Manuel Machado: ?Franco, 'voyou'?

En el art¨ªculo que A. Trapiello dedic¨® a M. Machado en EL PA?S (19 de enero de 1997) sostiene la hip¨®tesis "bastante audaz, pero no desmentida hasta hoy, por razonable", seg¨²n es cribe, de que en el poema 'Vo you'-chulo, granuja-, incluido en Cadencias de cadencias (1943), M. Machado "hac¨ªa el terrible retrato del dictador". Record¨¦moslo: "Ah¨ª est¨¢... Su mirada/ no es una espada, pues / se oculta y, empalmada, / la ves y no la ves;/ pero / de acero es/ es /. Brilla dura y cobarde, despiadada... No arde. / Ah¨ª est¨¢... Blanco... No / lo vio apenas el d¨ªa. / Su mano -garra- es fr¨ªa. / Lo peor de todo es que sonr¨ªa... Donde lo encuentres, ¨¢talo. No habiendo tiempo, m¨¢talo". Toda su interpretaci¨®n se basa en las "alusiones demasiado expl¨ªcitas" (?) a la "espada invicta", y a la "sonrisa famosa" del Caudillo, que el propio M. Machado hab¨ªa ensalzado en varios art¨ªculos y en un soneto recogido en Horas de oro (193 8). "Donde pone Blanco, l¨¦ase Franco, y todo cuadra". Evidentemente, con esta ¨²ltima operaci¨®n todo cuadrar¨ªa, pero ya no ser¨ªa el poema de M. Machado, sino el que desear¨ªa el audaz articulista, quien ya expuso dicha idea en su antolog¨ªa del poeta -Poes¨ªa, Barcelona, Planeta, 1993, p¨¢ginas XXVI-XXVII: "No habr¨¢ hispanista que pueda negar que en ese Blanco pueda esconderse Franco"- y en Las armas y las letras -ib¨ªdem, 1994, p¨¢ginas 233234. Trapiello cree casi c¨®mica la referencia a la sonrisa de Franco; no tiene en cuenta que era rasgo iconogr¨¢fico definidor de su persona, propagado por el bando insurrecto a trav¨¦s de fotograf¨ªas, carteles y todo tipo de escritos en, prosa o verso de autores como Salaverr¨ªa, Gim¨¦nez Caballero, S¨¢muel Ros, Pem¨¢n o Marquina.En definitiva, la propuesta no pasar¨ªa de ser una imaginativa hip¨®tesis imposible de demostrar -"obsesi¨®n y diversi¨®n / del poeta solitario. / Insignificante y vario / tema de meditaci¨®n": M. Machado, A mi sombra-, de no ser por la circunstancia de que 'Voyou' se public¨® por vez primera en el n¨²mero 7 de la revista segoviana Manantial, aparecido en 1929 -con un verso m¨¢s tras "lo vio apenas el d¨ªa": "La noche lo cri¨®"-, con lo cual, entenderlo como una cr¨ªptica s¨¢tira contra Franco es, desde luego, "bastante audaz". En dicha revista aparecieron las firmas, entre otros, de A. Machado, C. Conde, E. de Champourc¨ªn, L. de San Saor, Unamuno, R. G¨®mez de la Serna, B. Jarn¨¦s, C. M. Arconada, Gim¨¦nez Caballero, M. Zambrano o G. Diego. La Academia de Historia y Arte de San Quirce de Segovia hizo una edici¨®n facs¨ªmile- en 1986. M. Machado colabor¨® en ella dos veces, no rese?adas hasta hoy: adem¨¢s del citado 'Voyou', en el n¨²mero 2 (1928) public¨® 'Paisaje. Verano', 'Paisaje estival' en Phoenix (1936). El car¨¢cter sint¨¦tico, fragmentario, as¨¦ptico, impersonal, fr¨ªo y desapasionado de ambos poemas, si algo manifiestan, es que el poeta estaba, en la medida de sus posibilidades y de su sensibilidad "modernista", atento a las novedades de la vanguardia y la "joven literatura": no olvidemos su participaci¨®n en la pol¨¦mica sobre el ultra¨ªsmo, donde fue contestado por Borges; su rese?a de Imagen, de G. Diego, quien lo incluir¨ªa. en sus fundacionales antolog¨ªas de 1932 y 1934; su participaci¨®n en ¨ªndice o Alfar, o la calurosa acogid¨¢ de su Ars moriendi (1921) por parte de G¨®mez de Baquero, D¨ªez-Canedo, A. Espina o J. Guill¨¦n.

En cualquier caso, los resultados de 'Voyou' no son demasiado buenos; por ello, seguramente, no lo recogi¨® en Phoenix (1938), publicado a instancias d¨¦ Altolaguirre, ni en Poes¨ªa (Opera Omnia Lyrica) de 1940 y 1942, y s¨®lo lo hizo en el crepuscular Cadencias de cadencias (1943), en la secci¨®n 'Mal poema'-de evidentes resonancias con El mal poema, 1909, donde 'Internacional' comienza: "Chulo, souteneur, maquereau", y en esa l¨ªnea de tem¨¢tica canaille se, inscribe Voyou-, apartado heterog¨¦neo formado por 10 composiciones, en su mayor¨ªa publicadas anteriormente, con el denominador com¨²n de un severo tono melanc¨®lico de soledad y acabamiento, amores no posibles y dolientes madrigales. Quede con esto desmentida la hip¨®tesis de que en Voyou se esconde Franco: nunca fue ¨¦sa la intenci¨®n de su creador.