Perro atropellado

He le¨ªdo atentamente lo expuesto por Ana Isabel Sancho Fabuel, publicado en esa secci¨®n el 221 de enero de 1995, sobre el atropello de un perro en Madrid y el posterior desentendimiento al respecto de Polic¨ªa Nacional, Polic¨ªa Municipal, Sociedad Protectora de Animales y servicios de urgencias cl¨ªnicas veterinarias.El pasado mes de septiembre, encontr¨¢ndome en Par¨ªs, presenci¨¦ el atropello de un perro sin due?o. Tan s¨®lo 10 minutos despu¨¦s de efectuar una llamada telef¨®nica llegaron al lugar del hecho un coche de la polic¨ªa y otro de bomberos. Un gendarme, tras reconocer al animal, consider¨® que era in¨²til su traslado a una cl¨ªnica veterinaria puesto que estaba muri¨¦ndose irremediablemente a causa de una hemorragia interna, y solicit¨® por radio la presencia de un veterinario municipal que acudiera a sacrificarlo mediante una inyecci¨®n y no, prolongar por m¨¢s tiempo su agon¨ªa. Otro gendarme sac¨® del coche una manta impoluta y arrop¨® con ella al animal. Antes de que el veterinario llegara, el perro muri¨®, pero en todo momento fue tratado con la dignidad y el respeto que todo ser merece, aunque sea un perro. En Par¨ªs s¨ª aman a los animales y la polic¨ªa no se desentiende, como ocurre en Madrid, por el supuestamente "intrascendente" atropello de un perro abandonado. Y adem¨¢s con sensibilidad y seriedad.

A¨²n nos queda mucho camino que recorrer, aunque muchos dicen que somos europeos. Europeos... ?En _qu¨¦?-