"My tailor is Pichichi"

Es la mejor manera de enga?ar a un hijo para que estudie ingl¨¦s. Y una buena excusa para que un padre financie unas clases de f¨²tbol sin rechistar. El Rayo Majadahonda ha encontrado una f¨®rmula para contar con la complicidad de dos generaciones con intereses generalmente contrapuestos: dos horitas de ingl¨¦s, adi¨®s a los deberes y tres horitas de f¨²tbol con monitores especializados. El experimento se puso en marcha el lunes: la primera quincena de julio ya est¨¢ completa. La idea surgi¨® en familia. Joan O'Connell, la directora del curso, lleva las riendas de dos academias de ingl¨¦s. Su marido, Antonio del Valle, es el relaciones p¨²blicas del Rayo Majadahonda, equipo de Tercera Divisi¨®n. "La mayor¨ªa de los chicos que acuden al curso son prototipo de chavales revoltosos en el cole", cuenta O'Connell, de 38 a?os. "Sin embargo, aqu¨ª est¨¢n de lo m¨¢s tranquilos y atienden perfectamente en clase", afirma. "A primera hora, cuando est¨¢n frescos, les bombardeamos con el ingl¨¦s", relata. "Y luego se relajan con el f¨²tbol". Son 62 los chavales -s¨®lo una chica-, de entre ocho y 18 a?os, apuntados al cursillo.

Los campos de f¨²tbol del Rayo Majadahonda se ven invadidos cada ma?ana por una legi¨®n de chavalillos que sue?an con ser Amavisca o Zamorano. Algunos tienen un futuro prometedor, cuentan los monitores. Es el caso de Pablo, de seis a?os. Con una gorra de b¨¦isbol, que en su cabeza bien parece un toldo, desaf¨ªa las leyes del equilibrio con un bal¨®n que le llega a la altura de la rodilla. "?Parad¨®n impresionante de Buyo!", exclama un aspirante a portero con vocaci¨®n de comentarista deportivo. "?Cu¨¢ndo vamos a hacer una tanda de penaltis?"', propone otro, harto de tanto ejercicio de toque de bal¨®n.

"Lo que m¨¢s les cuesta es pensar, evitar ir todos a por el bal¨®n a la vez y colocarse en el campo comenta Ram¨®n Fern¨¢ndez, monitor de 21 a?os. "Y lo m¨¢s asombroso es lo r¨¢pido que aprenden la t¨¦cnica. Les explicas algo y lo cogen al vuelo".

Son dos horas de boli y tres de bal¨®n. La jornada comienza con dos horas de ingl¨¦s. "Lo mejor es que aqu¨ª no hay empollones", cuenta David Andina, de 11 a?os. Para Jon Laucirica, misma edad, las ventajas de aprender ingl¨¦s son evidentes. "Si vas a otro pa¨ªs y tienes que pedir al servicio de habitaciones que te suba un caf¨¦, ?qu¨¦ haces?", pregunta. David y Jon sue?an con dedicarse al f¨²tbol. "El problema es que somos muchos", se lamentan.Campus de Verano Rayo Majadahonda-Level Ten. Informaci¨®n: 715 87 66. 15 d¨ªas, de lunes a viernes (de 9.00 a 14.00): 20.000 pesetas. Cerro del Espino, Campo Municipal de Majadahonda (carretera de Pozuelo a Majadahonda, km 2.400).