"S¨®lo nos puede condenar la pasividad de los nuestros"
Es martes. Juan Barranco (casado, dos hijos), jienense de Santiago de Calatrava y madrile?o de Vallecas, Alcorc¨®n y Centro, llega a su despacho de la calle Mayor tras reunirse con cooperativistas. A¨²n tiene que ir a una rueda de prensa en la Casa de Campo, y al en¨¦simo debate radiof¨®nico. Aprieta la agenda para, al menos, poder comer en casa, pr¨®xima a la descuartizada plaza de Oriente, y descansar un rato.Pregunta. ?C¨®mo se plantea una campa?a cuando no se parte como favorito?
Respuesta. Desde la serenidad y desde el realismo, sabiendo de antemano que era una campa?a dif¨ªcil. Era consciente incluso cuando acept¨¦ la candidatura. Pero tambi¨¦n tengo la certeza de que tenemos razones suficientes para ganar en Madrid. La gesti¨®n de la derecha que he visto desde la primera fila estos seis a?os ha sido un fracaso; en la limpieza, en el tr¨¢fico, en la pol¨ªtica de vivienda y, sobre todo, por la subida de los impuestos, un 20% por encima del ¨ªndice de precios al consumo (IPC). Todos los grandes proyectos que han hecho -Campo de las Naciones, Pasillo Verde, Plan Felipe, los conservatorios, los centros de atenci¨®n a drogodependientes- los dejamos ya iniciados. Y por otro aspecto m¨¢s, el talante poco democr¨¢tico que les ha llevado
[al PP] a despreciar a los grupos de oposici¨®n, a confrontarse con los sindicatos y tambi¨¦n con los vecinos.
P. Ese fracaso, tan evidente a su juicio, no se refleja en los sondeos. O bien el electorado madrile?o es muy indulgente o ustedes no ha sabido transmitir los errores pupulares.
R. Puede ser eso y puede haber otros factores, como que estas elecciones est¨¢n muy distorsionadas. La derecha plantea estos comicios como un plebiscito sobre la situaci¨®n de crispaci¨®n de la pol¨ªtica espa?ola. Se ve claramente que Aznar est¨¢ intentando utilizar los votos de los vecinos de Madrid como trampol¨ªn a La Moncloa. Pero deseo y conf¨ªo en que todos los sectores progresistas se movilicen ante esto y salgan a votar. Lo ¨²nico que nos puede condenar es la pasividad, el silencio de los nuestros.
P. ?Esta dif¨ªcil situaci¨®n no exig¨ªa una revoluci¨®n en la lista y en el programa?
R. No estoy de acuerdo. La lista se ha renovado en m¨¢s de un 40% y el programa es bastante atrevido. Por ejemplo, los planes para el transporte est¨¢n acompa?ados de un compromiso muy serio: o lo mejoramos en un a?o o dimitimos. Dos, incluimos auditor¨ªas ciudadanas anuales para examinar nuestra gesti¨®n. Tres, desaparici¨®n de las ventanillas e intentar dar los servicios directamente en su casa a las personas y empresas. Compromiso de construir 30.000 viviendas sociales, el 20% de alquiler para j¨®venes; cerrar la Casa de Campo al tr¨¢fico como ya hicimos con el Retiro; juzgados de barrio para los juicios r¨¢pidos; multiplicar por cinco las inversiones en los distritos del sureste y duplicar las del resto, porque todos los distritos tienen su sur...
P. ?No le sabe mal que ning¨²n compa?ero del PSOE estuviera dispuesto a sacrificarse por encabezar la batalla de Madrid?
R. Cada uno es como es y a m¨ª me gusta la lucha. Tengo una gran pasi¨®n y una gran deuda con esta ciudad y tengo muy claro que sin este partido no hubiera sido el alcalde m¨¢s joven de Madrid, ni el senador m¨¢s votado de Espa?a.
P. ?S¨®lo Barranco era capaz de derrotar a ?lvarez del Manzano?
R. Hab¨ªa muy buenos candidatos socialistas, pero los datos de las confrontaciones democr¨¢ticas est¨¢n ah¨ª.
P. Gan¨® a Leguina en la capital....
R. Siempre he sido el candidato m¨¢s votado del PSOE, de ah¨ª mi obligaci¨®n con mi partido y con los ciudadanos madrile?os.
P. La gran baza electoral de Enrique Tierno P¨¦rez-Rela?o, la ¨²nica novedad de la lista en sus 10 primeros lugares, apenas ha tenido incidencia en los titulares de la campa?a.
R. Yo recuerdo el primero en su peri¨®dico
[fue antes de la campa?a y el titular fue "Estoy en la lista porque creo en Barranco"]. ?l est¨¢ extraordinariamente activo e incluso m¨¢s ilusionado que yo mismo. Le tengo que agradecer lo que aporta, que es mucho, no s¨®lo el apellido.
P. ?Qu¨¦ sector de la poblaci¨®n puede arrebatar el PP al PSOE?
R. El PP no es nuestro adversario en ese terreno. Todo va a depender de que los ciudadanos tengan conciencia clara de que lo que se va a decidir es Madrid, nada m¨¢s y nada menos. En la medida en que la participaci¨®n sea numerosa, el PP se va a llevar una sorpresa muy desagradable.
