EE UU estudia suavizar las sanciones a Cuba para favorecer los cambios democr¨¢ticos en la isla
El Gobierno norteamericano, corrigiendo una pol¨ªtica de m¨¢s de treinta a?os, est¨¢ considerando la posibilidad de suavizar las sanciones a Cuba y de ampliar las comunicaciones con ese pa¨ªs como el mejor camino de favorecer cambios democr¨¢ticos en la isla, seg¨²n inform¨® ayer un alto funcionario. Para ello, la Administraci¨®n tendr¨¢ que vencer, sin embargo, la resistencia del Congreso, que ha propuesto medidas justamente en la direcci¨®n contraria.
El primer paso que Estados Unidos quiere dar, como respuesta a "Ias noticias positivas sobre cambios pol¨ªticos y econ¨®micos en Cuba", es la eliminaci¨®n de las sanciones que fueron impuestas en agosto de 1994 a ra¨ªz de la crisis de los balseros. Esas sanciones inclu¨ªan la prohibici¨®n del env¨ªo de dinero de los cubanos en Estados Unidos a sus familiares en la isla y otras formas de contacto entre ambas comunidades. "Todo eso est¨¢ siendo revisado y contemplado", declar¨® ayer el portavoz de la Casa Blanca, Michael McCurry, en una conversaci¨®n con un grupo de periodistas europeos."Reconocemos que el contacto con el mundo exterior es un camino por el que el pueblo cubano puede llegar de forma m¨¢s adecuada al cambio pac¨ªfico. Eso nos abre la posibilidad de contactos humanitarios, intercambios acad¨¦micos, quiz¨¢s la apertura de oficinas de medios de comunicaci¨®n norteamericanos en Cuba", dijo.
El portavoz de la Casa Blanca explic¨® que esas medidas no supondr¨ªan una violaci¨®n del Acta para la Democracia en Cuba, la ley que establece la pol¨ªtica norteamericana hacia el r¨¦gimen de Fidel Castro, ni un conflicto con el grueso de la comunidad del exilio cubano. 'Informaci¨®n, acceso al exterior, a gente que pueda hablar sobre los valores de la democracia, es bueno para los que quieran realizar cambios en Cuba", dijo, "y puede hacerse de forma consistente con los fuertes puntos de vista de la comunidad cubano-norteamericana en Estados Unidos".
Por primera vez, un alto funcionario de la Administraci¨®n hace una distinci¨®n entre el liderazgo del exilio en Miami -claramente representado por el presidente de la Fundaci¨®n Cubano-Americana, Jorge Mas Canosa- y los miembros de esa comunidad.
"El reciente problema sobre migraci¨®n nos dio una lecci¨®n muy interesante de que hay una considerable diversidad de opini¨®n entre la comunidad cubano-norteamericana", afirm¨® McCurry. "Los l¨ªderes, que son muy importantes, se mueven en una direcci¨®n distinta. Pero cuando prestas atenci¨®n a lo que la gente piensa encuentras mucho m¨¢s sentido com¨²n", a?adi¨®.
Seg¨²n McCurry, ha crecido entre la comunidad cubana de Miami la idea de que una mayor comunicaci¨®n entre Cuba y EE UU favorecer¨ªa el cambio democr¨¢tico. En ese sentido, seg¨²n ¨¦l, ha aumentado tambi¨¦n el n¨²mero de personas que defienden una pol¨ªtica hacia La Habana similar a la que Washington tiene con China.
El portavoz de la Casa Blanca asegur¨® que en estos momentos existe en la Administraci¨®n "una valoraci¨®n de que las noticias positivas sobre cambios pol¨ªticos y econ¨®micos n Cuba deben encontrar una respuesta cuidadosamente calibrada". "Y calibrando cuidadosamente las respuestas", a?adi¨®, "podemos poner en acci¨®n los instrumentos de democracia y cambio que necesita el pueblo cubano".
McCurry record¨® que esta pol¨ªtica se produce "en el contexto de un Congreso que quiere dar el ¨²ltimo martillazo y empujar a Castro al l¨ªmite". En los pr¨®ximos meses, quiz¨¢s este verano, el Congreso debe discutir una propuesta del presidente del comit¨¦ de Relaciones Exteriores del Senado, Jesse Helms, para extender las sanciones a aquellos pa¨ªses que mantengan lazos comerciales con Cuba.
Las declaraciones de McCurry se producen despu¨¦s de varios meses en los que, de forma discreta pero apreciable, se ha observado un acercamiento entre Washington y La Habana. Como resultado de ese acercamiento se ha producido un hist¨®rico acuerdo migratorio, la liberaci¨®n de dos se?alados presos pol¨ªticos cubanos y la detenci¨®n en La Habana de un fugitivo de la justicia norteamericana.
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