Samper busca el apoyo de los militares para atajar la crisis de violencia en Colombia

Horas despu¨¦s del asesinato del dirigente conservador ?lvaro G¨®mez Hurtado, el presidente Ernesto Samper cen¨® con el alto mando militar. Previamente hab¨ªa reunido al Consejo de Ministros y al Consejo Extraordinario de Seguridad, ¨®rgano que re¨²ne a la c¨²pula de las Fuerzas Armadas; en ambas reuniones fue avalada la declaraci¨®n del estado de conmoci¨®n interior, notificada en un mensaje radiotelevisado al pa¨ªs. La medida, que implica censura de prensa, restricci¨®n del tr¨¢fico de veh¨ªculos por la noche y allanamientos domiciliarios y detenciones sin orden judicial, empez¨® a regir autom¨¢ticamente. Otra vez Colombia est¨¢ bajo estado de excepci¨®n y otra vez se rumorea que hay ruido de sables.

En medio de la confusi¨®n y la nostalgia generadas por el asesinato de G¨®mez Hurtado, que fue el sentimiento un¨¢nime de los cuatro telediarios que ampliaron sus emisiones de media a una hora, s¨®lo se escuch¨® una propuesta directa de salida a la crisis nacional: si el Gobierno civil no puede manejar la situaci¨®n, la alternativa es militar. La hizo Pablo Victoria, parlamentario conservador, voz cantante de la ultraderecha del partido y cabeza del grupo de 30 legisladores que hace m¨¢s de un mes pidi¨® la renuncia de Samper. Entonces el presidente dijo que su Gobierno ejerc¨ªa la mano dura contra la corrupci¨®n y los violentos y, explic¨® que "esto no es lo mismo que dictadura".Para algunos, el proceso de desestabilizaci¨®n del pa¨ªs, agudizado ahora por el asesinato del l¨ªder de la fracci¨®n ortodoxa del Partido Conservador, est¨¢ llev¨¢ndolo al borde del precipicio. "El pa¨ªs se est¨¢ derrumbando, estamos sitiados. Estamos a punto de llegar a la anarqu¨ªa", declar¨® ayer el precandidato del Partido Liberal, Juan Manuel Santos.

El actual momento es de pregolpe, coment¨® el polit¨®logo Luis Valencia, quien no descart¨® que se est¨¦ configurando una f¨®rmula de Gobierno con presidente civil y junta c¨ªvico-militar o "algo as¨ª, al estilo de lo que hizo el presidente Bordaberry en Uruguay a mediados de la d¨¦cada de los sesenta".

Salida de fuerza

Hemando G¨®mez Buend¨ªa, ex director del Instituto de Estudios Liberales, dice que la violencia end¨¦mica de Colombia ha conducido a que en este pa¨ªs "los magnicidios sean una forma de hacer pol¨ªtica". ?l no arriesga ninguna hip¨®tesis sobre los autores intelectuales del crimen y, m¨¢s bien, describe un entorno que bien podr¨ªa ser adecuado para una salida de fuerza, a la que se opone. "Delincuencia y corrupci¨®n generalizada, violaci¨®n de derechos humanos, ausencia completa del Estado en las zonas de colonizaci¨®n e inexistencia de la justicia", es el panorama que describe G¨®mez Buend¨ªa.En el a?o largo que lleva Samper de presidente, en distintas oportunidades ha habido rumores de golpe pero siempre han sido desmentidos por el mandatario. Hace dos semanas se produjo una remodelaci¨®n en la c¨²pula del Ej¨¦rcito. El general Luis Bernardo Urbina, jefe de Inteligencia, fue retirado por haber filtrado a la prensa una cinta con la grabaci¨®n de una llamada telef¨®nica interceptada al legislador liberal Heyne Mogoll¨®n, quien en las pr¨®ximas semanas decidir¨¢ si el Parlamento abre juicio al presidente, por presunta financiaci¨®n del cartel de Cali a su campa?a electoral.En la llamada, que Urbina asevera que es aut¨¦ntica, habr¨ªa quedado comprometida la honestidad de Mogoll¨®n con lo que el ex jefe de Inteligencia del Ej¨¦rcito da a entender que el fallo del Congreso ser¨¢ ama?ado. Urbina dice que arriesg¨® su ascenso y su carrera por prestar un servicio a la patria y que lo volver¨ªa a hacer para que no se enga?e m¨¢s al pa¨ªs.

Pero el golpe militar es s¨®lo una de las opciones que se barajan. Una opini¨®n, bastante generalizada, la expres¨® Jaime Arias, presidente del Directorio Nacional Conservador: "Se est¨¢ profundizando la crisis, hay una carencia de Estado, pero de pronto no pasa nada, porque en Colombia pasa de todo y no pasa nada".

Hace una semana el propio G¨®mez Hurtado hab¨ªa dicho: "Yo creo que el presidente no se cae porque nadie est¨¢, realmente, tumb¨¢ndolo. Ni los sindicatos, ni los estudiantes, nadie quiere tumbarlo. Lo que hay que tumbar es el r¨¦gimen; tumbar al presidente no tiene mayor importancia porque vendr¨ªa otro, del mismo r¨¦gimen, y ser¨ªa igual o peor".

No para cambiar el r¨¦gimen, sino para prolongarlo apoyando a Samper es la idea de quienes plantean la alternativa de un pacto nacional. Esa fue la propuesta que hizo ayer el dirigente sindical Angelino Garz¨®n, miembro de la Mesa de Conciliaci¨®n, organismo constituido para explorar acuerdos de paz entre el Gobierno y la guerrilla. Esta f¨®rmula rememora el acuerdo liberal-conservador conocido como Frente Nacional, que puso fin al periodo de La Violencia, a fines de la d¨¦cada de los cuarenta, cuando una guerra civil no declarada dej¨® un saldo de 300.000 muertos.