La 'cultura religiosa' como "coartada"
Un equipo de profesores de filosof¨ªa de bachillerato ha elabora do a lo largo del presente a?o acad¨¦mico el libro Sociedad, cultura y religi¨®n (Ediciones El Laberinto, SL, de Madrid) que fue presentado muy recientemente en p¨²blico. Este texto in tenta dar respuesta al programa para esta materia previsto por el anterior equipo directivo de Educaci¨®n como la "alternativa" que habr¨ªa de ofrecerse, en dos de los cuatro cursos de la ESO y en uno del bachillerato, a los alumnos que no quieran la clase confesional de religi¨®n En la introducci¨®n de dicho texto, los profesores afirman: "El hecho de que hayamos colaborado en la aparici¨®n de estos materiales no quiere decir que los autores -tampoco los editores- estemos de acuerdo con la existencia de una materia alternativa obligatoria para los alumnos que no eligen las ense?anza de Religi¨®n".Uno de los autores, Jos¨¦ Antonio Baigorri, confirma esta declaraci¨®n de principio y rechaza una posible utilizaci¨®n interesada tanto del esfuerzo realizado por todo el equipo como de su intenci¨®n ¨²ltima. Baigorri dice que lo que han pretendido es dar "contenido y seriedad" a un programa propuesto por el propio Ministerio saliente y a una materia que tiene "entidad suficiente como para incorporarla formalmente en los dos cursos del bachillerato, aunque tal vez no en la secundaria. "Todo ello", afirma este profesor,, "con independencia de que se presente: como alternativa a la ense?anza confesional de la religi¨®n" que ¨¦l, pesonalmente, "no quisiera ver en la escuela p¨²blica".
Baigorri recuerda como una experiencia "muy negativa" la anterior alternativa, la de la asignatura de ?tica, precisamente porque muy pocos se la tomaron en serio. "As¨ª que por respeto a m¨ª mismo, como profesor, yo he querido contribuir a evitar que aquella negativa experiencia se repitiera".
M¨¢s beligerante, Juli¨¢n Arroyo, profesor tambi¨¦n de filosofia, dice que declin¨® sumarse al proyecto de sus colegas, porque le parece "repugnante" la sola sospecha de que pueda llegar a instrumentalizarse el estado de necesidad de los profesores de filosof¨ªa [se refiere al retroceso experimentado por esta materia en los planes de estudios vigentes] como "coartada" para la imposici¨®n de la clase de religi¨®n confesional.
Juan Jos¨¦ Tamayo, de la asociaci¨®n de te¨®logos Juan XXIII, adem¨¢s de manifestar su absoluto rechazo a los Acuerdos entre el Estado y la Santa Sede, se?ala que las actitudes y los valores evang¨¦licos (que es lo que presuntamente la Iglesia quiere inculcar desde la escuela) son, por definici¨®n, "inevaluables e inacademizables".
Tamayo tambi¨¦n rechaza que el estudio del hecho religioso se utilice como. "coartada" para la clase confesional. En su opini¨®n, la dimensi¨®n cultural y social de la religi¨®n debe analizarse en cada contexto acad¨¦mico en que aquella aparezca: en el arte, en la literatura, en la geograf¨ªa o en la historia.
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