Decenas de plataformas petroleras del mar del Norte quedar¨¢n en desuso en 10 a?os
La Shell seleccionar¨¢ seis ideas para decidir qu¨¦ hacer con la 'Brent Spar'
En los pr¨®ximos 10 a?os terminaran su vida ¨²til unas 50 plataformas petrol¨ªferas de las m¨¢s de 400 que emergen, como catedrales del siglo XX, cuando se sobrevuela el mar del Norte partiendo de Aberdeen, una ciudad escocesa convertida en la capital petrolera de Europa. Algunas plataformas son enormes, otras m¨¢s peque?as, unas son de cemento, otras de acero, las m¨¢s modernas flotan, pero la mayor¨ªa est¨¢n clavadas en el fondo del mar a entre 100 y 300 metros de profundidad. Surgidas de la euforia ingenieril derivada del descubrimiento de petr¨®leo en estas aguas en los a?os sesenta, no est¨¢n hechas pensando en el futuro, sino s¨®lo en el beneficio inmediato. Ahora la industria se plantea qu¨¦ hacer con ellas. A partir de 1997 todas las plataformas nuevas deber¨¢n ser desmontables en su totalidad, por acuerdo internacional.
El primer ejemplo de lo que se avecina, aunque no representativo del problema, fue la plataforma Brent Spar que la empresa angloholandesa Shell pretend¨ªa hundir en 1995 en aguas profundas internacionales con todas las bendiciones. del Gobierno brit¨¢nico. La reacci¨®n p¨²blica, encabezada por la organizaci¨®n Greenpeace, cogi¨® por sorpresa a la empresa y a toda la industria. La plataforma fue remolcada a aguas noruegas, donde espera una decisi¨®n de su propietaria. "Hemos recibido muchas ideas, algunas muy originales, sobre qu¨¦ hacer con ella, y seleccionaremos seis y de ellas escogeremos dos", se?ala Eric Faulds, encargado del abandono, como se denomina eufim¨ªsticamente, de la Brent Spar. Faulds, un ingeniero con experiencia, sigue creyendo que la decisi¨®n hundir la Brent Spar, mediante explosiones controladas, tomada despu¨¦s de valorar factores econ¨®micos sobre todo, era la mejor."Noruega no estaba por acoger la plataforma, aunque ahora ha cambiado de actitud, y no se pod¨ªa remolcar al Reino Unido porque llega a 109 metros de profundidad, m¨¢s hondo que las costas brit¨¢nicas". Faulds explica que se puede intentar desmontar en la costa noruega, pero que nuevos an¨¢lisis de la estructura indican el riesgo de que se rompa y se hunda antes de desmantelarla. Y cuesta cuatro veces m¨¢s.
'Brent Spar'
Pero la Brent Spar, ya in¨²til porque se utilizaba como dep¨®sito antes de tenderse oleoductos submarinos entre plataformas y la tierra, no resulta representativa, porque es flotante, al igual que ¨²nicamente unas pocas de los centenares de plataformas situadas en el mar del Norte. En otros casos lo que pasa es que se ha explotado ya mucho el yacimiento y la plataforma no resulta rentable.De tama?o similar a la torre Eiffel pero mucho menos livianas, algunas de las plataformas, como la Magnus y la reci¨¦n renovada Brent Bravo (Brent es el nombre del yacimiento, uno de los m¨¢s importantes) son las m¨¢s pesadas construidas nunca (llegan hasta las 1,5 millones de toneladas). Son el. orgullo de la ingenier¨ªa, porque el ambiente de este mar (fr¨ªo, olas, viento y grandes profundidades) es mucho m¨¢s hostil que otros con petr¨®leo como el Golfo de M¨¦xico o el oce¨¢no ¨ªndico.
All¨ª viven en turnos de 15 d¨ªas y jornadas de 12 horas trabajadores altamente especializados, como buzos y t¨¦cnicos de perforaci¨®n, que van y vienen, a veces en condiciones muy peligrosas, en helic¨®ptero. Representan el 75% de la producci¨®n europea y s¨®lo en el Reino Unido este petr¨®leo y gas natural dan trabajo a 300.000 personas.
En los pr¨®ximos d¨ªas se re¨²nen representantes de los pa¨ªses ribere?os para abordar el problema, y por eso Greenpeace empieza ahora una nueva campa?a, con su nuevo barco, el Arctic Sunrise, centrada en las plataformas. Quieren que, por lo pronto, la moratoria decidida en 1995 sobre el hundimiento se convierta en prohibici¨®n definitiva.
El mar no es un cubo de la basura pero no se ha encarado el problema de las estructuras submarinas, de millones de toneladas de peso, que probablemente se van a quedar irremediablemente en el fondo del mar, como reliquias de una etapa industrial en que se actu¨® con ligereza cara al futuro.
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