La est¨¦tica de lo disperso

La est¨¦tica de lo disperso -al igual que su deslabazada presencia en las distintas galer¨ªas de Arco- es el denominador com¨²n de la fotograf¨ªa en esta feria. Tambi¨¦n, una apuesta por el concepto de lo fotogr¨¢fico -estrechamente ligado a la teatralizaci¨®n de una fotograf¨ªa inventada- frente a lo estrictamente documental. Bajo la perspectiva del todo vale se rescatan los materiales m¨¢s diversos: desde el riguroso testimonio a golpe de Leica, en blanco y negro, al copiado de diapositivas en cibachrome sobre aluminio -como el mosaico titulado Blancolor, puesto a la venta en 500.000 pesetas en el pabell¨®n de la galer¨ªa Espacio M¨ªnimo- o versi¨®n Velours (terciopelo), con el argumento de las bellas naturalezas muertas de Antonio Girbes, en el de Lluc Fluxa.Un referente de todas estas tendencias, que servir¨ªa de resumen y s¨ªntesis del deber ser de la fotograf¨ªa para un galerista desde hace m¨¢s de una d¨¦cada puede ser el espacio de la galer¨ªa neoyorquina Laurence Miller (Nueva York). Por un lado apuesta por el gran formato en blanco y negro -un retrato realizado por Ruth Thorne Thonsen, fechado en 1989 valorado en 240.000 pesetas-, o en rabiosos colores planos, como los de la serie Executive models del fot¨®grafo Ron Jude (cuyo precio oscila entre 144.000 pesetas la de tama?o 162 x 51 cent¨ªmetros y 276.000 pesetas la de 100 x 76 cent¨ªmetros). Por otro, por el cromatismo minimalista como las series Domesties setups -tama?o 25 x 25 cent¨ªmetros al precio de 25.000 pesetas cada pieza en una edici¨®n limitada a 25 copias- realizadas cuya banalidad de argumento, reproducciones de sillones en miniatura -bien podr¨ªan formar parte de un cat¨¢logo de mobiliario para la mu?eca Barbie. En id¨¦ntica l¨ªnea las reproducciones a color de juguetes, en este caso de vaqueros del oeste americano pistola en mano, hechas por el fot¨®grafo Davis Levinthal formato 25 x 20 cent¨ªmetros (75.000 pesetas).

Entre las galer¨ªas espa?olas hay dos espec¨ªficamente que se dedican a la fotograf¨ªa desde hace ya varias ediciones: Visor, de Valencia, y Spectrum, de Zaragoza. Aquella, adem¨¢s de presentar trabajos de investigaci¨®n como los registros de Valent¨ªn Vallhonrat (cotizados en 345.000 pesetas), los de Ana Teresa Ortega (480.000 pesetas) o los de Luis Contreras (100.000 pesetas) y Eduard Ib¨¢?ez (150.000 pesetas), entre otros, tambi¨¦n apuesta por la l¨ªnea documentalista de Gabriel Cuallad¨® (cuyos precios oscilan entre 225.000 pesetas el vintage y las 150.000) y el de la fot¨®grafa mexicana Graciela Iturbide (140.000 pesetas). En Spectrum se pueden ver un par de series intimistas de Rafael Navarro y fotos de Miguel Oriola a gran formato. En Moriarty (Madrid), las met¨¢foras visuales de Cherna Madoz y los interiores de Garc¨ªa Alix.

Tambi¨¦n en l¨ªnea con la est¨¦tica del documento puro y duro, Babelia, el suplemento cultural de EL PA?S, presenta una colecci¨®n de retratos de Henri Cartier-Bresson cuyos protagonistas son los rostros de intelectuales y artistas del siglo. Algunas de estas instant¨¢neas, in¨¦ditas, est¨¢n fechadas en los ¨²ltimos a?os cuando el fot¨®grafo franc¨¦s te¨®ricamente hab¨ªa aparcado la c¨¢mara para sustituirla por el l¨¢piz como medio de expresi¨®n. La Gallerie de France es otra referencia obligada para la fotograf¨ªa de reportaje a trav¨¦s de una colecci¨®n de siete tomas de Gis¨¦le Freund realizada en el entorno de Frida Kahlo que se cuelgan junto a un tr¨ªptico, de signo bien distinto, realizado por Christian Boltanski en 1983.