Sin l¨ªbero

Asustar a Molina. Como otros equipos, el Betis se preocup¨® pronto de asustar al portero del Atl¨¦tico con alg¨²n intento de vaselina, a fin de disuadirle de adelantarse para cumplir sus funciones de l¨ªbero. El resultado probable fue obligar a Molina a emplazarse algunos metros m¨¢s atr¨¢s de lo que suele y, como consecuencia, quedar flotando, a media, agua en los dos goles del Betis. Esta vez, el baricentro del tri¨¢ngulo que forman Mol¨ªna, Santi y Soloz¨¢bal no estuvo bien cuidado. Ah¨ª coloc¨® el bal¨®n el Betis en sus dos goles, y por ah¨ª pudo llegar a alg¨²n gol m¨¢s. Esta vez el portero no pudo ser l¨ªbero.Lo que tiene. El l¨ªder tiene moral, tiene fuerza,' tiene varios buenos jugadores, tiene constancia y tiene diferentes f¨®rmulas de gol. Tiene lo bastante como para hacerse respetar en todos los campos espa?oles, y desde luego lo bastante para encerrar al Betis durante toda la segunda parte.

Lo que le falta. Lo que le falta al Atl¨¦tico es el juego por las alas.En la segunda mitad Pantic y Caminero intentaron levemente el desborde por la derecha. Por la izquierda, nadie nunca. Fuera de casa, cuando los laterales no suben, el Atl¨¦tico pierde recursos de ataque. Eso le deja en dos tercios de un gran equipo. Le produce sobre todo lentitud.

El cambio de siempre. El Atl¨¦tico sac¨® el equipo de gala. En este caso el concepto equipo de gala, incluye un cambio en el descanso: Roberto sale, y entra Vizca¨ªno. M¨¢s que dos equipos de gala se trata de un solo equipo, pero con un punto en comun: sin rematar.

Jarni. Un jugador extraordinario, superior al, nivel del partido. Un jugador, croata venido de Italia para matar la nostalgia de Gordillo, para lucir calidad de la pierna izquierda, para agobiar a Roberto, Geli, L¨®pez y los que le echen.