Greenpeace dice que intentar¨¢ impedir nuevos ensayos

La organizaci¨®n ecologista internacional Greenpeace, a trav¨¦s de varios testimonios, consider¨® la explosi¨®n nuclear de anoche como "un acto escandaloso" y "el error m¨¢s grave de Jacques Chirac". Pocos minutos despu¨¦s de conocerse la detonaci¨®n, David McTaggart, fundador de Greenpeace y l¨ªder de la protesta en las aguas del Pac¨ªfico sur, afirmo: "La flotilla para la paz seguir¨¢ aqu¨ª e intentaremos impedir nuevos ensayos. Es una l¨¢stima que las dem¨¢s potencias, Como Estados Unidos y Jap¨®n, no hayan podido convencer al presidente franc¨¦s, Jacques Chirac, por encima de las presiones del lobby nuclear franc¨¦s". Por su parte, Audrey Gardwell, portavoz de Greenpeac¨¦, a?adi¨®: "Estamos seguros de que los franceses se sienten tan decepcionados como nos sentimos todo el resto del mundo".Para el presidente de Greenpeace-Francia, R¨¦mi Parmentier, Chirac ha cometido un "grave error" si cree que se van a terminar las protestas internacionales, y Thomas Schultz, represen tante alem¨¢n de Greenpeace en Papeete (Tahiti), afirm¨® que "es un acto escandaloso que de muestra el desprecio de Francia por la opini¨®n-p¨²blica". Xavier Pastor, presidente de la organizaci¨®n ecologista en Espa?a, dijo en la madrugada de hoy en Papeete (Tahit¨ª) quela prueba francesa es un "desaf¨ªo" a toda la comunidad internacional y que las Manifestaciones de protesta ya hab¨ªan comenzado en las calles de la capital de la Polinesia francesa.

De "crimen contra la humanidad" calificaron el partido franc¨¦s Los Verdes el "acto b¨¢rbaro". Greenpeace ha convocado para hoy una gran manifestaci¨®n en Par¨ªs y en otras ciudades francesas.

Por la ma?ana, el anuncio televisivo de Chirac Sobre la probable disminuci¨®n del n¨²mero, de pruebas nucleares previstas en Mururoa fue acogido con jolgorio entre los barcos de la flotilla para la paz. "Pero no es suficiente", dijo Audrey Gardwell. "S¨®lo obtendremos un aut¨¦ntico ¨¦xito cuando el presidente Chirac tenga el coraje, de renunciar por completo a los ensayos y se erija en l¨ªder de la paz y el desarme". "Por supuesto", agreg¨® Gardwell, "no hay que atribuir el cambio en la posici¨®n francesa s¨®lo a nuestra presencia aqu¨ª, sino a la abrumadora presi¨®n de la opini¨®n p¨²blica mundial".