Las claves
El Cibona. Le falta estatura. Pero su valor radica en un bien inmaterial: conserva las esencias del baloncesto yugoslavo. A saber, talento y tiro. Hacen juego libre y saben buscarle los resquicios a cualquier defensa. Y, adem¨¢s, est¨¢n en racha. El Madrid. Un tr¨ªo de p¨ªvots como el formado por Sabonis, Arlauckas y Antonio Mart¨ªn es mucho tomate en Europa. Es lo mejor del Madrid. Pero, claro, hay que hacerles llegar la pelota en buenas condiciones, y por ah¨ª empieza el problema. Y menudo problema. Sus defectos ofensivos se agravan por su falta de capacidad de tiro exterior, casi reducido a Biriukov. La defensa funciona a medias aunque una zona 1-3-1 les ha dado resultado.
Qu¨¦ debe hacer el Madrid. Deber¨¢ tener paciencia en defensa ante un rival plagado de buenos tiradores. Lanzar¨¢n mucho a canasta y habr¨¢ que llevarles a que lo hagan con un mal porcentaje. Ha de dominar el rebote y conseguir que Sabonis haga da?o, pero no bastar¨¢ con ello: el Madrid debe resucitar alg¨²n tipo de juego exterior.
Qu¨¦ har¨¢ el Cibona. Impondr¨¢ su juego alegre y descarado. Llover¨¢n algunos triples en los primeros momentos. Tratar¨¢ de intimidar amparado en un ambiente hostil. En defensa, procurar¨¢n asfixiar a Sabonis. Si el tiro exterior del Madrid no sale a la luz, habr¨¢n conseguido medio partido: una defensa en zona que se ir¨¢ cerrando en torno al lituano.
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