Un coche bomba c¨®ntra una escuela jud¨ªa hiere a 14 personas en Ly¨®n
Un reloj que marcha con cinco minutos de retraso salv¨® a vida de un buen n¨²mero de ni?os ayer en Villeurbanne, una villa industrial vecina a la ciudad francesa de Ly¨®n. Una bomba de gran potencia, situada en un autom¨®vil junto a la puerta de acceso a una escuela jud¨ªa donde se encontraban 700 ni?os de entre 3 y 15 a?os de edad, estall¨® ayer la hora en que los alumnos deb¨ªan salir del establecimiento. Pero el reloj al que est¨¢ conectado al timbre de salida va con retraso, y eso evit¨® una matanza. S¨®lo resultaron heridas 14 personas.
De la potencia del artefacto da una idea el que lograse desplazar hasta el centro de la calzada a un coche -un Opel rojo en cuyo maletero parece que estaba oculta la bomba-. El artefacto provoc¨® el incendio de otro veh¨ªculo y el de la vivienda m¨¢s pr¨®xima y .directamente afectada por la onda expansiva. En un patio interior fueron encontrados tuercas y clavos, que se supone formaban parte del mort¨ªfero contenido de la bomba. Algunos de los alumnos con s¨ªntomas de intoxicaci¨®n a causa de la intensa humareda que desprend¨ªan los coches reventados recibieron tratamiento m¨¦dico.La explosi¨®n fue provocada, seg¨²n el gran rabino de Ly¨®n, por una bombona de butano, es decir, sirvi¨¦ndose del mismo envase que en los dem¨¢s atentados perpetrados en Francia, una oleada que empez¨® el pasado 25 de julio cuando otra bombona repleta de una sustancia explosiva estall¨® en el interior del metro de Par¨ªs. En aquella ocasi¨®n, siete personas murieron y unas cien resultaron heridas. El coche bomba de ayer es el sexto atentado en Francia en el plazo de seis semanas.
V¨ªctimas buscadas
En cualquier caso las bombas instaladas hasta ahora por terroristas desconocidos hab¨ªan sido colocadas en metros, mercados o trenes, sin buscar un tipo de v¨ªctima determinado, es decir, sin que pudieran identificarse con una causa religiosa o pol¨ªtica.El de ayer en Ly¨®n -el 26 de agosto un artefacto cuyo detonador fall¨® hab¨ªa sido colocado junto a la v¨ªa del TGV, a pocos kil¨®metros de la ciudad del R¨®dano- es el primero que busca un objetivo preciso: la comunidad jud¨ªa. De ah¨ª, de ¨¦sa orientaci¨®n m¨¢s precisa de la criminalidad terrorista, no se deduce sin embargo que las pistas exploradas con m¨¢s ah¨ªnco por la polic¨ªa, que son la llamada "trama islamista argelina" o "pista del GIA" (Grupo Isl¨¢mico Armado), sean falsas.
El Sindicato de la Polic¨ªa ha declarado que "los terroristas est¨¢n. en camino de lograr sus prop¨®sitos, es decir, aterrorizar a la poblaci¨®n y desestabilizar a la Rep¨²blica". Para el ministro de Educaci¨®n, Fran?ois Bayrou, el atentado "confirma que las medidas de seguridad previstas para las escuelas estaban justificadas". Alain Jupp¨¦, primer ministro, mostr¨® su determinaci¨®n de poner en marcha un plan reforzado de vigilancia de establecimientos p¨²blicos. Esta decisi¨®n permitir¨¢, "si es necesario, el recurso a las Fuerzas Armadas, para realizar tareas de vigilancia, prevenci¨®n y protecci¨®n".
Francia, que en 1986 conoci¨® una importante serie de atentados indiscriminados y de origen identificado como iran¨ª, hab¨ªa visto en 1982 c¨®mo se atacaban, por ¨²ltima vez, edificios representativos de la comunidad jud¨ªa. En el transcurso del verano de ese a?o una sinagoga y, sobre todo, el popular restaurante Goldenberg de la calle de Roziers, en el barrio jud¨ªo de Par¨ªs, fueron el objetivo de bombas criminales o de una mort¨ªfera r¨¢faga de ametralladora.Ayer, en Villeurbanne, la polic¨ªa detuvo a un hombre co?siderado sospechoso porque hu¨ªa corriendo del lugar de la explosi¨®n, pero la mayor¨ªa de los expertos en terrorismo relacionaban la bomba con la veintena de detenciones efectuadas hace exactamente una semana por la polic¨ªa en medios islamistas de Ly¨®n.
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