Historiadores y poetas reconocen su magisterio
El car¨¢cter de magisterio de la vida y la obra de Emilio Garc¨ªa G¨®mez fue destacado ayer por historiadores, poetas y arabistas. Desde el gran especialista franc¨¦s en el mundo ¨¢rabe Jacques Berque, sorprendido por la calidad de su ciencia y su gusto por la poes¨ªa, hasta el director de la Academia Espa?ola, Fernando L¨¢zaro Carreter, que insiste en su cualidad de consumado escritor. La mayor¨ªa destaca el importante legado de amigos y disc¨ªpulos que deja Emilio Garc¨ªa G¨®mez.
Fernando L¨¢zaro-Carreter (director de la Real Academia Espa?ola): "La muerte de Emilio Garc¨ªa G¨®mez representa una p¨¦rdida verdaderamente incalculable para la cultura espa?ola. Quiz¨¢ los espa?oles no correspondan como en otras ocasiones recientes a la necesidad de expresar p¨²blicamente su dolor. Pero quiz¨¢ la realidad espa?ola no la representan tan bien muchos personajes populares como estas personas sabias, abnegadas, reconocidas internacionalmente, que son las que dan verdadero prestigio a nuestro pa¨ªs. Para la Academia representa perder a su acad¨¦mico m¨¢s activo; llevaba poco mas de medio siglo como titular de su plaza y la maestr¨ªa y la pericia de su saber est¨¢ patente en todas las p¨¢ginas del diccionario, que son muchas, donde se trata de cultura o de lengua ¨¢rabe. Por no decir lo mismo de cualquier otra palabra espa?ola, porque era un consumado escritor, yo dir¨ªa un genial prosista, como tendr¨¢ que ser reconocido en la historia de la literatura".Carlos Bouso?o (poeta): "Garc¨ªa G¨®mez era el m¨¢s grande arabista espa?ol y un gran escritor. Sus traducciones son excepcionales y ha aumentado el acervo de la poes¨ªa espa?ola. Y con lo dif¨ªcil que son las traducciones del ¨¢rabe, esto tiene un m¨¦rito muy particular".
Miguel Artola (historiador): "El primer elemento a destacar de Emilio Garc¨ªa G¨®mez es el car¨¢cter de magisterio de su vida y obra. Parece que las grandes figuras de nuestra ciencia han vivido en una determinada ¨¦poca, desde 1900 a la guerra civil; despu¨¦s no es que no haya figuras importantes, pero no tienen ese car¨¢cter de magisterio universal. Es el aspecto m¨¢s positivo que cabe destacar en Garc¨ªa G¨®mez, porque este tipo de prestigio s¨®lo se puede conseguir por la calidad del trabajo realizado. Ha sido un trabajador constante, que ha ofrecido interpretaciones de textos continuamente, algunas tan importantes como la lectura de las inscripciones de La Alhambra, de un inter¨¦s enorme".
Francisco Tom¨¢s y Valiente (ex presidente del Tribunal Constitucional): "Emilio Garc¨ªa G¨®mez dirigi¨® la Real Academia de la Historia, en los a?os en que me honro con pertenecer a ella, con una mezcla de energ¨ªa y cortes¨ªa que se derivaban de la autoridad que todos le reconoc¨ªamos y de su innata y un poco anticuada caballerosidad. Lo conoc¨ª tarde para m¨ª, pero he podido contemplar c¨®mo un joven de 82 a?os ha sido capaz de llegar a los 90 sin dejar de serlo. Se agot¨® viviendo, de modo que la vida se le ha ido escapando en estos ¨²ltimos meses poco a poco, como un hilo que no se decide a romperse del todo. Deja el ejemplo de su entrega a las ciencias que cultiv¨®, y el m¨¢s valioso de su humanidad llena de sabidur¨ªa. Disc¨ªpulo de arabistas insignes como Juli¨¢n Ribera o Miguel de As¨ªs, y maestro de otros muchos, deja en disc¨ªpulos y amigos el recuerdo de un hombre admirado y querido".
Jacques Berque (especialista en el mundo ¨¢rabe y catedr¨¢tico jubilado de la Universidad de Par¨ªs): "El orientalismo y el humanismo han sufrido una gran p¨¦rdida con la muerte del c¨¦lebre arabizante Emilio Garc¨ªa G¨®mez. Le conoc¨ª personalmente hace ya casi medio siglo, en Marruecos, y luego le visit¨¦ en Madrid y recuerdo una magn¨ªfica velada en su compa?¨ªa junto al director de la Casa de Vel¨¢zquez. Me sorprende la calidad de su ciencia y su gusto por la poes¨ªa. Recuerdo de manera muy particular su soberbio estudio sobre un pr¨ªncipe muerto de Granada y de manera a¨²n m¨¢s intensa su sorprendente traducci¨®n de poemas arabo-andaluces adaptados al ritmo castellano. A ¨¦l y a m¨ª nos honraron, con un a?o de diferencia, con el premio Bagdad y estuve muy contento de compartir el galard¨®n con Emilio Garc¨ªa G¨®mez, al que todos echaremos de menos".
Mart¨ªn de Riquer (fil¨®logo, miembro de la Real Academia Espa?ola). "Emilio Garc¨ªa G¨®mez fue uno de los grandes maestros de la escuela de arabistas espa?oles no tan s¨®lo por sus trabajos sobre historia, sino tambi¨¦n sobre la literatura ar¨¢bigo- espa?ola, que tradujo con la elegancia y la perfecci¨®n de un erudito que al mismo tiempo era un gran poeta".
Federico Arb¨¢s (director del Instituo Cervantes de El Cairo y profesor de lengua y literatura ¨¢rabes). "Cuando me he enterado esta ma?ana de la muerte de don Emilio Garc¨ªa G¨®mez y lo he comentado con unos hispanistas egipcios que fueron amigos suyos, todos hemos coincidido en destacar, adem¨¢s de su labor detallista y escrupulosa, su trabajo de traductor y divulgador de la poes¨ªa ¨¢rabe y andalus¨ª entre los a?os treinta y cincuenta. Sali¨® del c¨ªrculo de los especialistas para llegar a un c¨ªrculo mucho m¨¢s amplio. Fue un trabajo muy bien hecho, que tuvo una gran repercusi¨®n: descubri¨® a muchos escritores y poetas una cultura diferente. Tambi¨¦n quiero recordar su labor como embajador precisamente aqu¨ª en EL Cairo en los cincuenta, una ¨¦poca que no era especialmente alegre para la cultura".
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