Comedia de an¨¦cdota m¨ªnima
A mediados de los a?os ochenta la alemana Doris D?rrie adquiere cierta notoriedad por una tetralog¨ªa de comedias, con buena carga feminista, entre las que destaca Hombres, hombres... (1985). Sin embargo, su ¨¦xito le hace caer en la trampa de rodar en Estados Unidos con producci¨®n norteamericana Lo m¨ªo y yo (1988), una fallida adaptaci¨®n de una novela del italiano Alberto Moravia, y alguna otra pel¨ªcula que m¨¢s vale olvidar.Casi una d¨¦cada depu¨¦s resurge de sus cenizas con Nadie me quiere, una producci¨®n alemana que en su pa¨ªs ha tenido un cierto ¨¦xito de p¨²blico. Basada en el dicho germano "cuando pasas de los treinta es m¨¢s f¨¢cil que te caiga encima una bomba que un hombre", en que se apoya la publicidad de la pel¨ªcula, es una conc¨¦ntrica comedia donde no queda nada de feminismo, pero est¨¢ llena de pretendido humor negro que no acaba de funcionar en ning¨²n momenito.
Nadie me quiere
Keine Liebt Mich. Directora y guionista: Doris D?rrie. Fotograf¨ªa: Helga Weindler. M¨²sica: Niki Reiser. Alemania, 1994. Int¨¦rpretes: Maria Shrader, Pierre Sandussi-Bliss, Michael-von Au, Elisabeth Trissenaar, Peggy Parnass. Estreno en Madrid: cine Alphaville (V. O. S.).
Girar sobre s¨ª misma
Basada en las relaciones entre una muchacha que trabaja en el departamento. de seguridad del aeropuerto de Colonia, un negro, homosexual y adivino, que canta en play back en un bar gay, y el nuevo, e impotente administrador del destartalado y gran bloque de viviendas donde viven los tres el principal problema de Nadie me quiere es que su an¨¦cdota resulta m¨ªnima y se dedica a girar una y otra vez sobre s¨ª misma.Los tres personajes principales ser¨ªan apropiados para sostener una trama m¨¢s compleja, pero resultan demasiado simples para limitarse a servir de apoyo a los aburridos sistemas que emplea la protagonista para buscar novio, para meter en su cama al prirnero que se cruza en su camino.
Babelia
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