El zarpazo del ¨²ltimo de la fila
Sali¨® el ¨²ltimo de la fila e inaugur¨® un nuevo estilo de campa?a: darle el zarpazo a CiU con un pie en la escalerilla del avi¨®n que hab¨ªa de llevarle a Bruselas. En esta extra?¨ªsima carrera socialista al Parlament por fin se va haciendo alguna luz: parece obvio que el futuro est¨¢ con el ¨²ltimo de la fila. Acovachado en la lista en un lugar tan estrat¨¦gico como ¨¦se, Maragall ven¨ªa observando un modosito silencio hasta que la yugular irritada del enemigo por un modelo de empresario poco homologable provoc¨® el despertar de la bestia. El escenario, ciertamente, acompa?aba; nada de mercados donde todo se resuelve con compadreos melifluos, sino el perfil duro, cortante, as¨¦ptico y neutro de un aeropuerto. All¨ª es donde realmente aprende uno a manejarse para la vida moderna: sabe c¨®mo meterse el primero en la cola para entregar antes la tarjeta de embarque o c¨®mo dejar ir el juego de codos para hacerse con el apoyabrazos del asiento del avi¨®n. No hay mejor escuela pol¨ªtica que esa.?D¨®nde estaba el primero de la fila en esos mismos instantes? En Girona, escuchando una y otra vez la copla "no me dejes todav¨ªa, no me dejes por favor" en el mercado, en la Universidad y hasta en una f¨¢brica de medias donde tuvo ocasi¨®n de comprobar la elasticidad de los nuevos pantys, el muy picar¨®n. Todo muy confortable. Por supuesto, en tan incomparable marco una palabra sobre el empresario mod¨¦lico hubiera resultado malsonante. Nadal dijo que no morder¨ªa y -as¨ª se hunda el mundo- no va a morder. Ayer se sali¨® un pel¨ªn del gui¨®n y se sum¨® a las voces de sus mayores pidiendo rectificaciones a Pujol. Un mordisqueo juguet¨®n.
?Hay dise?o electoral en todo este asunto? Muy posiblemente. A los pesos pesados del partido les toca ladrar; al candidato, ir con el lirio en la mano. Pero esto del dise?o tiene inconvenientes. El principal es que a veces, de tan conceptual, acaba por hacerse incomprensible. Y a los mortales que no est¨¢n metidos en los juegos de partido no les queda m¨¢s conclusi¨®n que el muy razonable "ellos se lo guisan, ellos se lo comen".
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