"Mandar en Madrid es mandar en la fiesta"

El m¨¢s poderoso. As¨ª se califica siempre en medios taurinos al afortunado empresario que rige la plaza m¨¢s importante de todas las existentes en el planeta, y que no es otra que la Monumental madr¨ªle?a. Actualmente, tal honor recae desde hace siete a?os en la sociedad Toresma, cuyo director y gerente es Jos¨¦ Luis Lozano, de 59 a?os, el menor de una saga y un apellido ya hist¨®rico en la fiesta. Nuestro personaje, oriundo de la comarca toledana de La Sagra y residente en la capital de Espa?a desde hace varias d¨¦cadas, despierta enfrentadas opiniones en cuanto a la gesti¨®n de Las Ventas. Aunque ha logrado, no obstante, el reconocimiento un¨¢nime de todos, amigos y enemigos, respecto a su gran capacidad de organizaci¨®n: "Lleva la fiesta en la cabeza", suelen coincidir los taurinos y los aficionados. "S¨ª, es un piropo que oigo mucho y mi trabajo me ha costado", admite, para bromear despu¨¦s: "Es que si despu¨¦s de medio siglo trabajando en esto, no lo dominara, ser¨ªa bobo". En este tiempo, Lozano ha pasado por todos los oficios de la liturgia t¨¢urica antes de llegar a Papa.

Pregunta. Su deb¨² como novillero en Las Ventas, en 1956, fue tan triunfal que inmediatamente se retir¨®, ?tan malo era toreando?

Respuesta. No hombre, no. Si hasta di vuelta al ruedo; pero fall¨¦ con la espada y al no cortar las orejas decid¨ª dejarlo, porque en aquella ¨¦poca tan distinta a la actual no se pod¨ªan desaprovechar las oportunidades.

P. Y entonces se dijo: 'pues alg¨²n d¨ªa ser¨¢s m¨ªa, maldita plaza'. ?No?

R. En aquel momento, no; pero una vez que con mis hermanos comenzamos a apoderar toreros y a regentar plazas, nuestro objetivo final era llevar Madrid. Como empresario no se puede aspirar a m¨¢s.

P. ?Desde la atalaya vente?a se domina y manda en la fiesta?

R. Es indudable que, en cierto modo, mandar en Madrid es mandar en la fiesta; pero eso ocurr¨ªa antes en mayor medida. Ahora hay una serie de contrapesos fuertes y nuevos que relativizan el poder. Por ejemplo, antes era impensable que encabezase el escalaf¨®n un torero sin triunfos en Madrid, caso actual de Jesul¨ªn.

P. ?Es el p¨²blico de Madrid el m¨¢s entendido?

R. Por supuesto. Y, como consecuencia, el m¨¢s exigente y dif¨ªcil de contentar. Aqu¨ª, a diferencia de casi todas las dem¨¢s plazas, hay mayor¨ªa de aficionados entre los asistentes a los festejos. Por eso desde el trap¨ªo e integridad del toro hasta el desarrollo de cada corrida, los espect¨¢culos se acercan mucho a la perfecci¨®n.

P. Coletudos madrile?os dicen que torean poco aqu¨ª ?llevan raz¨®n?

R. No. Porque aunque procuramos hacer una programaci¨®n no localista, a lo largo de la temporada son much¨ªsimos los madrile?os que anunciamos. Pero hay tant¨ªsimos, que alguno tiene que quedarse fuera.