Por el empleo, una vez m¨¢s
Coincide este Primero de Mayo con un acontecimiento pol¨ªtico tan singular en la historia de nuestro pa¨ªs como es que la inminente investidura para la presidencia del Gobierno de un representante de la derecha espa?ola se haga con el respaldo expl¨ªcito de la derecha nacionalista.Esta coincidencia en el tiempo nos servir¨¢, hoy y ma?ana, para recordarle al nuevo Gobierno que desde el primer d¨ªa le planteamos que lo primero era el empleo. Y que una de las piedras de toque de nuestras relaciones con ¨¦l ser¨¢ el tipo de pol¨ªtica que aplique para enfrentar este problema.
Desde el inicio de la transici¨®n a la democracia la sociedad espa?ola ha venido manifestando que la lucha contra el paro deb¨ªa ser lo prioritario. Todas las fuerzas pol¨ªticas se han hecho eco de esta demanda y se han comprometido a buscarle soluciones.
Pero el saldo es un fracaso. No de otra forma se puede calificar el dato de esos tres millones y medio de parados e incluso que, justific¨¢ndolo precisamente en la lucha contra el paro, otros tres millones y pico de asalariados tengan contratos precarios.
Quiz¨¢ por ese desajuste entre lo que la sociedad considera prioritario y el balance de situaci¨®n que tiene delante, se observa un creciente escepticismo respecto de la voluntad real de cada uno, empezando por los Gobiernos, de situar el empleo en el centro de las preocupaciones.
Motivos hay para ello. Si el ¨¦nfasis que en Espa?a y en Europa se ha puesto, por ejemplo, para intentar ajustar determinadas variables macroecon¨®micas se hubiese puesto para orientar las pol¨ªticas econ¨®micas en pro del empleo, es probable que las cifras de paro fuesen sensiblemente inferiores de lo que son.
En Comisiones Obreras hay clara conciencia de que en un mundo cada vez m¨¢s interrelacionado y con econom¨ªas abiertas, una eficaz lucha contra el paro exigir¨ªa una coordinaci¨®n internacional y una voluntad pol¨ªtica inconcebibles hoy por el tipo de intereses dominantes -los del capital- y la hegemon¨ªa del pensamiento y de las fuerzas pol¨ªticas favorables a esos intereses.
Pero eso no significa que el paro carezca de soluciones ni legitima que con la coartada del desempleo se desregule, fragmente y dualice el mercado de trabajo y se agredan sistem¨¢ticamente, las conquistas de los sistemas p¨²blicos de protecci¨®n social.
La creaci¨®n de empleo es el resultado de una conjunci¨®n de pol¨ªticas que, entre otras cosas, favorezcan el crecimiento econ¨®mico, reorganicen y redistribuyan mejor el tiempo de trabajo, aprovechen la potencialidad para el empleo -los yacimientos de empleo de los que habla Delors- que encierran las m¨²ltiples necesidades sociales sin satisfacer o insuficientemente satisfechas, mejoren la productividad del capital fijo, consigan mayor eficiencia en la previsi¨®n y provisi¨®n de las necesidades de formaci¨®n, as¨ª como una adecuada intermediaci¨®n en el mercado de trabajo. Actuar en todos estos frentes y conseguir resultados es, sin duda, una tarea que exige esfuerzos y sacrificios s¨®lo posibles con un amplio consenso social y pol¨ªtico.
En este Primero de Mayo, Comisiones Obreras reitera su disposici¨®n a promover y a participar en todas aquellas iniciativas que contribuyan a llevar adelante las citadas pol¨ªticas. En el bien entendido de que la distribuci¨®n de los sacrificios habr¨¢ de estar inspirada en la solidaridad y que en todo momento se tienda a favorecer la m¨¢xima cohesi¨®n social posible.
Dicho m¨¢s claramente, no ser¨ªan aceptables, por ejemplo, nuevas medidas legales encaminadas a favorecer el despido de trabajadores, cambios en la fiscalidad y en la pol¨ªtica de rentas que en lugar de incrementar la equidad acentuaran las diferencias, o lecturas de acuerdos como los del llamado Pacto de Toledo que Se alejaran del objetivo de consolidar y hacer m¨¢s equitativ6 nuestro sistema de Seguridad Social. En este sentido, queremos dejar claro que por coherencia con nuestra defensa de la solidaridad entre generaciones, sectores y territorios combatiremos cualquier medida que signifique retroceso en tal direcci¨®n, como lo ser¨ªan las concesiones pol¨ªticas respecto a la caja ¨²nica de la Seguridad Social.
Apostamos por la negociaci¨®n y por el impulso del protagonismo que debe corresponder a sindicatos y patronales en la regulaci¨®n de las condiciones de trabajo de los trabajadores.
Manifestamos una vez m¨¢s nuestra convicci¨®n de que a la creciente supranacionalizaci¨®n de la econom¨ªa y de la pol¨ªtica debe corresponderle la supranacionalizaci¨®n de la acci¨®n sindical. En esa perspectiva, consideramos esencial, profundizar en la unidad de acci¨®n con UGT y en la unidad de los trabajadores.
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