Deudas hist¨®ricas

Las deudas hist¨®ricas del olimpismo quedaron hechas a?icos en 1990, cuando Atenas perdi¨® ante Atlanta los Juegos de 1996. Los miembros del Comit¨¦ Ol¨ªmpico Internacional prefirieron la te¨®rica seguridad del rico de la Coca Cola y la CNN. El d¨®lar gan¨® a la tradici¨®n. Tres a?os despu¨¦s, en 1993, sucedi¨® algo parecido, aunque con distinto gui¨®n. La id¨ªlica tranquilidad de Sydney gan¨® al miedo pol¨ªtico que produc¨ªa Pek¨ªn para el 2000.Por esa teor¨ªa, mejor escenario que Sevilla para el 2004, imposible. Pero en un mundo que camina hacia una mayor estabilidad" incluso econ¨®mica, el olimpismo dif¨ªcilmente podr¨¢ tener m¨¢s deudas hist¨®ricas, pol¨ªt¨ªcas o geogr¨¢ficas. China es un peso pesado, con la alternativa incluso de Cant¨®n a Pek¨ªn a ¨²ltima hora, para olvidar la plaza de Tiananmen. ?frica no ha organizado nunca unos Juegos y la nueva Sur¨¢frica multirracial, incluida Ciudad del Cabo, acaba de demostrar su capacidad organizadora con la Copa del Mundo de rugby. Am¨¦rica Latina (Buenos Aires, R¨ªo o San Juan) es tambi¨¦n territorio virgen ol¨ªmpico. Y en Europa hay Precedentes menos calientes que Barcelona 92: Estambul (ninguno); Lille (Par¨ªs 1924 y derrota ante Barcelona para 1992); San Petersburgo (Mosc¨² 1980); Roma 1960 y hasta Estocolmo 1912. Demasiados acreedores, incluso sin chinos.