Algunos no le llamaban camarada

R. S. / A. D.Un fantasma recorr¨ªa ayer los pasillos del XIV Congreso del PCE. Algunos no le llamaban camarada. Su nombre, Antonio Guti¨¦rrez. Las declaraciones del secretario general de CC OO sumieron en la desolaci¨®n mezclada con la indignaci¨®n a los delegados de este congreso. Ni enmiendas ni resoluciones. La preocupaci¨®n era lo que hab¨ªa dicho Guti¨¦rrez y, sobre todo, lo que significaba para las relaciones futuras de ambas organizaciones.

Felipe Alcaraz, dirigente del Partido de los Comunistas Andaluces y diputado en el Congreso, que pasa por mantener posiciones muy pr¨®ximas a Anguita, con gesto grave, midiendo al cent¨ªmetro sus palabras, se quejaba de que la descalificaci¨®n que Guti¨¦rrez hab¨ªa hecho sobre quienes no se legitiman en las urnas, igual¨¢ndoles con sectas o grupos de presi¨®n, no s¨®lo afectaban al PCE, sino a cualquier otra organizaci¨®n integrada en una coalici¨®n. En el caso concreto de Izquierda Unida, al PASOC o a Izquierda Republicana, por poner dos ejemplos.

"Este congreso", dec¨ªa Alcaraz, "no ha tratado el tema del congreso de CC OO. Hemos tomado la decisi¨®n de no formar corrientes en el sindicato, igual que hemos decidido no hacerlo en Izquierda Unida".

Gramsci y la Academia

Alcaraz confiaba en que pudieran salvarse las diferencias que se han hecho ostensibles entre el partido y el sindicato, porque "nosotros no hemos entrado ni en el dise?o de la organizaci¨®n ni en el perfil del pr¨®ximo secretario general del sindicato, por ejemplo".

El dirigente andaluz se quejaba de que Guti¨¦rrez hubiera preferido el concepto de hegemon¨ªa que da la Real Academia Espa?ola al concepto de Gramsci: capacidad de convicci¨®n en funci¨®n de una realidad.

Francisco Frutos, que hoy se convertir¨¢ en el n¨²mero dos del PCE, reproch¨® a Guti¨¦rrez que hubiera "utilizado el marco del PCE para conseguir un protagonismo que la realidad le ha negado". Y Antonio Romero comentaba en un grupo la "curiosa coincidencia entre el lenguaje de Guti¨¦rrez y el que emplea el PSOE para referirse a Julio Anguita".

Otros dirigentes como Rosa Aguilar o Mariano Santiso confiaban en que este debate quedara superado y, sin ocultar su preocupaci¨®n, hablaban de la necesidad de solucionar un conflicto que perjudica a todos.

Pero Guti¨¦rrez tuvo apoyos en el congreso. Joan Saura, del PSUC, coincid¨ªa con ¨¦l al igual que hiciera la noche anterior Rafael Rib¨®, en esa idea de defender con u?as y dientes la autonom¨ªa de cada organizaci¨®n.