Petici¨®n de 10 a?os para el ingeniero que falsific¨® decenas de tarjetas de cr¨¦dito con una m¨¢quina que ¨¦l mismo ide¨®

, La fiscal¨ªa de la Audiencia Nacional reclama 10 a?os de c¨¢rcel para Wilfred Walter Schule, un ingeniero electr¨®nico alem¨¢n de 35 a?os al que acusa de construir -con desechos de frigor¨ªficos y otros artificios- una ingeniosa m¨¢quina con la que falsific¨® decenas de tarjetas de cr¨¦dito.El fiscal cifra el total estafado en cerca de veinte millones de pesetas, si bien fuentes jur¨ªdicas subrayan que el fraude asciende en realidad a cientos de millones. "Las entidades que gestionan las tarjetas prefieren no asustar a los clientes", se?alan estos medios. Adem¨¢s, el fiscal pide penas de entre ocho y diez a?os para otras seis personas, tambi¨¦n implicadas en esta trama, en la que Walter era considerado el cerebro. Se trata de Marinela Costa, Jos¨¦ Ram¨®n Pozuelo, Juan Manuel Ben¨ªtez, Luciano Mart¨ªn, Alfonso G¨®mez e Isaac Francisco Abell¨¢n.

Los miembros de esta red fueron detenidos en 1993 en Marbella -donde en esa fecha resid¨ªa Walter-, Torrelodones y Toledo. Al ser detenidos, la polic¨ªa les decomis¨® decenas de tarjetas falsificadas, cinco coches de lujo de importaci¨®n ilegal, discos de ordenador y la citada m¨¢quina. La banda actuaba de la siguiente forma, seg¨²n el fiscal: en connivencia con empleados de comercios, obten¨ªa numeraciones existentes en bandas magn¨¦ticas de tarjetas con un alto nivel de cr¨¦dito. Estas numeraciones las plasmaban luego, mediante el citado invento, en otras falsificadas. Cuando una persona paga con tarjeta en un comercio, la numeraci¨®n de la banda magn¨¦tica queda registrada en el terminal del local.

Parte de las tarjetas cuya numeraci¨®n utilizaban hab¨ªan sido usadas previamente por sus titulares leg¨ªtimos en un lujoso restaurante madrile?o, en el que trabajaba uno de los encausados.

Los due?os de las tarjetas notaron que algo raro ocurr¨ªa cuando ve¨ªan, en los movimientos que les enviaban sus bancos, extracciones de dinero que ellos no hab¨ªan efectuado. S¨®lo con las numeraciones de dos tarjetas utilizadas por sus due?os leg¨ªtimos en el citado local, hicieron gastos cercanos a los tres millones. La fiscal¨ªa les imputa falsedad, tenencia de armas y receptaci¨®n.