"Entre los madrile?os tenemos buen nombre"

Entre m¨¢s de dos millones de insectos, 100.000 animales vertebrados naturalizados y 300.000 f¨®siles, hay una jirafa a medio vestir: ha perdido parte de su irrecuperable piel; un lobo marsupial de Tasmania, extinguido en los cincuenta; huesos de un mill¨®n ochocientos mil a?os; un megatherium, p¨¢jaros mariposa, insectos hojas, un elefante que caz¨® el duque de Alba y un toro de la ganader¨ªa P¨¦rez Belagua que no dice ni mu. Para ellos, hace mucho que lleg¨® el final y han sobrevivido a ese momento, demostrando lo in¨²til que resulta matar el tiempo. Siempre acaba por resucitar. El Museo Nacional de Ciencias Naturales tiene 225 a?os. Y su director, el ingeniero agr¨®nomo madrile?o Roberto Fern¨¢ndez de Celaya, est¨¢ a punto de cumplir 50. El, pr¨®ximo mes de marzo har¨¢ un a?o que trabaja en un despacho observado por dos silenciosos b¨²hos y una elefanta africana. Hubo una vez un museo obsoleto, casi desesperado. Ahora, con la exposici¨®n, Historia naturak el regreso, el caser¨®n del museo en los Altos del Hip¨®dromo empieza una nueva etapa.

Pregunta. ?C¨®mo puede estar vivo un museo con tantos cad¨¢veres?

Respuesta. Porque esta instituci¨®n tiene otra vertiente adem¨¢s de la cultural: la investigaci¨®n. Como parte del Consejo Superior de Investigaciones Cient¨ªficas, aqu¨ª se estudia biodiversidad, ecolog¨ªa, problemas medioambientales, paleontolog¨ªa, ecolog¨ªa evolutiva y volcanolog¨ªa.

Hay un total de 200 trabajadores en ello y se siguen descubriendo especies. Aunque lo que trasciende al p¨²blico son las exposiciones.P. ?Tiene este museo arraigo entre los madrile?os?

R. La mayor¨ªa de los visitantes son madrile?os, pero queremos reforzar la idea de que ¨¦ste es un museo nacional, a disposici¨®n del p¨²blico de toda Espa?a, aunque tenemos muy buen nombre entre los madrile?os.

P. ?Es un museo para ni?os?

R. No exclusivamente. En una misma sala hay especies para llamar la atenci¨®n de un ni?o, un visitante curioso y un experto.

P. ?El peor enemigo es la desidia o la falta de espacio?

R. El peor es el coleccionismo a ultranza, que conduce a almacenar de masiadas cosas y querer mostrarlas todas a la vez. Historia natural: el regreso, est¨¢ basada en la biodiversidad, un repaso a la riqueza del patrimonio cien t¨ªfico espa?ol. Pero, probablemente, el primer problema,de los museos es la falta de espacio.

P. ?Les quita mucho sitio la Escuela de Ingenieros Industriales?

R. Compartimos el espacio. La parte m¨¢s grande la tiene la escuela, con m¨¢s de 5.000 alumnos. Nuestra relaci¨®n de vecindad es excelente, pero a los dos nos gustar¨ªa contar con todo el edificio.

Historia natural. el regreso. Museo de Ciencias Naturales. Jos¨¦ G. Abascal, 2. Metro: R¨ªos Rosas. Lunes, cerrado.