Esto no da m¨¢s de s¨ª
Ayer, primer viernes de mes, no sab¨ªa yo si encomendarme al, Cristo de Medinaceli o a Nuestra Se?ora de la Bolsa, porque los dos estaban a tope. Esta historia del bipartidismo se refleja incluso en las m¨¢s sagradas creencias del personal, es decir, el alma y el bolsillo. La Bolsa estaba optimista como nunca, y supongo que el Cristo tambi¨¦n, en vista de que ante ¨¦l desfilaron m¨¢s madrile?os que p¨²blico han reunido los pol¨ªticos en sus m¨ªtines a lo largo de estas dos interminables semanas. Para acortar, los responsables de la parroquia decidieron que hubiera dos filas, una para besarle el pie izquierdo y otra para depositarle el ¨®sculo en el derecho, una simplificaci¨®n acorde con los tiempos.Vistas desde esta especie de agotamiento vital de la hora del cierre, las jornadas electorales parecen ya un nebuloso episodio de Expediente X, que ha vuelto a la programaci¨®n y constituye una de las pocas alegr¨ªas que una se ha llevado ¨²ltimamente, aparte del momento culminante en que Julio Iglesias deposit¨® un beso en la mano a Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar, lo cual no asoci¨¦ en absoluto a lo del Cristo, sino que quedar¨¢ grabado en mi memoria de cin¨¦fila como un inteligente homenaje a El padrino, partes 1, 2 y 3, m¨¢s que como una premonici¨®n de la cuarta parte, como han querido ver algunos mal¨¦volos. Es que la gente es capaz de cualquier cosa con tal de buscarle m¨¢s pies de la cuenta al gato, y hasta andan criticando a Julio porque se ci?e los pantalones como a medio torso, detalle que se le notaba especialmente en la imagen -tambi¨¦n asaz inolvidable- en que, tomados de la mano ¨¦l y l¨ªder carism¨¢tico de la derecha centrada, que para la ocasi¨®n se puso de puntillas, las alzaron en gesto de triunfo. Ah¨ª al cantante se le desabroch¨® la chaqueta y se not¨® lo del talle imperio. Qu¨¦ quieren: ¨¦l puede.Creo que lo m¨¢s importante que ha sucedido, a nivel de est¨¦tica, es que los populares han conseguido establecer un modelo de mitin como nunca antes se hab¨ªa producido: aqu¨¦l que combina sabiamente el marketing con la peineta; la modernidad con el Porompompero; las majorettes que mov¨ªan fren¨¦ticamente el parr¨²s, o como quiera que se llame esa especie de plumero que llevan en la mano, con los restos del ba¨²l de la Piquer incorporados por su hija Concha M¨¢rquez; el fervor de la nueva mayor¨ªa con el de la m¨¢s m¨ªnima minor¨ªa, o sea, Raphael, el solo recordando a Franco, mientras los dem¨¢s miraban hacia Extremadura. Sospecho que pueden ofrecernos un sinn¨²mero de posibilidades m¨¢s que iremos descubriendo con el tiempo, si tenemos paciencia.
En este contexto, las referencias al pasado en la campa?a del PSOE han sido m¨¢s bien desafortunadas, porque de lo que se trata es de afrontar el futuro con fe, esperanza y, sobre todo, caridad. Felipe Gonz¨¢lez, en Barcelona, no ten¨ªa que haber ca¨ªdo en la trampa de hacerse eco del "no pasar¨¢n" exhibido en pancarta desde las gradas, entre otras cosas porque, como el domingo gane The Radical Select Fruit Company, van a comerse lo de "ya hemos pasao", y no est¨¢ una como para tener nuevamente de musa a Celia G¨¢mez, y acabar convertida en zumo, como la fresa del anuncio.
A destacar el alivio que supuso que, tanto el PSOE como el PP consiguieron mantener en discreto segundo plano a Jos¨¦ Barrionuevo y Mercedes de la Merced, respectivamente, aunque, finalmente, esta ¨²ltima no ha podido contenerse y ha denunciado que seguir¨¢ en la pol¨ªtica para no ir a la c¨¢rcel.
No s¨¦ ustedes, pero yo me voy a pasar el d¨ªa de reflexi¨®n durmiendo.
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