Uno de los barrios m¨¢s deprimidos de la ciudad

La calle de Montamarta forma parte del barrio de Arcos, (24.821 habitantes), integrado en el distrito de San Blas y uno de los m¨¢s pobres de la ciudad, seg¨²n el estudio dirigido por el soci¨®logo Carlos Lles en 1992 para la Comunidad. Esta barriada est¨¢ limitada por la avenida de Guadalajara y las calles de los Hermanos Garc¨ªa Noblejas, Pobladura del Valle y la carretera de Vic¨¢lvaro.Sus problemas de paro, fracaso escolar y marginaci¨®n son parecidos, para los autores del estudio, a los de otros vecindarios del sureste de la ciudad como Orcasitas, Orcasur, Entrev¨ªas, San Ferm¨ªn y Palomeras Sureste.

Todos estos barrios est¨¢n habitados por antiguos chabolistas realojados en vivienda p¨²blica. Pero, en Arcos, las casas son m¨¢s antiguas que en los otros.

Buena parte de los pisos fueron construidos en los a?os sesenta por la Obra Sindical del Hogar, por lo que, a pesar de las rehabilitaciones, presentan un aspecto precario y tienen superficies inferiores a los cincuenta metros cuadrados. S¨®lo las torres de la avenida de Guadalajara y de Hermanos Garc¨ªa Noblejas, construidas en los a?os setenta, son m¨¢s modernas.

En este parque de pisos sociales abundan las situaciones irregulares (ventas fraudulentas de viviendas p¨²blicas, subarriendos bajo cuerda, ocupaciones por el m¨¦todo de la patada).

En Arcos se encuentra la mayor favela de la ciudad, formada por los doscientos prefabricados de Los M¨®dulos y otros doscientos chamizos de Los Focos, ambos en la avenida de Guadalajara. Los dos asentamientos, habitados por familias gitanas, deb¨ªan haber desaparecido hace muchos a?os pero los planes de realojamiento se han incumplido y la zona se ha convertido en un importante punto de venta de droga.Producto del hartazgo

Javier Ruiz, miembro de la junta directiva de la asociaci¨®n vecinal San Blas-Simancas-Garc¨ªa Noblejas, cree que la ira ciudadana desatada el pasado fin de semana en el mercado de Montamarta es producto del hartazgo por una situaci¨®n ya vieja."Desde hace una d¨¦cada los habitantes de esa barriada han padecido la venta de droga y cada a?o la tensi¨®n estalla en una zona", explica, matizando que la asociaci¨®n no est¨¢ de acuerdo con las patrullas "porque generan violencia".

"Llevamos a?os pidiendo a las instituciones que den una utilidad al mercado, en cuya rehabilitaci¨®n se ha invertido dinero p¨²blico, pero no lo han hecho y los toxic¨®manos se han refugiado en ¨¦l, nunca deb¨ªa haberse dejado abandonado", a?ade.

Ruiz cree que el paro, la droga y el fracaso escolar son algunos de los principales problemas: "El cercano pol¨ªgono industrial de Juli¨¢n Camarillo se ha ido desmantelando y eso ha supuesto un buen n¨²mero de prejubilaciones".