Cantautores con lega?as

Entre los devotos que acuden a misa a Jes¨²s de Medinaceli puede atisbarse, desde el primer domingo de marzo y un poco antes del mediod¨ªa, a grup¨²sculos de individuos con poca pinta de cumplir la fiesta de guardar. Son los que todos los domingos de este mes responden al llamamiento de Comisiones Obreras para escuchar a los cantautores. A los nuevos que han surgido en los ¨²ltimos a?os y a los veteranos que nunca se fueron.Y es que el Ateneo Cultural 1? de Mayo, que pertenece a la central sindical con sede en la calle de Lope de Vega, ha organizado, ante la buena acogida del a?o pasado, el segundo ciclo de conciertos matinales que han vuelto a llamar Cantando a la luz de d¨ªa. Una iniciativa con poco af¨¢n de lucro pero con la "idea de crear un espacio en el que los cantautores de todos los estilos, edades y caracter¨ªsticas se encuentren con el p¨²blico para disfrutar en conjunto de la canci¨®n bien entendida", seg¨²n el director del Ateneo, Pepe Tarduchi.Y aunque todav¨ªa ning¨²n domingo se ha llenado el aforo, casi 200 personas han acudido cada d¨ªa. "Nosotras no vivimos la ¨¦poca de los cantautores", aseguraban Silvia y Mar¨ªa, dos chiquitas que se desternillaban de risa con las ocurrencias surrealistas de Pep¨ªn Tre. "Hoy es la segunda vez que venimos, porque los nuevos cantautores han hecho que nos interesemos por los de antes, y aunque hemos venido por Krahe, tambi¨¦n Pep¨ªn nos est¨¢ encantando".

No era para menos. Las absurdas historias poco conocidas a¨²n de Pep¨ªn Tre entreten¨ªan a un p¨²blico en general bastante mayor que Silvia y Mar¨ªa. Muchos de esos antiguos j¨®venes acudieron con sus hijos, algunos de los cuales dorm¨ªan en sus regazos. Como Christian, un beb¨¦ ajeno a las gracias y canciones de Pep¨ªn Tre o Javier Krahe y al que su t¨ªo mec¨ªa entre risas y aplausos. "Nos hemos tra¨ªdo a mi sobrino porque esta ma?ana nos han cambiado los planes", aseguraba mirando embelesado al ni?o. "Este a?o no hemos venido tanto como el pasado, que no faltamos ni un domingo. Pero es como todo, ahora ya no podemos salir tanto de noche y nos conformamos con ver a los cantautores de d¨ªa o con o¨ªr sus discos", reconoc¨ªa el t¨ªo canguro con el asentimiento de su pareja.

Sin embargo, para Javier Krahe, noct¨¢mbulo y fumador impenitente, que ayer comenz¨® su actuaci¨®n con el saludo inusual de "buenos mediod¨ªas", le resultaba raro cantar tan temprano: "Como es un sitio cerrado y con focos puedes olvidarte que es de d¨ªa, pero a estas horas el cuerpo no te pide cantar, s¨®lo canturrear". Y es que el p¨²blico de estas matinales no es el que suele verse de noche por los garitos de Madrid. "Es otro tipo de gente", reconoc¨ªa adormilado Krahe, "no sabr¨ªa decir cu¨¢l es la diferencia, quiz¨¢ haya m¨¢s complicidad con el que viene de noche, estudiantes y cosas as¨ª"."Viene m¨¢s gente ajena al sindicato que afiliados", observaba extra?ado Tarduchi, "y aunque pagar a los artistas y t¨¦cnicos nos cuesta m¨¢s que lo que sacamos de las entradas [500 pesetas para los afiliados y 800 para los que no lo son], volveremos a organizar el a?o que viene otro ciclo sin repetir artistas y tray¨¦ndolos de todos los puntos de Espa?a".