la pol¨ªtica. En ese sentido s¨ª me he pasado a la reserva activa. En el futuro... ya veremos.
P. Usted acaba de entrar en el consejo editorial de una revista promovida por Alfonso Guerra. ?Es que cree que la renovaci¨®n de la izquierda pasa por Guerra, o es que esa revista pretende ser el aceite que una una mahonesa? .
R. No creo que la renovaci¨®n de la izquierda pase por esa persona que menciona ni por. otras en que pudiera pensar...
P. ?Tampoco pasa por Felipe Gonz¨¢lez?
R. No pasa por Gonz¨¢lez, ni por Anguita, ni por Sartorius. No es cuesti¨®n de una persona. Todas son necesarias. En esa revista entr¨¦ con la condici¨®n de que estuviera toda la izquierda, y de hecho est¨¢n todas las corrientes del PSOE, las de IU y los sindicatos. Y porque eso es as¨ª yo estoy ah¨ª Creo que esa plataforma puede servir para tender puentes dentro de la izquierda.
P. El cantante Leonard Cohen dec¨ªa hace poco que "la izquierda se aferra a peque?os trozos de madera que flotan".
R. Una buena met¨¢fora. Los planteamientos de la izquierda hunden su ra¨ªz en el siglo XIX y estamos a finales del XX. Me parece, por tanto, que si es necesario un replanteamiento de los fundamentos te¨®ricos, de la pr¨¢ctica pol¨ªtica y de las formas organizativas
P. Entonces, ?son los propios cimientos de la izquierda los que se tambalean?
R. Son los propios cimientos los que son necesarios renovar. ?C¨®mo? Sac¨¢ndole el m¨¢ximo- provecho a la democracia. La izquierda ganar¨¢ a la derecha si proporciona m¨¢s democracia en el reparto de la riqueza, en el disfrute de los bienes, en el reparto de todas las posibilidades de realizaci¨®n humana.
P. Los partidos han perdido credibilidad por mentir, por preferir la opacidad a la transparencia, y por mezclar la pol¨ªtica con los negocios.
R. Exagerar la idea de que los partidos son una porquer¨ªa, que no hacen m¨¢s que mangonear y, en ¨²ltima instancia son corruptos, y por tanto tambi¨¦n los pol¨ªticos, hace un da?o enorme a la democracia. Hay que delimitar cu¨¢les son los casos de corrupci¨®n y qui¨¦nes los corruptos. Es muy peligroso jugar ala generalizaci¨®n porque eso socava la democracia. Yo creo que es necesaria una ley de financiaci¨®n de los partidos pol¨ªticos, y que cada partido se someta anualmente a una auditor¨ªa externa sobre sus ingresos y gastos, como algunas grandes empresas. Y hay otra cuesti¨®n: quien acusa de un delito debe tener pruebas. Si le dan la raz¨®n, el corrupto debe pagar; pero si no hay tales pruebas, el que debe pagar es el que, ampar¨¢ndose en sospechas, ha acusado.
P. Lo cual es, in¨¦dito hasta ahora.
R. Bastante in¨¦dito. Yo soy partidario de una mejor y m¨¢s eficaz tipificaci¨®n de los delitos de injuria y calumnia, y de una intervenci¨®n judicial con resoluciones r¨¢pidas. Ahora se est¨¢ actuando con cierta ligereza, se est¨¢ haciendo demagogia, populismo. Yo quiero que la prensa denuncie las corruptelas, pero que lo haga con informaciones veraces.
P. La actitud de los sindicatos ha pagado de relativizar la recuperaci¨®n econ¨®mica, a entrar en negociaciones para aprovecharla. ?Ese es el camino constructivo?
R. Sin duda. Hace poco han llegado a dos acuerdos, firmados con funcionarios y pensionistas, que benefician a nueve millones de familias y apenas se ha hablado de ello. Los sindicatos tienen que negociar. El sindicato que no negocia no, existe.
P. Anguita se lo puso f¨¢cil en 1993 al PSOE para que rehuyera a IU. ?Se lo ha puesto ahora f¨¢cil a usted para que se vaya?
R. Anguita no tiene nada que ver con mis decisiones.
P. Usted no quiere o¨ªr hablar de acercamiento suyo al PSOE. Pero dialogar siempre aproxima, y usted ¨²ltimamente dialoga mucho con dirigentes del PSOE y algunos miembros del Gobierno.
R. S¨ª. Yo soy partidario del di¨¢logo con el PSOE y de crear instrumentos para debatir en com¨²n, no s¨®lo la revista que he mencionado. Pero no estoy de acuerdo con aspectos .... portantes de la pol¨ªtica econ¨®mica y social del Gobierno. .
P. Vuelve usted a la ambivalencia de toda su vida, Ni se siente c¨®modo en IU ni da el paso de comprometerse con el Gobierno...
R. Ambivalencia no he tenido nunca porque he militado toda mi vida en un partido y en un sindicato. No he estado nunca entre unos y otros. Hoy, lo repito con claridad, lo que ocurre es que no me gusta la pol¨ªtica de los unos ni 1a de los otros.
P. ?Felipe Gonz¨¢lez le ha ofrecido alguna vez ser ministro?
R. No.
P. ?Y si m¨¢s adelante se lo propusiera?
R. Si un d¨ªa la izquierda tiene un programa acorde con lo que yo creo que hay que hacer, entonces lo pensar¨ªa. No he llegado hasta aqu¨ª con una trayectoria coherente para dejarla arrumbada en un sill¨®n de ministro.
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