Una vida m¨¢s que apasionante
Lluis Gasca desvela las mil peripecias de Xavier Cugat
El m¨²sico catal¨¢n Xavier Cugat, que durante los a?os que preceden al ecuador del siglo, vivi¨® y trabaj¨® en Estados Unidos, fue el primer productor de discos de Frank Sinatra y el descubridor de Woody Allen. Cugat lleg¨® a ser un personaje muy popular en los centros del glamour de Hollywood, sobre todo a causa de su c¨¦lebre orquesta de su peculiar manera de dirigirla con un perrito enano, chihuahua en una mano, la batuta en otra y alguna espectacular mujer (desde Carmen Miranda a Abbe Lane) siempre a su lado.Su estilo adapt¨® al gusto estadounidense incontables ritmos y melod¨ªas caribe?as, en discos y cabar¨¦s de moda. Adem¨¢s, intervino en un considerable n¨²mero de producciones musicales del Hollywood de antes y despu¨¦s de la guerra mundial. El m¨²sico tuvo cinco esposas, varias amantes y se le atribuyen muchos falsos romances. Su triunfo en Estados Unidos le llev¨® a entablar relaciones incluso con la Mafia, en general, y con Al Capone, en particular. Luis Gasca cuenta todo esto y mucho m¨¢s en un libro, Cugat, dedicado a este catal¨¢n hoy casi olvidado en Espa?a. "He encontrado en la leyenda de este hombre tantas verdades como mentiras. Su vida es mucho m¨¢s apasionante de lo que ¨¦l cont¨®", afirma Gasca.
Gasca, especialista en temas cinematogr¨¢ficos, comenz¨® a trabajar sobre la vida de "este gran testigo del siglo XX" hace seis a?os, cuando Xavier Cugat todav¨ªa viv¨ªa -muri¨® a los a 90 a?os, en octubre de 1990-. "Siempre pens¨¦ que iba a vivir 100 a?os y que ¨¦l iba a ver publicado el libro en vida", afirma Gasca, quien con esta obra cumple lo que ¨¦l cree que se merece este violinista y director de orquesta catal¨¢n. "Era un gran desconocido en Espa?a, al contrario que en Estados Unidos, donde las noticias de su muerte apareci¨® en la tercera p¨¢gina de muchos diarios", dice el autor.
"Cugat era un hombre tierno, t¨ªmido y ego¨ªsta. Encarn¨® el t¨ªpico ejemplo de muchos de los hombres, de los a?os cuarenta a los que sus continuos y tr¨¢gicos fracasos amorosos destrozan su estabilidad financiera y mental", asegura Gasca, quien no s¨®lo conoci¨® y charl¨® muchas horas con el protagonista de su historia, sino que habl¨® e investig¨® todas las cosas que ¨¦l o sus amigos y familiares le contaban.
"Odio la escritura de libros que se hace a partir de otros libros o de documentos. He realizado un trabajo muy period¨ªstico de investigaci¨®n sobre todos los hechos relatados". Entre los personajes con los que habl¨® est¨¢n, entre otros, el escritor Guillermo Cabrera Infante, su hermano Enr¨ªc, N¨¦stor Almendros, Glenn Ford y muchos m¨¢s.
Luis Gasca, que ha acompa?ado su obra de un ap¨¦ndice con la enumeraci¨®n de todo el trabajo realizado por Cugat en el cine, ha centrado buena parte de su libro en la importancia que tuvieron en la vida de Cugat las mujeres. "Estuvo casado cinco veces. Sus relaciones con sus mujeres y sus suegros son apasionantes", cuenta su bi¨®grafo. Tan apasionante como la historia protagonizada por su esposa Lorraine Allen, la tercera de su vida, quien un d¨ªa, en un hotel de Chicago, descubri¨® a su marido con otra mujer, nada m¨¢s y nada menos que Abbe Lane. Lorraine no se lo pens¨® dos veces y, en un golpe publicitario sin precedentes, subast¨® en plena Quinta Avenida de Nueva York las pertenencias, cartas y recuerdos de su ya ex marido.
Uno de los cap¨ªtulos del libro est¨¢ dedicado a las relaciones de Cugat con la Mafia americana, a cuyo entorno fue aproximado por Frank Sinatra, con quien grab¨® su primer disco en un sal¨®n del hotel neoyorquino Waldorf Astoria. De esa amistad naci¨® la leyenda, qu¨¦ el mismo Cugat foment¨®, de sus relaciones con la Cosa Nostra. Pero lo que s¨ª parece fuera de duda fue su relaci¨®n con los hermanos Fischetti, de la familia de Chicago, primos de Al Capone. Incluso con este legendario g¨¢nster lleg¨® a firmar un contrato en 1927 para actuar en su club privado durante tres a?os.
Cugat es el tercer libro publicado por la editorial del director de cine Jos¨¦ Luis Borau, Ediciones del Im¨¢n. "Mi objetivo es editar libros que de otra manera no se publicar¨ªan, que es lo mismo que ocurre con mis pel¨ªculas", dice Borau, orgulloso de haber realizado el esfuerzo editorial con esta obra plagada de fotograf¨ªas y documentos.
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