Humberto Ortega deja pac¨ªficamente la jefatura del Ej¨¦rcito nicarag¨¹ense
El general Humberto Ortega, de 52 a?os, se despidi¨® ayer de las filas del Ej¨¦rcito nicarag¨¹ense y fue relevado de la jefatura de las Fuerzas Armadas por el general Joaqu¨ªn Cuadras Lacayo, en un hecho sin precedentes en la historia de Nicaragua. Por primera vez, un general es separado de las Fuerzas Armadas sin mediar una revuelta, un golpe de Estado o una revoluci¨®n en el pa¨ªs centroamericano.Violeta Chamorro hizo realidad su deseo de pasar al retiro al general Ortega en el primer relevo pac¨ªfico en la c¨²spide castrense. Una base militar en las proximidades de Managua fue escenario del traspaso de mandos en el Ej¨¦rcito. La decisi¨®n de la presidenta, anunciada en septiembre de 1993, de separar a Ortega de su cargo en el a?o siguiente provoc¨® en su d¨ªa una crisis entre el Gobierno y los militares. En aquella oportunidad, Ortega se neg¨® a abandonar la jefatura del Ej¨¦rcito porque, seg¨²n dijo, obedec¨ªa a presiones de Estados Unidos.
Dirigentes pol¨ªticos y legisladores han admitido que la salida de Ortega es un avance en la profesionalizaci¨®n del Ej¨¦rcito nacido de una fuerza guerrillera del Frente Sandinista de Liberaci¨®n Nacional (FSLN), que tom¨® el poder en Nicaragua en julio de 1979 y fue derrotado en las urnas en 1990.
Nueva etapa
El pase a retiro de Humberto Ortega, ex l¨ªder del FSLN, tildado por sus rivales pol¨ªticos de ambicioso y muy controvertido por sus diversas intervenciones en la pol¨ªtica nacional, marca una nueva etapa en las Fuerzas Armadas, seg¨²n el presidente del Partido Liberal Independiente (PLI), Wilfredo Navarro, un ac¨¦rrimo antisandinista.
Para el diputado y ex militante del Frente Sandinista Mois¨¦s Hassan, el relevo de Ortega es positivo porque env¨ªa un claro mensaje: "Un hombre con el mayor poder de este pa¨ªs abandona su cargo cediendo a presiones".
La certidumbre de que ha empezado una paulatina transformaci¨®n del Ej¨¦rcito qued¨® de manifiesto en la distancia que los militares tomaron ante el conflicto pol¨ªtico, que, por la promulgaci¨®n de las reformas a la Constituci¨®n, ha conducido a Nicaragua a la peor crisis institucional desde 1990.
El nuevo comandante en jefe del Ej¨¦rcito, Joaqu¨ªn Cuadras, de 44 a?os, un ex guerrillero, ex viceministro de Defensa, que se hab¨ªa mantenido a la sombra de Ortega, ha estado al margen del enfrentamiento entre el Ejecutivo y el Parlamento a prop¨®sito de las enmiendas constitucionales. Y en su toma de posesi¨®n prometi¨® respeto a las leyes y acatamiento del orden constitucional, con lo que descartaba cualquier posibilidad de intervenir en el conflicto pol¨ªtico.
El desaf¨ªo para Cuadras es ahora el definir su liderazgo en la instituci¨®n militar y avanzar en la profes4onalizaci¨®n de las Fuerzas Armadas, plan ya iniciado por el ahora retirado Humberto Ortega.
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