Kinkel dejara la direcci¨®n del Partido Liberal alem¨¢n tras los ¨²ltimos fracasos electorales

El fracaso del Partido Liberal alem¨¢n (FDP) en las elecciones regionales de 11 de los 16 Estados alemanes, as¨ª como en las ¨²ltimas europeas, ha obligado a su presidente, el vicecanciller y ministro de ExterioresKlaus Kinkel, a arrojar la toalla y anunciar que abandonar¨¢ la direcci¨®n del FDP tras el congreso que la formaci¨®n celebrar¨¢ el 9 de junio en Maguncia. "No dimito, pero tampoco me presentar¨¦ a la reelecci¨®n", dijo en una multitudinaria conferenciade prensa. "El FDP necesita una nueva oportunidad y un nuevo comienzo", se?al¨® el ministro de Exteriores, que seguir¨¢ de momento en ese cargo, aunque su continuidad tras el relevo en la direcci¨®n del FDP presenta grandes interrogantes.

La ¨²ltima gota que colm¨® el tonel de fracasos de los liberales y motiv¨® la decisi¨®n de su presidente fue el resultado de las elecciones en los Estados de Renania-Westfalia, y Bremen, celebradas el pasado domingo, en las que el FDP qued¨® fuera de ambos Parlamentos por no conseguir el 5% de los votos. "Tengo que aceptar como presidente una responsabilidad general por esos resultados", manifest¨® Kinkel, quien asegur¨® que continuar¨¢ dedicando todo su esfuerzo al ministerio que dirige y prestar¨¢ todo su apoyo al que sea nombrado para sucederle.El secretario general del FDP, Guido Westerwelle, manifest¨® en la conferencia de prensa, en la que Kinkel anunci¨® su abandono, que la decisi¨®n ha sido aceptada "con respeto" por parte de la ejecutiva y que se le ha pedido que contin¨²e en los cargos del Gobierno federal, para los que los liberales le nombraron despu¨¦s de las elecciones del 16 de octubre de 1994, en virtud de los acuerdos de coalici¨®n con los dem¨®crata-cristianos (CDU) del canciller Helmut Kohl y los social-cristianos b¨¢varos (CSU) del ministro de Finanzas, Theo Waigel.

"Mi decisi¨®n no va a tener ninguna influencia en los acuerdos de coalici¨®n", asegur¨® Kinkel al hacer p¨²blica su decisi¨®n de que no continuar¨¢ al frente del FDP. Sin embargo, la indefinici¨®n del Partido Liberal en muchos asuntos de pol¨ªtica interior, y su identificaci¨®n con los dem¨®crata-cristianos que lideran el Gobierno, le ha costado el abandono de muchos de sus electores tradicionales, seg¨²n reflejan los an¨¢lisis de voto tras los ¨²ltimos comicios, y si la direcci¨®n que salga del pr¨®ximo congreso trata de corregir esta l¨ªnea para incrementar su perfil, las consecuencias podr¨ªan traducirse en discrepancias en el seno de la coalici¨®n.

Las reacciones al anuncio de Kinkel de no presentarse a la reelecci¨®n como presidente del FDP van desde el respeto, manifestado por la propia ejecutiva, hasta el alivio expresado por otros pol¨ªticos liberales que se vieron marginados por Kinkel en los dos a?os que ha estado al frente del partido. El presidente de los liberales en Baden-W¨¹rtemberg, Walter D?ring, ha exigido que con el abandono de Kinkel se produzca un cambio radical en toda la direcci¨®n del partido, y el vicepresidente, del FDP en Berl¨ªn, J¨¹rgen Dittberner, reconoci¨® que "sin el ministro de Asuntos Exteriores mejorar¨¢n las posibilidades de los liberales en las elecciones regionales del 22 de octubre".

En los otros partidos, las reacciones han llegado hasta la burla. Para el vicepresidente del Partido Socialdem¨®crata (SPD) la renuncia de Kinkel "hace tiempo que se ten¨ªa que haber producido y es consecuencia de la desoladora situaci¨®n del FDP". Los Verdes consideran que los problemas de los liberales no tienen soluci¨®n "ni con el cambio de las personas". "A nadie puede enga?ar que el tiempo de este partido es cosa del pasado", asegur¨® la dirigente de Los Verdes Krista Sager.

Klaus Kinkel no va a proponer a las bases del partido a ninguna persona para sucederle. Sin embargo, en las primeras horas, tras la publicaci¨®n de su renuncia, se perfila como candidato el actual vicepresidente del FDP, Wolfgang Gerhard, que ya en 1993, tras el abandono del anterior presidente, Otto Lambsdorff, se mostr¨® dispuesto a liderar la formaci¨®n.

Gerhard, diputado de 53 a?os, propone que los liberales hagan m¨¢s ostensibles sus se?as de identidad, para salvar el partido, con un programa que ponga m¨¢s ¨¦nfasis que el actual en cuestiones econ¨®micas. Hasta 1994 fue miembro del Parlamento del Estado de Hessen, donde tambi¨¦n ejerci¨® el cargo de ministro de Ciencia y Arte. En el ¨²ltimo congreso del FDP en este Estado fue reelegido presidente regional, con el 93,8% de los votos de los delegados.