Un informe policial cuestiona el origen del enorme emporio empresarial de Victorino Alonso

Un informe de la unidad de polic¨ªa judicial de la Guardia Civil revela que el empresario minero leon¨¦s Victorino Alonso, de 43 a?os, declarado insolvente por varios juzgados, posee y dirige un complejo entramado societario de unas treinta empresas, con un valor real de cerca de 20.000 millones de pesetas, un capital social superior a los 2.000 millones y un movimiento de dinero en suministros de unos 40.000 millones. La Guardia Civil se muestra extra?ada y sorprendida de "que sin patrimonio conocido ni socios capitalistas colaboradores, un se?or que pose¨ªa 40 acciones de Hullas de Barruelo, SA, y un ciclomotor en 1989, y que manifiesta vivir de las propinas del padre", pueda ser el gestor de este emporio empresarial.

La documentaci¨®n de esa unidad, a la que ha tenido acceso EL PA?S, se pregunta tambi¨¦n cu¨¢l es la procedencia de "este importan te incremento de patrimonio", no declarado desde entonces. Los agentes reflejan que algunas minas de Alonso no declaran granos (carb¨®n de uso dom¨¦stico que no vale para centrales t¨¦rmicas) -algo que consta en el Ministerio de Industria-, lo, que supondr¨ªa "un importante fraude fiscal". Industria ha entregado a Alonso desde 1990 hasta hoy el control de m¨¢s de un. tercio del cupo de carb¨®n nacional (3,5 mi llones de toneladas) y algunos de sus actuales altos cargos reconocen sin recato que este empresario ser¨¢ el que muy pronto controle absolutamente el sector. Al tratarse de un sector intervenido, las ayudas y subvenciones p¨²blicas a las empresas de Alonso (con m¨¢s de 5.000 trabajadores) se acercan a los 25.000 millones de pesetas anuales. S¨®lo Minero Sider¨²rgica de Ponferrada (MSP), de la que Alonso es vicepresidente, consejero delegado, accionista mayoritario, con 2.000 trabajadores, recibir¨¢ hasta finales de 1997 casi 21.000 millones de pesetas en ayudas directas procedentes de los Presupuestos Generales del Estado y de la tarifa el¨¦ctrica.

S¨®lo un vigilante jurado

La Guardia Civil dice que Alonso figura en los archivos centrales de la Intervenci¨®n de Armas de la Guardia Civil, con la condici¨®n de vigilante jurado, y en posesi¨®n de licencias para varios tipos de armas, entre ellas un rev¨®lver. Su esposa, Mar¨ªa Elena Mor¨¢n Gonz¨¢lez, cuenta con las mismas licencias.La investigaci¨®n policial se ha realizado a instancias del Juzgado de Instrucci¨®n n¨²mero 8 de Le¨®n, donde se sigue una querella contra Alonso de su ex mujer, Mar Blanco, por alzamiento y ocultaci¨®n de bienes, pero el empresario nminero mantiene otros importantes lifigios, por presuntos fraudes a Hacienda y a empresas el¨¦ctricas, en siete de los diez juzgados de instrucci¨®n de Le¨®n.

La Guardia Civil ha constatado que Alonso carece de domicilio conocido. Tambi¨¦n destacan los agentes que "es tal la complejidad del entramado societario, en el que las acciones se cruzan entre s¨ª, que les desborda su aspecto contable y, fiscal", por lo que, solicitan que el juzgado nombre inspectores financieros y tributarios que les asesoren.

En el entramado de empresas del grupo Victorino Alonso se utiliza para la constituci¨®n de las sociedades, que luego venden los titulos o acciones a otras del grupo, y para los cargos directivos de representaci¨®n, a varias personas: Antonio de la Fuente, Juan Jos¨¦ Fern¨¢ndez L¨®pez (de los que la Guardia Civil dice que son dos aut¨¦nticos testaferros y asegura desconocer el actual patrimonio de ambos; el primero no ha presentado declaraci¨®n en los ¨²ltimos a?os por este aspecto), Manuel Fern¨¢ndez Alonso, Esteban Guerrero Contreras, Lucio Gonz¨¢lez Tasc¨®n y Juan Antonio Mart¨ªn Moreno, este ¨²ltimo subdirector general de Minas del Ministerio de Industria durante 13 a?os, hasta 1991, y desde 1994 director general de MSP.

En la punta de la pir¨¢mide de las empresas de Alons¨® se encuentran tres sociedades an¨®nimas extranjeras: Watercard y Elbeida -ambas de nacionalidad uruguaya-, y Financial Investment Corporation, una sociedad de derecho norteamericano, del Estado de Delaware, de la que Interpol Washington e Interpol Madrid afirman en un escrito de 6 de junio de 1995 que el Departamento de Justicia de EE UU no ha encontrado ning¨²n tipo de informaci¨®n. De estas tres empresas extranjeras Alonso es el administrador ¨²nico.

Amistades peligrosas

El que fuera director general de Minas Enrique Garc¨ªa, leon¨¦s tambi¨¦n, verdadero art¨ªfice de la primera gran reconversi¨®n del sector minero y en la actualidad un alto directivo de Endesa, es de los pocos que en p¨²blico se atreve a asegurar que el empresario minero es una "bendici¨®n" para el sector. El gobernador civil de Le¨®n, Manuel Garc¨ªa, y el director provincial de Trabajo, Francisco Javier Otazu, prefieren no opinar sobre Alonso, aunque frecuentemente aparecen flanqueando al empresario en actos p¨²blicos de las empresas mineras de su propiedad. El segundo suele mediar en los conflictos laborales de las empresas mineras de Alonso. Los sindicatos consideran que el hecho de que la esposa de Otazu trabaje para Alonso no afecta a los resultados de las mediaciones.Uni¨®n Fenosa tiene en marcha una querella criminal contra Alonso por un supuesto fraude en la calidad del carb¨®n suministrado. La compa?¨ªa el¨¦ctrica le reclama m¨¢s de 2.000,millones de pesetas. Catedr¨¢ticos de la Escuela de Minas de la Universidad Polit¨¦cnica de Madrid nombrados por el juzgado han valorado el fraude, tras los pertinentes an¨¢lisis, en m¨¢s de 1.331 millones de pesetas, que se convertir¨ªan en 4.090 millones de aplicarse la cl¨¢usula de rechazo del contrato oficial.