En la capital se han abierto solamente cuatro farmacias durante los ¨²ltimos quince a?os

Lograr una farmacia en Madrid es una misi¨®n casi imposible. A las 3.100 solicitudes de apertura existentes en la Consejer¨ªa de Sanidad desde hace una semana les anteceden las 4.600 que hay en el colegio profesional y que est¨¢n atascadas desde hace a?os. Y todo para lograr una de las 50 boticas que un real decreto permitir¨¢ abrir. Curiosamente, los boticarios con botica tienen preferencia en estas adjudicaciones frente a los parados. La situaci¨®n es tan ca¨®tica que en los ¨²ltimos 15 a?os en Madrid se han abierto cuatro farmacias. S¨®lo una ley regional puede poner orden.

El n¨²mero de farmacias no aumenta en la capital, pero los farmac¨¦uticos s¨ª. Cada a?o salen de las facultades madrile?as unos mil licenciados que tendr¨¢n grandes problemas para encontrar trabajo tras un mostrador. En los ¨²ltimos 15 a?os, en Madrid se han abierto s¨®lo cuatro boticas. ?nicamente en los pueblos de la regi¨®n hay sitio para la esperanza: 117 esta blecimientos en 15 a?os, casi ocho al a?o. "Es el atasco total y un bochorno para la profesi¨®n", comenta Pilar Aparicio, de la Asociaci¨®n de Farmac¨¦uticos en Paro. Entre los a?os 1980 y 1986, las farmacias de la capital no s¨®lo no aumentaron en n¨²mero, sino que disminuyeron. Pasaron de 1.792 a 1.791. Entre 1987 y 1995 se abrieron cuatro nuevas, quedando su total en 1.796. Curiosamente, en 1995, mientras s¨®lo se abr¨ªan dos farmacias en Madrid, se vendieron 45 en la capital y 11 en la regi¨®n. Los precios de una farmacia var¨ªan en funci¨®n de sus ventas y situaci¨®n. Una botica puede valer -local y existen cias incluidas- entre 70 y 250 millones de pesetas.

Y es que, a pesar de que la ciudad se expande con la creaci¨®n de nuevos barrios, el n¨²mero de habitantes se estanca o disminuye en el casco urbano, lo que hace imposible que los farmac¨¦uticos parados. tengan la oportunidad de lograr un establecimiento con la actual legislaci¨®n en la mano, que impone distancias m¨ªnimas entre es tablecimientos y da ventaja a los licenciados con experiencia frente a los desempleados. Los parados, desesperados ante unas leyes que les impiden ejercer, se agarran a un real decreto del pasado d¨ªa 12 que reduce el n¨²mero de habitantes m¨ªnimo por botica de 4.000 a 2.800.

Hasta el pasado martes, los parados hab¨ªan presentado m¨¢s de 3.100 solicitudes de nuevas farmacias en la Consejer¨ªa de Salud (v¨¦ase EL PA?S de ayer). Sin embargo, olvidan que los boticarios con botica tambi¨¦n tienen preferencia en este caso. Pueden reclamar los nuevos establecimientos y quedarse con ellos.Adem¨¢s, un portavoz del Colegio de Farmac¨¦uticos de Madrid explic¨® ayer que los licenciados que presentaron sus solicitudes en la Consejer¨ªa de Salud tendr¨¢n que esperar a que se tramiten las 4.600 peticiones que acumulan desde hace a?os en el colegio y que todav¨ªa no han sido tramitadas. "Est¨¢ claro que las nuestras [las solicitudes amontonadas en el colegio] son m¨¢s antiguas y tienen preferencia", a?adi¨® el portavoz. De estas 4.600 solicitudes de nuevas aperturas que se acumulan en el colegio profesional, el a?o pasado s¨®lo se tramitaron unas 300. Sus expedientes salieron hacia la Comunidad de Madrid para que esta instituci¨®n firme o deniegue las aperturas. Sin embargo, muchos de estos expedientes se quedar¨¢n en el camino a causa de las denuncias que contra sus peticionarios interpusieron otros licenciados que tambi¨¦n deseaban abrir un establecimiento en el mismo sitio. De hecho, el a?o pasado, s¨®lo se abrieron 13 nuevas farmacias en toda la regi¨®n.De las universidades madrile?as salen todos los a?os casi mil licenciados en farmacia, la mayor¨ªa de la Complutense, que firma unos 600 t¨ªtulos cada a?o. Desde esta instituci¨®n se explic¨® ayer que en Espa?a hay 24.000 estudiantes de Farmacia y 90.000 en toda la Uni¨®n Europea. "S¨®lo en nuestra universidad tenemos 5.600 matriculados", dicen.

Seg¨²n la Asociaci¨®n de Farmac¨¦uticos en Paro, el 80% de los licenciados no encuentra trabajo en el sector farmac¨¦utico. "Y es que la mayor¨ªa tiene que colocarse en cosas alternativas. En nuestra asociaci¨®n tenemos repartidores de pizzas, churreros, inform¨¢ticos y secretarios, por ejemplo".