P. ?A qui¨¦n votar¨¢n los j¨®venes?
R. Se dice que los j¨®venes s¨®lo han conocido un Gobierno, el socialista. Pero en Madrid llevan seis a?os gobernados por la derecha y saben lo que eso significa. Por eso espero que los j¨®venes quieran participar.
P. Ruiz Gallard¨®n dice que la oposici¨®n al gobierno municipal la ha hecho Leguina, y usted coment¨® el pasado a?o lo contrario, que Leguina se entend¨ªa demasiado bien con el alcalde ?Qui¨¦n tiene raz¨®n ahora?
R. Busquemos el t¨¦rmino medio para huir de las exageraciones. La Comunidad ha ten¨ªdo una actitud de lealtad con el Ayuntamiento y ha sido el Ayuntamiento el que, con la t¨¦cnica del victimismo, le ha echado la culpa a otras administraciones para no tener que responsabilizarse de nada.
[En ese momento, el estruendo de una grabaci¨®n mitinera inunda el despacho]. ?se es Matanzo
[se r¨ªe], pasa cuatro veces todos los d¨ªas.
P. Pero la Comunidad le ha echado pocas manos en su labor de oposici¨®n. Sin ir m¨¢s lejos, el vertido de 10.000 litros de ¨¢cido sulf¨²rico de Papelera Peninsular
fue ocultado por el gobierno municipal, ustedes no se enteraron, y cuando, al mes y medio, lo supo la Comunidad, no les inform¨®.R. Tengo que reconocer que nosotros no nos enteramos ni tampoco se nos inform¨®. Ni siquiera lo hizo la Comunidad. Pero tambi¨¦n es cierto que si eso me hubiera pasado siendo alcalde, ahora todo el mundo exigir¨ªa mi dimisi¨®n. Tambi¨¦n es verdad que si nosotros hubi¨¦ramos falsificado miles de votos por correo como asevera el fiscal, a m¨ª me estar¨ªan preguntando que con qu¨¦ legitimidad he gobernado los ¨²ltimos cuatro a?os.
P. La incineradora de Valdeming¨®mez, a la que se oponen ahora, mereci¨® su voto favorable en el pleno donde se aprob¨®.
R. Entonces no se conoc¨ªa el informe de la Agencia del Medio Ambiente de Estados Unidos que advert¨ªa que ese procedimiento implicaba riesgos para la salud. El problema es que ahora el Partido Popular, con ese informe en la mano, se empecine en abrir esa planta.
P. Los esc¨¢ndalos destapados por ustedes no han generado dimisiones ni destituciones.
R. Hemos pedido en varias ocasiones comisiones de investigaci¨®n: sobre la reventa de plazas de aparcamientos, sobre la plaza de Oriente, sobre la adjudiciaci¨®n de pisos de la EMV. Se nos han denegado todas.
P. El PSOE plantea la reducci¨®n de impuestos, incluso la desaparici¨®n de algunos. Un mensaje impropio de la izquierda.
R. Yo no he dicho que no vayamos a cobrar impuestos, eso se lo dejo a los del PP. Los subiremos en la medida en que suba el IPC. Pero eliminaremos la tasa por obra nueva y aplicaremos a las licencias el m¨ªnimo. Eso supone dejar de recaudar 900 millones que se compensar¨ªan si el Ayuntamiento recaudara de una manera m¨¢s eficaz. Hay 126.000 millones de impagados.
P. Se ha comprometido a dar a los trabajadores municipales la tercera paga recogida en convenio y que el alcalde se ha negado a hacer efectiva. Sin embargo, los del Ayuntamiento son los funcionarios que m¨¢s ganan y mejores condiciones tienen.
R. No son los que m¨¢s ganan. Hay ayuntamientos de la regi¨®n donde ganan m¨¢s. En cualquier caso, eso deben haberlo pensado los que firmaron esos documentos, no yo, que no lo firm¨¦ ni lo vot¨¦ a favor. Ese acuerdo pendiente lo cumplir¨ªamos negociando con los sindicatos.
P. Si tiene que pactar con IU, deber¨¢ entenderse con Paco Herrera, y ustedes no son precisamente amigos.
R. Tampoco somos enemigos. El se?or Herrera ha estado en el equipo de gobierno del Ayuntamiento cuando los socialistas ten¨ªamos mayor¨ªa absoluta.
P. ?Y si se quedaran como la tercera fuerza pol¨ªtica?
R. No, de verdad que no. La pavada esa del sorpasso
[adelantamiento] no se la cree ni el propio Anguita. Somos la ¨²nica izquierda que quiere y es capaz de derrotar a la derecha.
P. ?Su futuro?
R. No s¨¦ qu¨¦ va a ser de mi futuro ahora.
P. Pero seis a?os en la oposici¨®n machacan, y ante la perspectiva de cuatro m¨¢s...
R. Lo que m¨¢s machaca es segar, como recuerdo a mi padre en Andaluc¨ªa, o trabajar en una mina.
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