Extra?ado y dolido

Los alumnos del profesor P¨¦rez Royo -habitual colaborador de estas p¨¢ginas- pueden respirar tranquilos: ya saben que su apariencia externa no le condiciona a la siempre ingrata hora de calificar sus m¨¦ritos acad¨¦micos. Declaraci¨®n que se agradece, pero que no hac¨ªa falta. Quienes, como yo me precio, conocemos a Javier P¨¦rez-Royo sabemos de sobra que su s¨®lida formaci¨®n jur¨ªdica, su sensibilidad humana y sus convicciones democr¨¢ticas no dejan lugar a dudas sobre su rectitud y ecuanimidad. A pesar de San Gin¨¦s.Por eso me ha extra?ado y dolido la dureza y la injusticia, s¨ª, la injusticia, con que acaba de tratar en este medio a Francisco ?lvarez-Cascos, con quien he colaborado muchos a?os y cuya trayectoria me precio, tambi¨¦n, en conocer. Dureza porque no es el estilo habitual de Javier P¨¦rez Royo. No s¨¦ de d¨®nde le sale esta vena. Estoy desconcertado, pero descarto absolutamente que haya una dimensi¨®n psicol¨®gica del dicho atribuido a San Gin¨¦s que le fuera aplicable. Y no porque yo pueda hablar con autoridad de algo tan complejo -que no puedo-, sino porque, sencillamente, me niego a aceptarlo. Por eso no salgo de mi asombro. E injusticia. Injusticia, querido Javier, porque utilizar unas declaraciones para equiparar a Francisco ?lvarez-Cascos a dirigentes de HB, acusando al primero de "bestialidad", no merece otra calificaci¨®n. Aqu¨ª no estoy ya sorprendido, sino indignado.

Me temo que San Gin¨¦s le ha jugado a P¨¦rez Royo una mala pasada. Se ve que tiene poco trato con el santoral, pero eso siempre tiene remedio si uno est¨¢ dispuesto a cambiar. A no ser que se crea la Bella del Cuento.- Diputado del PP al Parlamento de Andaluc¨ªa.