Un peculiar homenaje

Tras restaurar una de las primeras c¨¢maras creadas por los hermanos Lumi¨¨re, Philippe Poulet, estudioso del Museo de Cine de Ly¨®n, tiene la idea de hacerles un curioso homenaje con motivo del centenario del nacimiento del cine. Al igual que durante los ¨²ltimos a?os del siglo XIX los operadores de los hermanos Lumi¨¨re viajan por todo el mundo en busca de noticias, se pide a distintos directores de muy diferentes pa¨ªses que hagan una pel¨ªcula en las mismas condiciones que los hermanos Lumi¨¨re.Un solo plano de 52 segundos de duraci¨®n, rodado sin sonido sincr¨®nico ni iluminaci¨®n, en un m¨¢ximo de tres tomas, y revelado y positivado en la misma c¨¢mara. Estas son las condiciones que 40 directores de todo el mundo aceptan para rodar, sin recibir a cambio la menor retribuci¨®n, su particular homenaje a los hermanos Lumi¨¨re. Mientras ellos ruedan, la realizadora Sarah Moon hace un peque?o reportaje en v¨ªdeo que luego acompa?a a los planos rodados por los diferentes directores.

Locura por el cine

El resultado es un curioso homenaje de muy discutible inter¨¦s, que antes que nada demuestra la locura por el cine de un amplio grupo de directores de los m¨¢s variados pa¨ªses. Sin embargo, el problema de Lumi¨¨re y compa?¨ªa, m¨¢s all¨¢ de la posible originalidad del experimento, es que, al fin y al cabo, se reduce a una sucesi¨®n de 40 pel¨ªculas de muy corta duraci¨®n y que su visi¨®n resulta un tanto fatigosa. En buena parte por la poca originalidad mostrada por la mayor¨ªa de los directores y porque la realizadora Sarah Moon trata de hacer demasiado homog¨¦neo el conjunto.El m¨¢s pragm¨¢tico es Vicente Aranda, que, con su personal humor, se limita a rodar desde otro ¨¢ngulo uno de los planos de su excelente Libertarias. Mientras, Bigas Luna se muestra de lo m¨¢s personal al hacer un plano de una mujer desnuda sentada en un sembrado dando de mamar a un ni?o. Y, para terminar con los espa?oles, Fernando Trueba se sit¨²a entre los m¨¢s cercanos a los Lumi¨¨re y a los m¨¢s politizados al rodar al objetor de conciencia F¨¦lix Romeo saliendo de la prisi¨®n de Zaragoza.

Entre los dem¨¢s participantes en el proyecto hay que destacar el plano del franc¨¦s Alain Corneau, consistente en un baile de una danzarina del norte de la India coloreado a mano, tal como se hac¨ªa en la ¨¦poca. El del rumano Luc¨ªan Pintilie es uno de los m¨¢s espectaculares, con unos novios que, tras su boda, se suben en un helic¨®ptero y se van. As¨ª como el del franc¨¦s Jacques Rivette, donde una ni?a juega en una plaza al tiempo que dos personas mayores tropiezan.

Mientras la sueca Liv Ullmann se limita a retratar al famoso operador Sven Nykvist durante su trabajo; el franc¨¦s R¨¦gis Wargnier, a fotografiar al presidente Fran?ois Mitterrand, y el alem¨¢n Wirri Weriders, a sacar a los actores Bruno Ganz y Otto Sander sobre el tejado de la gran Biblioteca de Berl¨ªn.