El Gobierno pacta con los accionistas que Cortina sea presidente de Repsol

El Gobierno ha alcanzado un pacto con los principales accionistas del grupo Repsol -BBV, La Caixa y Petr¨®leos Mexicanos- para abordar el cambio en la presidencia, que pasar¨ªa a ocupar Alfonso Cortina en lugar de Oscar Fanjul. Este consenso, no obstante, ha estado y est¨¢ te?ido por el enfrentamiento entre Rodrigo Rato, vicepresidente segundo y ministro de Econom¨ªa, y Josep Piqu¨¦, ministro de Industria, que tienen distintos puntos de vista sobre el control y nombramientos en las empresas p¨²blicas.

Rato quiere cambiar a todos los presidentes; Piqu¨¦ sostiene que cada caso es distinto. Esta es la fisura m¨¢s notable en el seno del equipo econ¨®mico del Gobierno, que puede amenazar con ruptura.Como suele ser preceptivo, el vicepresidente y ministro de Econom¨ªa, Rodrigo Rato, pretende imponer su tesis en el ¨¢mbito de las empresas p¨²blicas, que se resume as¨ª: "Todos los presidentes de empresas p¨²blicas nombrados por el Gobierno anterior deben ser destituidos". Versiones no confirmadas aseguran que la tesis de la "sustituci¨®n total" aparece plasmada en la carta del nuevo subsecretario de Econom¨ªa a Francisco Luz¨®n en la que ratificaba la destituci¨®n de ¨¦ste ¨²ltimo en raz¨®n de la pol¨ªtica de cambiar a todos los presidentes de grupos p¨²blicas.

Jorsep Piqu¨¦, ministro de Industria (y privatizaciones) no comparte posiciones tan dr¨¢sticas. Desde un primer momento aire¨® sus preferencias por sustituciones limitadas, en funci¨®n de las capacidades o adecuaci¨®n de los gestores actuales. Con inusitada rapidez, el enfrentamiento brota en dos puntos del entramado empresarial p¨²blico: en la SEPI (Sociedad Estatal de Participaciones Industriales). En la SEPI, sociedad tenedora de las acciones de T¨¦neo y Repsol, el conflicto se centra en el nombramiento de presidente. Luis G¨¢mir es el candidato, pero no est¨¢ bien visto por Josep Piqu¨¦.

El caso Repsol es m¨¢s espinoso. A la "diferente visi¨®n" de Rato, partidario de sustituir a ?scar Fanjul, el presidente actual, por Alfonso Cortina tropez¨® inicialmente con la pretensi¨®n de Josep Piqu¨¦ de confirmar a Fanjul, se une la presencia de dos accionistas nacionales poderosos, el BBV (con el 7%) y la Caixa (5%).

As¨ª que la sustituci¨®n de Oscar Fanjul por Alfonso Cortina, pactada, ha requerido negociaciones con los accionistas afectados (BBV, la Caixa y Pemex), quienes, en alg¨²n caso, ten¨ªa candidato propio. La Caixa, por ejemplo, propuso como sustituto de Fanjul a Josep Manuel Bas¨¢?ez, consejero director general de Autopistas de Catalu?a (ACESA). Cortina presidir¨¢ Repsol aunque en un cuadro de equilibrios y compromisos con la caja catalana. El pacto, seg¨²n fuentes de los accionistas, supondr¨¢ que aumenten su n¨²mero de representantes en el consejo, hasta ahora limitado a uno y ninguno en el caso de La Caixa. Teniendo en cuenta que Cortina es consejero del BBV se podr¨ªa considerar como representante de dicho banco en la petrolera y que La Caixa y Pemex tengan dos consejeros. La Caixa podr¨ªa, adem¨¢s, tener mayor control en la c¨²pula de Gas Natural, en cuyo capital participa con Repsol.

Inversores inquietos

Los cambios en las presidencias de Repsol y Argentaria ejecutados por el Gobierno suscitan una fuerte pol¨¦mica. "Es una se?al mal¨ªsima para el mercado", explicaron a EL PA?S fuentes de una conocida firma de valores. "Que cambien al presidente de la SEPI es l¨®gico, porque tiene que seguir la pol¨ªtica que marque el Gobierno; pero cambiar los presidentes de empresas que tienen una base accionarial fuerte, cuando el Estado dice que va a privatizarlas, carece de sentido. Sociedades como Repsol o Argentaria necesitan gestores independientes de los intereses de sus n¨²cleos duros".Merrill Lynch, firma que ha trabajado con cierta frecuencia para Repsol, elabor¨® un informe -destinado exclusivamente a sus clientes- para analizar el cambio de presidencia en el grupo. El diagn¨®stico de Merrill es duro. "La preocupaci¨®n de los inversores se centra en la naturaleza pol¨ªtica del potencial cambio de gesti¨®n y en la capacidad del Gobierno para decretar tal cambio cuando controla solamente el 10% de la compa?¨ªa".

Merrill asegura que el hecho de que Alfonso Cortina pertenezca al Consejo del BBV "crea una incertidumbre adicional puesto que aumenta la preocupaci¨®n en torno a un potencial conflicto de intereses".