Hussein de Jordania visita Israel por primera vez de forma oficial

Israel dio ayer una cordial bienvenida al rey Hussein de Jordania, puso en libertad a prisioneros palestinos y se embarc¨® con ah¨ªnco en un nuevo esfuerzo por hacer la paz con Siria. Esos tres acontecimientos separados dieron a la jornada ribetes optimistas a la larga y afanosa b¨²squeda de una soluci¨®n para Oriente Pr¨®ximo, pero la experiencia aconseja mantener cautela ante las expectativas.

Sin duda, la llegada del monarca jordano constituy¨® el m¨¢s brillante ejemplo de que el tratado de paz firmado en 1994 es hoy capaz de producir espect¨¢culos hasta no hace mucho impensables. Centenares de israel¨ªes se volcaron en las calles de Tel Aviv para aplaudir a Hussein en su primera visita p¨²blica a la capital comercial y cultural de Israel. "Os damos la bienvenida en paz, como buenos. vecinos" le dijo el primer ministro israel¨ª, Sim¨®n Peres. "Donde hubo una brecha hoy existe un puente". Hussein, que en el pasado realiz¨® por lo menos dos visitas secretas a Israel (la mas memorable en 1977, cuando supuestamente fue sorprendido tom¨¢ndose un helado en la avenida de Dizengoff de Tel Aviv), dijo:"Traigo los sentimientos de mi pueblo y nuestro compromiso con la causa de la paz". La visita de horas dio margen para que Hussein acudiera al hospital donde su amigo el primer ministro Isaac Rabin expir¨® la noche del 4 de noviembre por las balas de un asesino jud¨ªo.

El viaje de Hussein caus¨®, sin embargo, fastidio a los palestinos. "?Por qu¨¦ no quiso visitar las zonas aut¨®nomas antes de su primera visita oficial a Israel?", se pregunt¨® con indisimulado resentimiento un alto funcionario de la Autoridad Nacional Palestina, (ANP) de Yasir Arafat. La rivalidad entre Arafat y Hussein cuando de lealtad de los palestinos se trata es proverbial. Ambos se disputan, entre otros asuntos, la custodia de los santuarios isl¨¢micos de Jerusal¨¦n.

Hoy, en Damasco

Menos controvertida, pero infinitamente m¨¢s importante para el avance del proceso de paz en la regi¨®n, fue la llegada a Jerusal¨¦n del secretario norteamericano de Estado, Warren Christopher, en su decimosexta gira por la regi¨®n. Christopher trajo lo que sirios e israel¨ªes esperan que sea una especie de f¨®rmula m¨¢gica capaz de transformar el torrente de declaraciones de buenas intenciones de ambos lados desde que se reanudaron las negociaciones en Maryland el mes pasado, en un compromiso concreto de empezar a delinear un principio de acuerdo para poner fin al estado de guerra entre los m¨¢s enconados enemigos de la regi¨®n. Peres declar¨® que el tiempo apremia, porque las elecciones israel¨ªes de octubre se avecinan. Si Christopher consigue eliminar las barreras que todav¨ªa se anteponen a progresos concretos, seguramente har¨¢ un anuncio despu¨¦s de hablar con el presidente sirio, Hafez el Asad, hoy en Damasco.