Se busca hombre... para cantar

No son mozas casaderas aunque alguna goza a¨²n de la solter¨ªa. Suman una veintena entre todas las mujeres, mientras los hombres no superan la decena, y su pretensi¨®n es alcanzar la igualdad en, cuanto a n¨²mero. Por eso se necesitan hombres, guapos o menos agraciados, para formar parte de la Coral Polif¨®nica de Torrej¨®n de Ardoz. No hace falta que sepan solfeo, s¨®lo que tengan buena voz.Esto que, a priori, puede parecer sencillo en una poblaci¨®n de 87.000 habitantes, no lo ha sido en los diez a?os que la coral tiene de existencia. Las impulsoras del coro lo han intentado casi todo: enviar mensajes por las emisoras de radio locales e incluso imprimir un millar de carteles con la fotograf¨ªa del grupo y el sugerente mensaje de "Cantamos contigo" que han repartido por portales, comercios y. autobuses de Torrej¨®n. Pero los hombres no responden.

Jes¨²s es uno de los ¨²ltimos fichajes de la coral. Paquita, una de sus compa?eras, coincidi¨® con ¨¦l en misa hace aproximadamente un mes. En el transcurso de la celebraci¨®n escuch¨® un "am¨¦n sonoro y con ritmo" y no lo dud¨¦. A la salida del templo abord¨® a Jes¨²s y le convenci¨® para que entrara a formar parte de la coral. ?l, perplejo, respondi¨® que s¨ª, pero advirti¨® que a lo mejor tendr¨ªa problemas porque hace tiempo fue "cantor rociero". Ahora Jes¨²s, que ha enviudado recientemente, est¨¢ encantado con sus compa?eros puesto que la coral le ha reportado algo m¨¢s que la posibilidad de volver a cantar.

Algo similar le ocurre a Armando, de 27 a?os. Vive en Coslada, municipio cercano a Torrej¨®n, y se incorpor¨® a la coral en marzo de 1994, despu¨¦s de ver en una tienda el cartel del grupo pidiendo refuerzos. El cantar le posibilita "crecer personalmente en la m¨²sica; adem¨¢s, la gente es acogedora y hay buen ambiente".

?ngela Molina, presidenta de la coral, cree que las horas a las que ensayan, los martes y jueves de ocho de la tarde a diez de la noche, y el lugar donde lo hacen, un aula en el colegio San Juan Evangelista, en la plaza del pueblo, puede ser la causa por la que los hombres no se animen a incorporarse. Para Juan Pedro G¨®mez, otro de los miembros del grupo, el problema estriba en el desconocimiento que se tiene de este tipo de m¨²sica; por eso anima a todos, vivan o no en el municipio, a que "vengan a los ensayos y que escuchen. Es divertido, entretenido y relajante", asegura.

Mar¨ªa Salud Villegas es una de las pocas mujeres que permanece desde la fundaci¨®n de la coral, hace ya 10 a?os. A¨²n recuerda cuando ten¨ªan que ensayar en la calle, detr¨¢s de un cami¨®n. Juana, que sobrepasa los 60, sigue manteni¨¦ndose "muy cantarina".

En los ensayos, el buen humor, la cordialidad y la seriedad envuelven al grupo para ver las evoluciones y los movimientos del director del coro Julio Querque, que es a su vez director adjunto de la coral de la Comunidad de Madrid.

La coral de Torrej¨®n no ceja en su empe?o y contin¨²a llevando sus voces por toda Espa?a. Esta semana les esperan en C¨®rdoba, donde escuchar¨¢n su repertorio popular espa?ol, la polifon¨ªa renacentista y una buena dosis de romanticismo. Pero se necesitan hombres, o, mejor dicho, sus voces.