La carne infectada puede cobrarse hasta 100 v¨ªctimas en Escocia

La confianza de los consumidores brit¨¢nicos en los productos c¨¢rnicos nacionales, de por s¨ª debilitada a causa de la epidemia de las vacas locas, vuelve a tambalearse. El estallido en Escocia de una nueva e inquietante epidemia causada por carne contaminada con una cepa de la bacteria E.Coli, que se ha cobrado ya once v¨ªctimas mortales y puede llegar a las 100, ha causado consternaci¨®n en el Reino Unido.

El envenenamiento fue calificado ayer por los expertos m¨¦dicos como el segundo m¨¢s grave de los causados por esta bacteria en el mundo, tras un brote ocurrido en Canad¨¢ en septiembre de 1985 que se sald¨® con 19 muertes. Richard Lacey, especialista conocido por su actitud cr¨ªtica hacia la industria alimentaria, ha a?adido inquietud al panorama sanitario al considerar sobre la base d¨¦ los m¨¢s de 300 afectados por la bacteria E. coli que el n¨²mero de v¨ªctimas puede llegar a 100.La epidemia de E. coli 0157 estall¨® el 17 de noviembre en la localidad escocesa de Wishaw. Ese d¨ªa alrededor d¨¦ 80 ancianos que hab¨ªan asistido a una comida especial de la parroquia del pueblo. hubieron de ser ingresados precipitadamente en hospitales de Lanarkshire y Glasgow. Un primer examen m¨¦dico revel¨® la presencia de esta Cepa de la bacteria E. coli, ingerida al parecer por los ancianos en el pastel y salsa de carne (el t¨ªpico gravy brit¨¢nico) suministrado por una carnicer¨ªa de la localidad. Pese a la inmediata alerta, John Barr & Son, el establecimiento del que parti¨® la contaminaci¨®n, sigui¨® vendiendo productos c¨¢rnicos por un periodo de tiempo cr¨ªtico que permiti¨® a la carne contamina da extenderse a varias tiendas a las que Barr, galardonado como carnicero del a?o en Es cocia este mismo oto?o, sigui¨® distribuyendo sus productos.

Falta de higiene

Siete empleados de la carnicer¨ªa han presentado s¨ªntomas del envenenamiento por la bacteria, transmitida a la carne precocinada por falta de higiene en su manipulaci¨®n y el uso de cuchillos previamente contaminados. El martes, el Consejo de Sanidad local cerr¨® una segunda carnicer¨ªa en la zona de Lanarkshire, debido a sospechas de que pudo haber recibido carne infectada. La bacteria, end¨¦mica en la caba?a de reses escocesas, es del mismo tipo que la que mat¨® a tres ni?os in Seattle (EE UU) en, 1993, tras consumir hamburguesas contaminadas, y a 11 escolares en Jap¨®n el a?o pasado. La muerte sobreviene por una s¨²bita disminuci¨®n de los gl¨®bulos rojos y fallos en el funcionamiento de los ri?ones.El caso ha provocado un agrio debate pol¨ªtico en Escocia entre los representantes de los partidos nacionalista y laborista, por un lado, y el gobierno regional que detenta el ministro conservador Michael Forsyth, por otro. La oposici¨®n ha criticado duramente el tratamiento de la epidemia por parte de las autoridades que se negaron a difundir la lista de establecimientos que recib¨ªan productos de John Barr. El jueves, y pese a que el n¨²mero de pacientes tratados en los hospitales escoceses se mantuvo en 140, sin que se detectaran nuevos casos, la alarma no hizo sino crecer.