Pujol quiere revisar m¨¢s de 20 leyes estatales para elevar al m¨¢ximo el techo auton¨®mico

La revisi¨®n de varias leyes (Administraci¨®n del Estado, fuerzas de seguridad, puertos y costas) fue pactada en el acuerdo de investidura de abril. Las otras leyes objeto de revisi¨®n figuran en el dictamen dirigido por el catedr¨¢tico Enric Argullol. Fuentes de Presidencia han confirmado que las leyes a las que se refer¨ªa Pujol en su conferencia son las contenidas en el informe jur¨ªdico dirigido por el doctor Argullol".El informe propugna revisar m¨¢s de 20 leyes: Funci¨®n P¨²blica, R¨¦gimen Local, C¨¢maras de Comercio, Poder Judicial, Fuerzas de Seguridad, Protecci¨®n Civil, Radio y Televisi¨®n, Telecomunicaciones, Ense?anza, Universidad, Industria, Petr¨®leo, Cajas de Ahorros, Seguros, Privados, Suelo, Costas, Aguas, Planes y Fondos de Pensiones y Mercado de Valores, sustancialmente. En algunas, como la del Suelo, ya hay acuerdo.

El congreso de Convergencia -Democr¨¢tica del pr¨®ximo 9 de noviembre ser¨¢ el escenario id¨®neo para profundizar el marco jur¨ªdico de la Generalitat, seg¨²n ha se?alado el portavoz de CiU en el Congreso, Joaquim Molins. Con este nuevo enfoque, Pujol quiere se?alar tambi¨¦n que tiene, un claro proyecto con numerosos objetivos concretos a medio plazo.

Se trata de una vuelta a las posiciones de 1994, cuando, tras el pacto con el entonces presidente Felipe Gonz¨¢lez, Pujol plante¨® la conveniencia de imprimir "un giro auton¨®mico" para elevar el nivel de autogobierno de Catalu?a. Los estudios que soportan esta estrategia parte de los cuales ya trascendieron entonces (v¨¦ase EL PA?S de 7-10 de febrero de 1994)- constituyen el principal apoyo de Pujol, quien ha vuelto a reiterar recientemente su plena identificaci¨®n con los mismos.

Lectura proauton¨®mica

Los juristas parten de la base del car¨¢cter evolutivo de las interpretaciones del Tribunal Constitucional (TC), as¨ª como de la posibilidad de lecturas alternativas del mismo Constitucional. Los estudios jur¨ªdicos proponen una lectura "proauton¨®mica de la Constituci¨®n". Afirman que "la autonom¨ªa pol¨ªtica es uno de los valores centrales del r¨¦gimen constitucional vigente" y consideran que la "autonom¨ªa consagrada en el art¨ªculo 2 es una autonom¨ªa pol¨ªtica; es decir, la entidad que disfruta de esta condici¨®n tiene la facultad de hacer pol¨ªticas propias decididas por sus ¨®rganos de Gobierno". En su opini¨®n, es una autonom¨ªa cualitativamente diferente de la municipal o universitaria. Se?ala que la facultad de hacer pol¨ªticas propias es lo que diferencia la posici¨®n de la Generalitat y la de las entidades locales o administrativas que como mucho tienen una autonom¨ªa administrativa o de gesti¨®n.

La manifestaci¨®n m¨¢s clara de la autonom¨ªa pol¨ªtica est¨¢ en la potestad de hacer leyes. Pero los juristas se?alan que la aut¨¦ntica autonom¨ªa pol¨ªtica supone que "el contenido de las leyes auton¨®micas pueda ser renovador" de la legislaci¨®n estatal. Si "su contenido es meramente organizativo o repetitivo, entonces la manifestaci¨®n de autonom¨ªa pol¨ªtica es mas aparente que real". Los autores consideran que la autonom¨ªa implica tambi¨¦n limitaciones. Pero advierten que estos l¨ªmites tienen una doble cara, ya que al mismo tiempo que circunscriben la actividad de las entidades auton¨®micas son como una acotaci¨®n negativa de la misma acci¨®n del Estado.

Esta interpretaci¨®n proauton¨®mica de la Constituci¨®n supone un cambio del modelo de Estado. No es cuesti¨®n s¨®lo de transferir servicios y funcionarios, sino que lo fundamental es "que la pol¨ªtica ya no la hace el Estado, sino que grandes proporciones de la pol¨ªtica corresponden a la entidad aut¨®noma, la cual decide sin interferencias d¨®nde se quiere poner el ¨¦nfasis, si -por decirlo en el ejemplo cl¨¢sico- se pone en los tanques o en la mantequilla".

Sin criterios generales

La posibilidad de una nueva lectura de la Constituci¨®n es posible por la propia doctrina del tribunal. El TC ha evitado establecer criterios generales, lo cual significa que muchas decisiones no pueden extrapolarse. Por esta raz¨®n, el TC no es prisionero de sus anteriores decisiones para resolver nuevas controversias. Los dict¨¢menes subrayan la influencia de la actividad pol¨ªtica en la producci¨®n del derecho. En su opini¨®n, "los acuerdos pol¨ªticos podr¨ªan ir construyendo una nueva interpretaci¨®n de los preceptos constitucionales el peso de los cuales seria muy grande cuando el tribunal tuviera que resolver otras cuestiones". A?aden que "los tribunales constitucionales, tambi¨¦n el de Espa?a, son muy sensibles al contexto institucional y pol¨ªtico", y citando a un jurista italiano recuerdan que "estos organismos adoptan decisiones pol¨ªticas con argumentaci¨®n jur¨ªdica no alej¨¢ndose del sentido que expresa en cada momento la amplia correlaci¨®n de fuerzas pol¨ªticas que asegura el funcionamiento de las instituciones". Pujol ha citado a menudo las sentencias del TC y del Tribunal de Justicia de Catalu?a favorables a la ense?anza en catal¨¢n como una consecuencia de la colaboraci¨®n de CiU con el Gobierno.

Otro aspecto destacado es el reconocimiento de la "heterogeneidad auton¨®mica como aut¨¦ntico principio para la articulaci¨®n del Estado". Se ampara en las diferencias establecidas en la propia Constituci¨®n entre "nacionalidades" y "regiones"; entre el nivel de competencias (comunidades del art¨ªculo 151 y del 143).

Subrayan el caso especial. de Catalu?a con la singular decisi¨®n del restablecimiento de la Generalitat con la f¨®rmula provisional de 1977.