El 'caso De la Rosa' enfila el tramo final con la investigaci¨®n del aval a Tibigardens

Barcelona El juez del caso De la Rosa, Joaqu¨ªn Aguirre, ha dejado para los ¨²ltimos d¨ªas de la instrucci¨®n el an¨¢lisis sobre el uso que hizo Javier de la Rosa del aval de 10.000 millones de pesetas que la Generalitat concedi¨® a Tibigardens, anterior nombre del parque tur¨ªstico de Tarragona. Por este motivo ha citado a declarar a partir de hoy y en calidad de inculpados al anterior presidente del parque, Alfons Maristany -cu?ado de Javier de la Rosa y directivo de la Caixa-, y al responsable de Caixa de Tarragona, entidad que concedi¨® el cr¨¦dito.

Seg¨²n el informe que el fiscal jefe de Catalu?a, Carlos Jim¨¦nez Villarejo, entreg¨® al juez y a ra¨ªz del cual se produjo la detenci¨®n de De la Rosa, el financiero pudo haber utilizado indebidamente unos 1.000 millones de pesetas de ese aval para financiar empresas ajenas a Tibigardens.

El tema fue debatido por ¨²ltima vez en el Parlament el pasado 19 de octubre, a ra¨ªz de la deten ci¨®n del financiero. En el transcur so de los debates qued¨® claro que, a trav¨¦s de un alambicado proceso de cr¨¦ditos y avales bancarios, Javier de la Rosa consigui¨® que, durante dos meses, -enero y febrero de 1994-, 1.000 millones de pesetas avalados por la Generalitat sirvieran de garant¨ªa para que Caixa de Tarragona concediera un cr¨¦dito a Grand Tibidabo. Esta ¨²ltima sociedad, presidida entonces por De la Rosa, atravesaba graves dificultades y a¨²n no hab¨ªa podido pagar a sus 9.000 peque?os accionistas el te¨®rico dividendo corres pondiente a 1992.

Con los 1.000 millones que Caixa de Tarragona entreg¨®, siempre con el respaldo de los otros 1.000 millones avalados por la Generalitat inmovilizados en otra cuenta en la misma entidad, De la Rosa calm¨® las tribulaciones de los peque?os accionistas.

Alavedra desmiente

Todo habr¨ªa quedado en la oscuridad a no ser por los problemas financieros de De la Rosa. Llegado el vencimiento del cr¨¦dito que Caixa de Tarragona hab¨ªa concedido a Grand Tibidabo, a finales de febrero de 1994, De la Rosa se encontr¨® sin dinero para devolverlo.

La soluci¨®n fue un nuevo cr¨¦dito de 1.000 millones, tambi¨¦n de Caixa de Tarragona, pero esta vez a Tibigardens. Con ese dinero se pag¨® el primer cr¨¦dito y De la Rosa dej¨® en Tibigardens 1.000 millones en pagar¨¦s en lugar de los 1.000 millones.

En su momento, los responsables de la entidad financiera se?alaron que este segundo cr¨¦dito se concedi¨® a instancias del consejero de Econom¨ªa de la Generalitat, Maci¨¢ Alavedra. ?ste, en la comparecencia parlamentaria del 19 de octubre pasado, neg¨® haber intervenido en la concesi¨®n de ese cr¨¦dito. Posiblemente la instrucci¨®n del caso puede despejar ahora definitivamente esta inc¨®gnita y si en la cobertura de la operaci¨®n se lleg¨® a falsear alg¨²n documento mercantil.