?Produce c¨¢ncer quemar basura en un horno?

L. O. / J. M. R. Los que hacen la guerra a la incineradora de Valdeming¨®mez -ecologistas, IU, PSOE y un pueblo entero de 20.000 vecinos, Rivas Vaciamadrid, junto al que se instala la planta- denuncian que las dIoxinas que escupir¨¢ la chimenea del ingenio "provocar¨¢n c¨¢ncer".

Los cient¨ªficos dudan. Discuten desde hace a?os sobre las consecuencias de inhalar o ingerir esas dioxinas (compuestos altamente t¨®xicos que contienen cloro), sin alcanzar la conclusi¨®n definitiva.

Los defensores de la incineraci¨®n citan la declaraci¨®n del doctor William Farland (de la agencia de Protecci¨®n Ambiental de Estados Unidos, EPA) en las Jornadas sobre las Dioxinas y la Incineraci¨®n celebradas en Madrid en enero bajo los auspicios del Club Espa?ol de los Residuos y el Ayuntamiento de Madrid. "No se ha demostrado todav¨ªa que la dioxina sea un agente carcin¨®geno en el ser humano", respondi¨® Farland a la pregunta sobre cu¨¢ntas muertes se les pod¨ªa atribuir con certeza. Pero el propio Farland, reconoci¨®: "Hay una probabilidad de que [las dioxinas] sean carcin¨®genas para poblaciones humanas y esa posibilidad se basa en la inequ¨ªvoca carcinogeneidad demostrada con animales y los datos epidemiol¨®gicos de que disponemos para seres humanos ". Un estudio de la EPA de junio de 1994, a¨²n en fase de alegaciones, apuntaba los efectos cancer¨ªgenos de las dioxinas.

M¨¢s t¨®xico que el cianuro

Greenpeace asegura que las jornadas de Madrid se hicieron "para promover el negocio de la incineraci¨®n". Los organizadores, seg¨²n los ecologistas, "se negaron a que participaran toxic¨®logos de reconocido prestigio internacional". Greenpeace mantiene que las dioxinas son las sustancias m¨¢s t¨®xicas que se conocen y afirma que su nivel de toxicidad es 70.000 veces mayor que el del cianuro. Los ecologistas, las conocen "el veneno de Seveso". Esa ciudad italiana sufri¨® en 1976 una fuga de dioxinas en una f¨¢brica de cosm¨¦ticos. Las malformaciones cong¨¦nitas, los abortos y los casos de c¨¢ncer aumentaron por el escape, seg¨²n Aedenat.

Un informe de la Uni¨®n Europea, de 1992 se?ala: "El ¨²nico efecto probado de las dioxinas en el ser humano es la enfermedad de la piel conocida como cloracn¨¦. Otro peligro posible es el c¨¢ncer de h¨ªgado, ya que se han realizado 17 pruebas a largo plazo en ratas y ratones y todas dieron positivo". La discusi¨®n se centra ahora en la cantidad m¨ªnima necesaria para entrar en la zona de peligro. Algunos defienden que el l¨ªmite m¨¢ximo permitido no debe superar los 0,1 nanogramos.

El concejal de Medio Ambiente de Madrid, Adriano Garc¨ªa Loygorri (PP), asegura que cumplir¨¢ ese l¨ªmite. Garc¨ªa Loygorri no emular¨¢ aquella gesta de Manuel Fraga (a la saz¨®n, ministro de Turismo), quien decidi¨® ba?arse en Palomares en 1966 para demostrar que no hab¨ªa nada que temer de las bombas nucleares que se le cayeron a un avi¨®n estadounidense frente a la costa andaluza. Garc¨ªa Loygorri no se mudar¨¢ a Rivas-Vaciamadrid, junto a la incineradora, para demostrar que la combusti¨®n de basura no perjudica a su salud. "No tendr¨ªa inconveniente en hacerlo, pero prefiero mi casa en la Avenida del General Per¨®n", arguye.

El edil asegura que los gases que salgan de la incineradora de Valdeming¨®mez ser¨¢n inofensivos. Pero el gobierno de Rivas Vaciamadrid, de IU, opina lo contrario.